V Un solo objetivo

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-¿Mamá?- asomó su cabeza por cada una de las puertas de las habitaciones, era una casa pequeňa y no se molestaría en tardar demasiado para revisar todo su hogar -¿Papá?- Pero nadie respondió, cerró con delicadeza la pequeňa puerta de madera de la habitación de sus padres temiendo no romperla, volvió al lugar en el cual desde el inicio había estado, aquel cómodo sillón, pero al intentar volver, chocó contra un cuerpo un poco más alto que el de ella haciéndola caer sobre su trasero
-Ouch- se quejó y levantó la mirada a aquel hombre -¿Se te a perdido algo grandulon?- llevo su mano sobando sus codos
-Despidete niňita- Y ante aquellas palabras saco un arma desde adentro de sus ropajes apuntandole a la cabeza, pero otro disparo le ganó el juego atravesando la ventana de cristal y dando en el blanco, justo en el hombro de aquel sujeto
-¡Wow!- ____ retrocedió como pudo corriendo justo a la salida de su pequeňa casa, el corazón le latía a mil por hora y su respiración se volvía completamente agitada y pesada, visualizo a lo lejos un auto rojizo y antiguo, corrió hacia el a toda velocidad rogando por encontrarse a su padre en el volante
-¡Papá!- gritó con fuerza haciendo que el auto se detuviera rudamente y abrazó a su padre sin importar que estuviese fuera y el adentro
-Cariňo ¿Que a pasado?-
-Alguien a entrado a casa e intentó matarme pero alguien más le a disparado a la cabeza y yo no, no se papá- habló con rapidez dejando escapar unas cuantas lágrimas, subiéndose al coche y terminando de llegar al lado de su padre, era asombroso como un padre le puede dar valentía a sus hijos, pues al lado de él se sentía invencible, cogió un pequeňo bate de fierro que se encontraba colgado en una de las paredes de la casa y caminó tras su padre, al llegar al sitio esperado dónde todo lo malo había ocurrido, no había nadie, ni sangre derramada, más que la ventana estrellada por la pequeňa pero poderosa bala, no había cuerpo ni nada que delatará que aquello era cierto
-Papá- Habló con miedo -te juro que fue real lo que te he dicho-
-Tranquila cariňo- acarició la cabeza de ____ -no he dicho que dudo de ti-
-____, Jason- la voz de Penny alegro los oídos de la niňa, safandose de los brazos de su padre y lleno a los de su madre con los ojos cristalizados
-Mamá- susurro sollozando, la mirada de Penny se encontró con la de Jason preocupada y llena de interrogantes
-¿Que a pasado, cariňo?-
-Alguien a entrado y la a asustado, y mira que nos han dejado un lindo regalito más para pagar- seňaló la ventana rota.

Casa de Rebeca
-Oh cariňo eso a estado increíble- Suspiro Chris acomodándose en el sillón abrazando a su preciosa mujer favorita de todas las que tenía, pero nadie le hacía sentir más allá de la excitación y el placer, llevó otro cigarrillo a su boca y disfruto de aquella paz antes de que acabará maňana por la maňana.

Tu eres mi misión (Chris Pratt)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora