𝚜𝚘𝚕𝚘 𝚊𝚖𝚒𝚐𝚘𝚜 • 6ta RD Harry Potter

22. ¿qué está qué?

Sink or swim - Victor Ray

El viaje en tren fue la mitad con mis amigos, la mitad con Fred en algún compartimento por ahí mientras hablábamos de cuando nos mandaríamos cartas o de cuando iríamos a visitar al otro, solo pasamos tiempo de calidad abrazados y comiendo ranas de chocolate porque estaba en mis días y me sentía inflamada y gorda lo que él tuvo que aguantar esos cambios de humor mientras comía, a veces se reía y se tenía que disculpar porque me hizo llorar.

Así que cuando llegué a la estación con los ojos rojos e hinchados mis amigos lo vieron mal y mi papá también, aunque creo que antes de querer matarlo por hacer llorar a su hijita, aunque se quería desmayar cuando me dije que Fred era mi novio. Mamá ya sabía lo de Fred desde un inicio, pero decidimos por el bien la salud de papá ocultarle la noticia hasta estar en persona. Me tuve que despedir rápido de todos para irnos a casa antes de que papá volviera a sus cinco sentidos y quisiera matar a Fred.

-¡Vuelve aquí, señorita! -me gritó cuando intenté huir una vez que lo dejamos en la sala

-¡Pero estoy cansada, papá!

-No, ven aquí. Yo te dije que no quería a ningún chiquillo rondando atrás de ti, ¿Cómo es posible que tengas novio? Creí que teníamos un trato

-Pero ya lo conoces, no entiendo porque el regaño. Es un buen chico, estoy muy enamorada y me trata muy bien.

-Eres demasiado joven para un novio.

-Terrón -mamá lo regañó- no le hables de moralidad a tu hija cuando tu y yo somos novios desde nuestro tercer año en Hogwarts. Mi niña tiene derecho a tener pareja, mientras se cuide y sepa respetarse. Fred es un buen niño y lo conoce desde que tiene cinco años, es normal que se hayan enamorado.

No quería que esto se convirtiera en una pelea marital.

-Yo también conozco a otras personas desde que tengo cinco años y no me enamoré de ellas. Me enamoré de ti. Es mi hija de quién estamos hablando

-Y mi hija también -mamá frunció el ceño-. Yo la cargue en mi vientre por nueve meses, la crié en una guerra con tu madre odiandonos. Mi hija merece a alguien que la amé tanto cómo yo te amo para aceptar vivir en una casa dónde ese estúpido cuadro de tu madre nos sigue insultando.

Papá se quedó en silencio durante unos minutos y yo sólo estaba parada ahí incómoda. Mamá estaba al borde de las lágrimas y parecía que en cualquier momento iba a explotar en esa guerra de miradas que parecía ser de una comunicación formada a partir de los años. Vi cómo papá se acercó a ella tomándola por las mejillas para verse a los ojos, mamá lo tomó por la cintura, papá bajo a besarla lentamente por unos segundos para después juntar sus frentes y comenzar a susurrarse cosas que apenas podía ver sus bocas moverse. Después papá me miró calmado.

-Bien -suspiró-, dejaré que tengas novio, pero si el idiota -mamá golpeó su espalda haciéndolo apretar los labios-, si el chico te hace llorar o te lástima de alguna manera olvídate de que vuelva a aceptarlo en está casa y no me contendré con mis comentarios cuando veamos a los Weasley

-Esta bien -asentí apretando mis labios para no sonreír

-Ahora... -mamá suspiró- siéntate un minuto

Se veía serio el asunto y a mamá no le gusta hablar con papá en el mismo lugar si es algo entre nosotras, así que me preocupé al ver que papá la tomaba de la mano llevándola a sentarse en el sofá de dos plazas. Caminé con lentitud y nervios hasta el sofá más grande frente a ellos.

-¿Está todo bien?

-Todo está perfecto -dijo papá sin mirarme

-Me están asustando