SAFE AND SOUND | MATÍAS RECALT

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PARTE DOS

CAPÍTULO DIECISIETE

DESDE LA VISITA A LA CLÍNICA, TANTO LA CERCANÍA ENTRE MATÍAS Y MARÍA Y LOS NERVIOS DE LA CHICA HABÍAN AUMENTADO A LA PAR. Matías parecía pegarse a ella constantemente cuando estaban en su departamento: cocinando a su lado, recostando su cabeza en su hombro mientras miraban la televisión e incluso terminando durmiendo a su lado cuando se quedaban dormidos en el sillón luego de ver una película.

Sin embargo, María no podía relajarse. Toda su preocupación y atención estaba en la pequeña vida que crecía dentro de ella. No quería tener una relación complicada con el padre de su hijo, en especial para que su bebe viera que ambos tenían un vínculo sano, pero aquello no era en lo único en lo que pensaba. Necesitaba enfocarse en planificar todo, desde una posible mudanza a un departamento más grande para que el bebe pudiera tener su propia habitación hasta leer opiniones y calificaciones de guarderías maternales.

Efectivamente se estaba volviendo loca. Incluso había decidido comenzar a separar la mayor parte de su sueldo a todos los gastos para preparativos del bebe. Mientras estaba haciendo una planilla en Excel del dinero que tenía ahorrado para poder distribuirlo en los primeros meses de vida del bebe, sintió cómo si su corazón se detuviera por un momento al darse cuenta de que todavía no le había revelado las noticias a su familia.

Aún luego de una sesión de fotos para un lanzamiento de un perfume, María no pudo sacarse aquel pensamiento de su cabeza. Distraídamente retiró los pequeños ganchos de mariposa de su cabello, forzando una sonrisa en su rostro al escuchar unos pasos acercarse a ella.

— Andabas full desaparecida vos. -se quejó Dominique, a pesar de que tenía una sonrisa llena de humor.- ¿Ya estás del anillo o qué onda?

María se obligó a sí misma reír, agarrando un algodón para poder retirar la sombra violeta de sus ojos. — Estamos a full con la promoción de la peli. -respondió vagamente.- Apenas volví de Rosario y ya tengo dos entrevistas en radios distintas.

Dominique asintió en entendimiento, comprendiendo completamente las demandas que había en la chica por la película, en especial por escucharlas por parte de Enzo. — ¿Y con el modelaje cómo lo estás balanceando? -preguntó con curiosidad, estirando su mano para agarrar su paquete de cigarrillos.

— Bien. -contestó María, levantándose de su lugar para evitar el olor a cigarrillo.- Organizando todo lo mejor posible con la nueva cápsula de Kosiuko que me contactaron para hacer. -agregó.

Su amiga tomó una larga calada del cigarrillo antes de sonreír. — Buenisimo. Tenemos que celebrar. -ofreció.

Una parte dentro de María quería revelarle la verdad acerca de su embarazo. Sabía que era cuestión de tiempo para que sus amigos lo supieran, y la chica necesitaría toda la contención y apoyo posible en los próximos meses. De todos modos, ni siquiera sabía como explicar su actual relación con Matías, y menos como decir la manera en la que habían llegado a aquella situación.

Para su suerte, en cuanto Dominique abrió una ventana para dejar que saliera el humo de su cigarrillo, al ver la sonrisa llena de complicidad en su rostro supo que la conversación tomaría otro rumbo. — Vino tu chofer personal. -señaló la chica.

María no pudo evitar un leve rubor en sus mejillas al ver a Matías esperando pacientemente al lado de su auto. Revisaba su celular, mandando un mensaje rápido antes de encenderse un cigarrillo. El celular de María no tardó en vibrar con una notificación proveniente de un mensaje del chico para avisarle que había llegado a pasarla a buscar de su producción de fotos.