LOVE ME, BITCH [skz family universe]

17

Los ojos castaños miraban de un lado a otro sin abandonar el objetivo. La azabache exhaló el aire e intentó dar su atención a la revista en sus manos sin embargo, fue un completo fracaso, pues el ruido de las pantuflas arrastrándose en el suelo le era increíblemente agobiante.

—¿Puedes mantener tu maldito culo quieto? Lina, You're pregnant!

La aludida se detuvo repentinamente. Su mirada se clavó en los ojos de su hermana, sintiéndose verdaderamente frustrada. Innie se arrepintió de regañarla y un escalofrío le pellizcó la espalda a causa de su miedo. Abandonó la revista y se levantó del sofá, buscando tomar las manos de su hermana para guiarla al sofá.

—What's wrong?

Lina ni siquiera se vio con ganas de pelear por el inglés, entendió que su hermana no iba a adaptarse tan pronto, así que lo ignoró y simplemente la abrazó, ahogando su frustración.

—Es un maldito imbécil, un cabrón, un hijo de puta... —murmuró.

—¿Algo que no sepa?

—¡Innie! —se levantó, tomándola de los hombros—. ¡De tantos preciosos momentos, mi embarazo surgió de una noche de borrachera! —chilló—. Ese imbécil se emborrachó en una junta de la empresa y luego llegó a directamente a la habitación para joder...

—¡Yaaaah! I get it, right? —le cubrió la boca—. ¿Eso es lo que te tiene tan estresada?

—No —puchereó cuando fue liberada—. Uno de los proveedores de la carne me dijo que ahora no tiene la cantidad completa de mi pedido, pero entonces me acordé que Seungmin se acostó conmigo y yo estaba demasiado cachonda como para decirle que se pusiera el jodido condón...

—Lina, please, no quiero más información —se quejó, tragando aire—. ¿Cuándo es el evento?

—Este sábado —respondió sin mucho entusiasmo.

—Aún hay tiempo, hermanita, habla con el proveedor y dale una fecha para que te entregue la carne, dile que le pagarás hasta entonces.

—Sí, sí, lo tengo —murmuró.

Innie acarició la cabellera de su hermana. No podía negar que la noticia del embarazo la tenía emocionada, pero al mismo tiempo se moría en el mar de incertidumbre porque Lina se estaba negando a hablar con Seungmin. No quería meterse en el matrimonio de esos dos sin embargo, estaba sintiendo que se iba a volver más loca viviendo con su hermana que con sus padres.

—¿Cuándo darás la noticia? —indagó con cuidado, dándose la libertad de acariciar el vientre de su hermana.

—No lo sé, por ahora sólo quiero que mi bebé esté bien, quiero decir, estuve fumando dos cajetillas diarias y bebiendo botellas enteras de licor —lamentó asustadiza—. No quiero que mi pelea con Seungmin termine afectando al bebé.

Innie sonrió enternecida ante la tonada protectora de su hermana mayor. Le resultaba extraño, pero precioso verla con los ojos brillantes. Además, ella tampoco quería que Lina se viera en escenarios arriesgados porque anteriormente la había visto adorar a su pequeño sobrino, dejándole en claro que Lina iba a ser una madre espléndida.

—¿Por qué no vamos a visitar a Hyunjinnie? Probablemente necesitas ver a Channie —sugirió.

—De acuerdo —asintió—. Igualmente, tengo algunas cosas que preguntarle a Jinnie.

Innie asintió y la dejó ir por su abrigo. Ambas se alistaron y salieron del edificio, hundiéndose en un silencio que se amortiguó con la radio. La menor de ambas se encargó de manejar y sólo hablaron por míseros momentos donde Innie se preocupó por las náuseas de su hermana.