4 | NOCHE DE CHICAS

35 21 20
                                    

EMMA

—Piedra, papel o tijera.

—¡Esooo! Ya llevo dos —dijo Mary haciendo su tonto baile de la victoria.

—No es justo —hice pucheros—. Es más, ya no juego.

—Tramposa de mierda —se puso furiosa—. Vamos, Odette, dile algo.

—Okey, ya está, escogeré la película yo por ustedes.

Mary y yo nos miramos arrepentidas y nos lanzamos hacia Odette para arrebatarle el control. Si era ella quien escogía la película, nos saldría sangre por los ojos y se nos reventarían las orejas.

Hay que dejar en claro que el buen gusto de mi amiga pelirroja no coincidía mucho con el de nosotras dos.

—¿Qué, ya se decidieron? —habló Odette como una madre calmando a sus hijas—. ¿O tendré que poner la saga completa de Boyka hasta quedarme dormida?

Si lo decía así, daba mucho miedo porque, uno, Odette no dormía y dos, se convertiría en camionero y empezaría a gritar como loca en cada pelea.

—Oh no, no hay necesidad de usar la violencia —dijo Mary despreocupada mientras me miraba con malicia—. Toma, es todo tuyo.

—¿Y qué vas a poner? —preguntó Odette—. Espero que sea algo "muy bueno" —alzando la voz con eso último.

☯️☯️☯️

Habían pasado cinco horas desde que se me otorgó el poder de reproducir lo que quisiera en la TV. Habíamos recorrido medio Disney (por no decir dos pelis) y ahora estábamos viendo una serie que Odette me había recomendado. Me giré para ver a las chicas: Mary ya estaba cayendo en las garras del sueño, mientras que Odette se mantenía inexpresiva, prestando atención a la trama.

¿Desde cuándo le gustaba ver este tipo de cosas?

Estaba claro que La casa búho no era mi estilo en animación, pero si Odette quería verla conmigo, me tragaría mis peros y la vería.

Íbamos por el capítulo 16 de la temporada 1. Observé cómo en el rostro de mi amiga se marcaba una pequeña sonrisa cuando Luz y Amity recibieron la corona. Y no solo lo había hecho en esa escena, también en capítulos anteriores.

—Chicas —nos sacó de nuestros pensamientos la voz de Mary—, ¿qué tal si vamos por algo de comer? —dijo entre bostezos.

—Me parece buena idea, ya ni me queda soda.

—Y yo me quedé sin palomitas —dije mirando solo los maicitos del fondo.

☯️☯️☯️

Descendimos entre carcajadas por los escalones. El motivo era un buen chiste involuntario de Odette sobre los ronquidos de Mary.

—Ya cállense, ¿o acaso quieren que alguien las escuche? —dijo Mary, sonando avergonzada.

Seguimos riendo. Cuando llegamos al último escalón, vimos una silueta avanzar hacia nosotras desde la puerta. Mary se puso detrás de Odette, ese era su poderoso signo de defensa. Odette se mantuvo erguida, mientras que yo ya sabía de quién se trataba.

La oveja negra de los Beycker, Scott Beycker.

Se acercó a nosotras luciendo su espantoso pero reluciente pelo, llevaba puesto un traje elegante y unos zapatos que combinaban a la perfección con él. Sería el colmo que no supiera por lo menos vestirse, si fuese así, lo negaría como hermano.

—Pero si son mis "super powerful girls."

—Ja, ja, pero si es mi queridísimo "little brother." Vuelve a tu habitación antes de que le diga a papá lo tarde que llegaste.

—Sí, ya apártate de nuestro camino, Scott —frunció el ceño Odette.

—¿Por qué son tan odiosas conmigo? —dijo dejándonos atrás—. A la única que vale la pena saludar es a ronquiditos... digo, a Mary.

Mary intentó decir algo, pero optó por quedarse callada. Scott nos observaba desde el segundo escalón de las escaleras.

—Por cierto, "hermanita," de nada por haber tenido una cita con Jennifer.

—Luego hablamos de eso, tenemos hambre y sed, así que sigue tu camino —le hice un ademán con las manos—. Por cierto, buen traje, pero el cuello, Scott, el puto cuello lo tienes mal.

Seguimos nuestro camino y, de un momento a otro, dejamos de estar serias y empezamos a reír.

—No se burlen, aún trabajo en él —continué riendo, ahora muy agitada.

—Hey, por lo menos hizo lo que acordó —lo defendió Mary.

No importaba cuánto lo ocultara, las dos estábamos conscientes de que Pequitas estaba re muerta por mi hermano. Solo que no la molestábamos con eso, después de todo, era un amor no correspondido, y no queríamos hacerla sentir mal al aclararlo. Mejor la dejamos permanecer en su ilusión hasta que llegara alguien (como ella decía) que le enseñara a amar.

☯️☯️☯️

Terminamos la primera temporada de la serie. Ronquidos ya hacía honor a su apodo, y Odette y yo empezamos a dar señales de sueño. Me senté frente al espejo para recogerme el pelo.

Mi cara era un desastre, caí en cuenta de que al día siguiente las ojeras me destrozarían el autoestima. Okey, exageraba.

—Tranquila, no te ves tan mal como quizás piensas —Odette me puso una mano en el hombro y me mostró una sonrisa.

—Sí, sí, no hay nada que un buen limpiado facial no pueda arreglar.

—Emma siendo Emma —rodó los ojos y me mostró una sonrisa.

Apagué la TV y tomé mis audífonos mientras me dirigía al rincón de almohadas. Me relajaría un poco. Toqué una música al azar y, mientras comenzaba, Odette me hizo una pequeña seña desde el sillón. Me mostró su teléfono, donde pasaban unas letras coloridas lentamente.

Emma

Quiero

Decirte
 
Que...

Ella apagó su teléfono y me dijo algo que entendí como un "olvídalo". No le di mucha importancia; de seguro era algo relacionado con la última película que vimos.

Me recosté, cerré los ojos, y entonces los recuerdos me golpearon.

Recordé el motivo por el que había bajado un poco los caprichos y berrinches.

Con una simple frase, él pudo hacerme reflexionar durante días.

Recuerdo...

—¿Crees que todo el mundo está dispuesto a verte como su amiga? —me miró en desaprobación—. Quizás sí, pero yo no soy todo el mundo. Solo porque impedí que te partieras la cabezota no significa nada. Así que déjame en paz, por favor.

Nota de la autora:

Disculpen la tardanza, aquí el capitulo que los dejará con cientos de cuestiones.

Pronto entenderán todo *risa macabra*

Me gusta tener el poder🌝✨






NO SON EL UNO PARA EL OTRO || EN PROCESO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora