El bosque prohibido

Capitulo 11

Me quedo totalmente congelada con la información que acabo de recibir.

¿Seré yo?

Me van a matar.

Un momento, si fuera yo, ya me habrían apresado.

-¿Quién es la chica? -pregunto, jugando con mi cabello nerviosamente.

-Es la hija del Sr. William -dice Aurora.

-¿Helga? -pregunto, porque el Sr. William tiene otra hija, pero es pequeña.

-Sí, ella -afirma Brenda.

Helga es una chica de 19 años, muy reservada; nunca pensé que podría hacer algo así. El Sr. William tiene 2 hijas y su mujer murió dando a luz a la segunda.

-Dicen que la encontraron haciendo cosas indebidas -dice Aurora, y las demás chicas suspiran.

Los licántropos son muy guapos y, si unes eso a la falta de experiencias de las jóvenes del pueblo, el resultado es prohibido, tan prohibido como los árboles del bosque.

Mis oídos se aturden al sonido de las campanas; eso significa que hay una reunión general. No suelen haber este tipo de reuniones muy a menudo; en mis 17 años de vida, solo he asistido a 3. Se hacen para dar información importante a todo el pueblo: juicios y fusilamientos, aunque a Helga no le hicieron un juicio público.

Las personas emergen de sus casas y se reúnen en la plaza. Nosotras estábamos desde antes, por lo que quedamos en primera fila. Los oficiales traen a Helga esposada. Veo a su papá, que se para casi junto a mí.

El Sr. William está en primera fila, mientras dos oficiales suben a la tarima. Uno sostiene a Helga y el otro sostiene una hoja de papel doblada en dos, que debe ser la sentencia; solo hay que esperar al jefe.

-Los hemos reunido aquí para dar juicio a la señorita Helga William por el delito de acostarse con un licántropo enemigo de nuestro pueblo, el cual también hemos traído aquí, para que ustedes sean testigos de cómo el pueblo de Brushwood hace justicia al mal y castiga lo mal hecho. Que no les quepa ninguna duda de que nadie que tenga el mínimo roce amistoso con una de estas despreciables criaturas se le va a dejar vivir. No importa si es joven o anciano. Los únicos que están libres son los niños de cinco años para abajo.Los demás no se escaparán. Algún día aniquilaremos a cada una de esas despreciables criaturas que matan a los nuestros y seducen a nuestras damas. ¡Justicia!

Todos nos quedamos en silencio; creo que el límite de edad es muy poco. Ya me han dejado muy claro que he roto las reglas en todo su esplendor y que no debería seguir haciéndolo.

Tengo 3 caminos:

A) Hacer caso a las advertencias y nunca más ver, ni hablar, ni besar, ni tocar a Lobo.

B) Seguir haciendo todo eso y terminar en una situación similar a esta.

C) Matarme yo misma.

Creo que voy a optar por la opción B.

En ese momento traen a un lobo casi inconsciente con varias cadenas puestas y varios hombres sujetándolo. Más atrás llega el jefe y sube a la tarima. Todos bajamos la cabeza en señal de respeto. El jefe toma el papel y empieza a leerlo.

- Por el crimen de tener relaciones sexuales con un licántropo, se condena a Helga William y a su amante, un lobo enemigo de nuestro pueblo, a muerte por fusilamiento.

Todos se escandalizan; el padre de Helga se queda completamente inmóvil. Sabe que no puede protestar. Los oficiales los acomodan en la pared de la tarima, los amarran y sacan las escopetas.