Una Nueva Rival

CAPÍTULO 15

POV NINO

¡LO HICE!

¡POR FIN INVITÉ A FUU-KUN A UNA CITA!

¡ESTOY MUY FELÍZ!

Tenía una gran sonrisa en mi rostro y tarareaba un canción mientras comía un cupcake.

Estaba esperando a que el cliente que nos había hecho aquel enorme pedido viniera a recogerlo. Ya hace una media hora que habíamos terminado, pero todavía no venían por él.

Fuu-kun estaba en el almacén terminando de acomodar las cosas que le había pedido el gerente.

Mientras tanto, yo debía empezar a planear que es lo que Fuu-kun y yo haríamos en su cumpleaños. Realmente aún no tengo un plan, pero le prometí que sería su mejor cumpleaños y planeo cumplir esa promesa.

Futaro: Listo — dijo entrando a la cocina.

Nino: ¿Terminaste?

Futaro: Sí — asintió levemente.

Nino: Ten — le di un cupcake de chocolate que le había hecho.

Futaro: Gracias — le dió un mordida. Lo miré esperando que criticara su sabor — Está delicioso.

Nino: Me alegra que te guste — expresé con alegría.

Futaro: ¿Tú lo hiciste?

Nino: Por supuesto — respondí con orgullo.

Ambos salimos de la cocina y nos fuimos a sentar a una mesa cercana.

De repente la puerta se abrió. Al voltear a ver noté que se trataba de Miku.

Miku: ¿Los estuve esperando afuera de la panadería? ¿Por qué siguen aquí? — preguntó confundida mientras se acercaba.

Futaro: Lo siento, Miku, pero estuvimos muy ocupados este día.

Nino: Estamos esperando a que un cliente venga por su pedido.

Miku: Entiendo — asintió levemente a la vez que se sentaba junto a Futaro.

Admito que me siento algo celosa, pero no quiero arruinar el ambiente, no después de que Fuu-kun aceptara tener una cita conmigo.

Futaro: Está bien si dejamos la planeación del experimento para mañana. Ya es muy tarde.

Miku: No hay problema — respondió mientras le daba una sonrisa.

De seguro disfruta ser a quien Futaro eligió para el trabajo de clases. Le tenía envidia, pero ganó justamente. No puedo reprocharle nada.

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Gerente: Aquí tiene — terminó de entregar las últimas cajas al cliente que había llegado diez minutos tarde.

Después de pagar se retiró y ahora por fin pudimos irnos luego de cambiarnos.

Nos despedimos del gerente quien nos dió las gracias por haber aceptado ayudarlo con el pedido.

Nino: Estoy agotada — comenté a la vez que sujetaba el brazo izquierdo de Futaro y me pegaba un poco más a él.

Una ofensiva nocturna nunca está de más.

Miku: Nino.

Al mirar a mi hermana noté que me miraba con seriedad, sin embargo a los pocos segundos ella hizo lo mismo y se pegó a Futaro.

Futaro: ¿Podrían soltarme ambas? — nos pidió algo apenado. Era tierno cuando se ponía así.

Miku y yo nos miramos mutuamente y a los pocos segundos soltamos a Futaro.