Las semanas siguientes a la propuesta de matrimonio fueron un torbellino de emociones y actividades para Olivia y Jordan. La noticia de su compromiso había sido recibida con entusiasmo por amigos y familiares, y ahora el enfoque se dirigía a la planificación de la boda y la preparación para la llegada de su bebé.
El apartamento de Olivia y Jordan se convirtió en un bullicioso centro de actividad. Las reuniones con el planificador de bodas, las visitas a tiendas de vestidos y la organización de los detalles del gran día ocuparon gran parte de su tiempo. Cada aspecto de la boda era cuidadosamente considerado, desde el lugar de la ceremonia hasta el diseño de las invitaciones y el menú.
Olivia se sumergió en la planificación con una mezcla de emoción y nerviosismo. Había decidido que la boda sería una celebración íntima pero elegante, con detalles que reflejaran su estilo personal y su amor por Jordan. Las pruebas de vestidos, las reuniones con los floristas y los ensayos de la ceremonia se convirtieron en parte de su rutina diaria. Aunque el proceso era abrumador en ocasiones, cada paso le acercaba más a la realización de sus sueños.
Jordan, por su parte, se encargó de coordinar muchos de los aspectos logísticos y de la organización. Se encargó de los detalles de la recepción y de asegurarse de que todo estuviera listo para el gran día. También se tomaba un momento para relajarse y disfrutar de la compañía de Olivia, ya que sabía que el tiempo previo a la boda podía ser estresante.
Un día, mientras Olivia estaba en la consulta con su obstetra, Jordan decidió hacer una sorpresa especial. Sabía cuánto significaba para Olivia escuchar los latidos de su bebé y había planeado una cita para que pudieran compartir ese momento juntos.
La consulta transcurría con una sensación de anticipación. Olivia estaba recostada en la camilla, el médico aplicando gel en su vientre mientras preparaba el equipo para el ultrasonido. Jordan estaba a su lado, sosteniéndole la mano y observando con interés.
—Estamos listos para escuchar el latido del corazón del bebé —dijo el médico, con una sonrisa tranquilizadora.
Olivia miró a Jordan con una mezcla de nervios y alegría, sintiendo una oleada de emoción. Jordan apretó su mano, dándole ánimo mientras el médico colocaba el dispositivo sobre su abdomen.
Un momento después, el sonido claro y rítmico del latido del corazón del bebé llenó la sala. Era un sonido que evocaba una sensación de maravilla y esperanza, y Olivia y Jordan se miraron con lágrimas de felicidad en los ojos.
—Es maravilloso —dijo Jordan, su voz llena de emoción—. Escuchar el latido del corazón del bebé hace que todo esto sea aún más real.
Olivia asintió, sus ojos brillando con emoción. —Sí, es increíble. No puedo esperar para conocer a nuestro pequeño.
El médico continuó con el ultrasonido, mostrando a Olivia y Jordan las imágenes en la pantalla. Cada movimiento y latido del bebé parecía estar en perfecta sincronía con sus corazones, y el momento fue una hermosa reafirmación de su amor y la nueva vida que estaban a punto de comenzar.
Después de la consulta, Jordan y Olivia salieron del consultorio, la alegría en sus rostros aún palpable. Jordan había planeado una celebración especial para conmemorar el momento, reservando una cena en el restaurante donde había hecho su propuesta de matrimonio.
Durante la cena, compartieron la emoción de escuchar los latidos del corazón del bebé con amigos cercanos y familiares que se unieron para celebrar. Fue una noche llena de risas, brindis y conversaciones sobre el futuro.
A medida que avanzaba el tiempo, la planificación de la boda continuaba con entusiasmo. Olivia y Jordan estaban inmersos en los preparativos, asegurándose de que cada detalle estuviera perfecto para el gran día. El ritmo de la planificación estaba en sincronía con la creciente expectativa por la llegada de su bebé.
El capítulo cerró con una imagen de Olivia y Jordan en su apartamento, rodeados de muestras de tela para el vestido de novia y listas de invitados. Mientras revisaban los últimos detalles, compartieron una mirada de complicidad y amor, sabiendo que estaban construyendo no solo una celebración de su amor, sino también el comienzo de una nueva etapa en sus vidas.
La alegría de los latidos del bebé y el entusiasmo por la boda eran reflejos de la esperanza y la promesa de un futuro lleno de amor, y el capítulo concluyó con un sentimiento de anticipación por el próximo gran capítulo en su vida juntos.
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PERO NO TODO ES COLOR DE ROSA
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ENTRE ESTRELLAS Y SENTIMIENTOS🤍
Romance💞"Olivia Valentina Córdova Reyes, hermana del famoso futbolista Sebastián Córdova del Club Tigres, está a punto de vivir un romance inesperado cuando conoce a Jordan Carrillo Rodríguez, la estrella del Club Santos. A pesar de sus mundos distintos y...
