Capítulo 39: El Plan de Carla

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La tranquilidad que había vuelto a la vida de Olivia y Jordan después de las amenazas de Carla Sánchez estaba a punto de ser destrozada. Mientras Olivia y Jordan intentaban retomar su vida normal y concentrarse en los preparativos finales para su boda y el nacimiento de su bebé, Carla estaba elaborando un plan oscuro y retorcido para hacerles daño.

Carla había estado observando desde las sombras, aprovechando cada oportunidad para llevar a cabo su venganza. Su furia no solo se dirigía hacia Jordan, sino también hacia Olivia y el bebé, quienes para ella representaban una especie de obstáculo en su camino. Estaba decidida a demostrar que no se podía ignorar su sufrimiento.

Era una noche oscura cuando Carla puso en marcha su plan. Con una determinación fría y calculadora, Carla se dirigió hacia el vecindario donde vivían Jordan y Olivia. Su plan era meticuloso y peligroso: sabía que atacar directamente podría hacer que la policía la identificara rápidamente, así que optó por un enfoque más sutil, pero igualmente devastador.

Carla se había enterado de que Jordan y Olivia estaban ocupados organizando los últimos detalles para su boda. Aprovechando esta distracción, se acercó a la casa de la pareja con la intención de introducirse sin ser detectada. Había pasado días planeando y ejecutando una serie de acciones que le permitirían causar el mayor daño posible.

Mientras Jordan y Olivia estaban en una reunión con el planificador de bodas en la sala principal de su casa, Carla aprovechó la oportunidad para entrar en la casa a través de una ventana trasera que había logrado forzar con cuidado. Una vez dentro, su objetivo era claro: poner en peligro la seguridad de Olivia y el bebé.

Carla se movió con sigilo por la casa, dirigiéndose hacia la cocina. Sabía que el principal enfoque de su ataque debía ser el lugar donde Olivia pasaba la mayor parte del tiempo. Allí, empezó a realizar su plan: había traído una sustancia tóxica que planeaba añadir a los alimentos que Olivia solía preparar. Sabía que, si lograba hacerlo, el impacto sería devastador y causaría una serie de problemas graves.

Mientras tanto, en la sala principal, Jordan y Olivia seguían discutiendo los detalles de la boda. La atmósfera era de emoción y anticipación, sin darse cuenta de la amenaza inminente.

—¿Cómo vamos con los preparativos para la recepción? —preguntó Olivia, revisando la lista de tareas con el planificador.

Jordan sonrió, tratando de mantenerse positivo. —Todo parece estar en orden. Solo faltan algunos detalles menores, y estaremos listos para el gran día.

La conversación fue interrumpida por un extraño ruido proveniente de la cocina. Olivia frunció el ceño y se levantó, preguntando si había sido algún sonido extraño.

—Voy a revisar, ¿está bien? —dijo Olivia, con una ligera preocupación en su tono.

Jordan asintió y siguió revisando los papeles mientras Olivia se dirigía a la cocina. Lo que no sabía era que Carla había estado esperando precisamente ese momento. Justo cuando Olivia entró a la cocina, Carla estaba en el proceso de dejar la sustancia tóxica en uno de los recipientes de comida.

Olivia se dio cuenta de la presencia de Carla demasiado tarde. —¡¿Quién eres tú?! —exclamó, su voz llena de pánico al ver a Carla en la cocina.

Carla se giró lentamente, su rostro mostrando una mezcla de satisfacción y desprecio. —Hola, Olivia. Parece que llegué justo a tiempo para hacer un pequeño ajuste en tu vida.

Olivia trató de alejarse, pero Carla la sujetó con fuerza. —¡No te atrevas a hacerle daño a mi familia!

Jordan, alertado por el grito de Olivia, corrió hacia la cocina y encontró a Carla en medio de la escena. Sin perder tiempo, Jordan se lanzó hacia ella, tratando de apartarla de Olivia y detener su plan.

—¡Déjala en paz, Carla! —gritó Jordan, forcejeando con ella.

Carla, al ver que el plan se estaba desmoronando, intentó escapar. Jordan logró inmovilizarla y la retuvo hasta que llegó la policía, que había sido alertada por la alarma de seguridad que se había activado durante la confrontación.

Una vez que la policía llegó y arrestó a Carla, Olivia y Jordan se quedaron en estado de shock. La realidad de lo que había ocurrido les golpeó con fuerza. La sustancia que Carla había intentado introducir en la comida fue identificada como altamente tóxica, lo que significaba que la situación podría haber tenido consecuencias graves para Olivia y el bebé.

En la sala de emergencias del hospital, el personal médico realizó una revisión exhaustiva a Olivia para asegurarse de que no hubiera sido expuesta a la sustancia tóxica. Afortunadamente, la intervención de Jordan y la rápida acción de la policía habían evitado un desastre.

Una vez en casa, Olivia y Jordan se abrazaron con fuerza, el alivio y el miedo aún frescos en sus corazones. La amenaza de Carla había sido neutralizada, pero el impacto emocional de la experiencia les recordó la fragilidad de su felicidad.

El capítulo concluyó con Olivia y Jordan sentados en el sofá, rodeados de una sensación de seguridad y una determinación renovada. Aunque el peligro había pasado, la experiencia les había mostrado la importancia de mantenerse alerta y unidos frente a cualquier adversidad. Su amor y su compromiso les habían permitido superar uno de los desafíos más oscuros de sus vidas, y estaban listos para enfrentar lo que viniera con la certeza de que juntos podían enfrentar cualquier obstáculo.

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