La Nave del Caos

Capítulo 17.- La batalla

Diario de Emi McDowell

7 de Junio, 2036. 

Después de ir a la casa de Strauss por los encendedores y las latas de graffiti sin miedo a nada y con la única motivación de rescatar a nuestro amigo, fuimos hacia la unidad donde Rodrigo vivía.

-Aquí fue donde oí los gritos... -dijo Paula señalando la alcantarilla.

-¡Perfecto, hay que meternos! -dijo Strauss. 

-¡No mames, Strauss, no podemos meternos así! -exclamó Daniela. 

-Tranquila, Cancino, ya lo tengo todo preparado. Traje esta acuerda para que no nos lastimemos, chavos. -dijo Strauss. 

-Hay que amarrarla al clavo que está a lado. -recomendó. -¿Entendieron? -preguntó Strauss. 

-Ok -dijimos todos al unísono.

Strauss quitó la tapa de la coladera y luego amarró la cuerda al clavo.

-Puta madre, ¡Huele a mierda, literalmente! -exclamó Alexander. 

-Sí, Alexander, pero aún así tenemos que salvar a Landon, no importa a que nos enfrentemos, hay que salvarlo y mientras tanto aguantar todo lo que venga... -lo sermoneó Andrea. 

-¡Voy yo primero! -exclamó Strauss.

Strauss tomó la cuerda y saltó hacia adentro de la cloaca, luego fue Andrea, luego Maya, luego Alexander, luego José Eduardo, luego yo, luego Daniela y al último Paula la cuál entrecerró la cloaca para dejar la cuerda de por medio. 

-¡AAAAGHHHRRRR! ¡Qué puto asco! ¡Huele horrible a caca! -exclamó Daniela. 

-¡Cállate, Cancino! -le ordenó Strauss. 

-Está bien... payaso... -se enojó Daniela.

-¡SSSHHH! -le dijo José Eduardo.

-Cada quién prenda su encededor para poder ver... -nos ordenó Strauss.

Todos lo hicimos y nos abrimos paso entre el agua sucia plagada de excremento y orina. Caminamos por más o menos media hora hasta que oímos la voz de Landon.

-Chicos, ¿Son ustedes? -nos preguntó Landon. 

-¿Landon, eres tú? -preguntó Maya preocupada.

Landon apareció enfrente de la luz de nuestros encendedores completamente sano y salvo sin ninguna herida, sin embargo, había algo en el que me parecía extraño. Su piel era más blanca de lo normal, tenía las pupilas negras y la misma marca roja que el profesor de FOCE tenía debajo de la boca... Todos corrieron a abrazarlo excepto Andrea, Maya y yo. 

-Él no es Landon... -dijo Maya perturbada. 

-No... Sus pupilas, sus dientes, esa marca rara que tiene... es un... es un...-quiso decir Andrea.

-¿Hola, Mayita, no quieres venir a darle un abrazo a tu novio? -la interrumpió Landon con una sonrisa manipuladora que al verla me heló la sangre. 

-No... ¡Tú no eres Landon! -lo confrontó Maya preparando su encendedor y su lata en aerosol.

-¡ERES UN PUTO CAMBIAFORMAS! -exclamó Maya liberando el aerosol para hacer combustión con el fuego de su encendedor. 

Al hacer eso Maya le quemó la cara al cambiaformas que se hacía pasar por Landon lo que hizo que comenzara a revelar su verdadera forma mientras caía muerto contorsionándose en el suelo. En eso, pisadas en el agua y rugidos monstruosos se comenzaron a oír...era un ejército de cambiaformas... Paula, Strauss, Daniela y José Eduardo comenzaron a retroceder. 

-Chicos... prepáranse, la batalla contra estos malnacidos está a punto de comenzar... -dijo Strauss al enfrente del grupo como si fuese un general.