Cap. L

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1 semana después el gran día había llegado. La casa estaba llena de risas, música y una atmósfera de alegría festiva. Los globos y las decoraciones estaban perfectos, y el pastel de cumpleaños, adornado con esmero, ocupaba un lugar destacado en la mesa. La fiesta en el jardín estaba en pleno apogeo, con niños corriendo y adultos conversando animadamente.

Eric García y varios compañeros futbolistas de Ferran estaban entre los invitados. Francesca estaba en el centro de la acción, mostrando con orgullo a sus amigos y a Alda cómo se decoró el lugar. Alda, con su pequeño vestido de cumpleaños, estaba rodeada de atención y regalos, mientras Ferran y Victoria se aseguraban de que todo estuviera en orden.

¡Papá! ¡Mira quién ha llegado! --exclamó Francesca, corriendo hacia Ferran y señalando a Eric y a los demás futbolistas que entraban al jardín.

Ferran sonrió al ver a sus amigos y les dio la bienvenida mientras Victoria saludaba a la familia de Ferran, que también había llegado para la celebración.

¡Eric! -dijo Ferran, dándole un abrazo a su amigo-- Gracias por venir. Francesca estaba muy emocionada por tu presencia.

Eric, con una sonrisa genuina, le dio un saludo amistoso a Ferran.

¡No podía perderme esto! Cuando me dijeron que era el primer cumpleaños de Alda, supe que tenía que venir. ¿Cómo está la cumpleañera?

Alda, al ver a Eric, extendió sus brazos hacia él, mostrando su alegría. Eric se agachó y le dio un pequeño obsequio envuelto en papel brillante.

¡Feliz cumpleaños, Alda! Este es para ti.

Francesca observó con admiración y un poco de celos mientras Eric entregaba el regalo a Alda. Sabía que había sido un detalle especial para ella también.

—¡Gracias, Eric! --dijo Francesca, dirigiéndose a él con una sonrisa radiante--. Todo está genial. ¡El pastel está listo para ser cortado!

Victoria se acercó con una bandeja con cupcakes decorados y empezó a repartirlos entre los invitados, mientras la familia de Ferran y el padre de Victoria se unían a la celebración.

¡Hola, papá! --dijo Vic , abrazando a su padre. Me alegra que hayas podido venir.

No podía perderme el primer cumpleaños de mi nieta --respondió el padre de Vic con una sonrisa cálida—. Todo está precioso.

Con la llegada de los invitados y el ambiente alegre en su punto máximo, la fiesta siguió su curso con muchas actividades para los niños. Ferran y Eric conversaron sobre el partido del fin de semana, mientras Francesca mostraba con entusiasmo a los amigos de su padre cómo hacer una manualidad especial para Alda.

El momento más esperado llegó cuando se anunció el corte del pastel. Todos se reunieron alrededor de la mesa mientras Ferran levantaba a Alda, con Francesca a su lado sosteniendo una vela.

¡Feliz cumpleaños, Alda! -dijeron todos al unísono mientras la niña sonreía y aplaudía.

Victoria tomó la foto de la familia reunida con Alda y el pastel, capturando el recuerdo perfecto de ese día especial.

A medida que avanzaba la fiesta, Francesca pasó tiempo con Eric, mostrándole sus juguetes favoritos y hablando sobre los regalos que había recibido. Eric, siempre amable, escuchaba atentamente y le hacía preguntas, asegurándose de que se sintiera especial.

Eric, ¿te ha gustado la fiesta? --preguntó Francesca, con un brillo de felicidad en los ojos.

Me ha encantado- respondió Eric-- Todo está perfecto. Gracias por invitarme.

De nada —dijo Francesca—. Gracias por venir y por el regalo y bueno que sepas que ha sido idea mía invitarte .Eres el mejor

Ferran , Francesca es a genial-- dijo Eric acercándose a su amigo

Que ha dicho mi hija está vez?

No ha dicho nada malo tranquilo, solo que me encanta lo espontánea que es"

Ah vale , es que últimamente está más "espontánea" que de costumbre

La fiesta continuó con juegos y risas, y al final del día, todos estaban satisfechos y felices. Francesca, cansada pero contenta, se acercó a Ferran y Victoria.

—Papá, mamá, ¿podemos hacer esto de nuevo el año que viene?

Ferran le sonrió y le dio un abrazo.

—Claro que sí, Francesca. Nos encantaría.

Victoria miró a su familia y a sus amigos con una sonrisa de satisfacción.

—Fue un día maravilloso. Gracias a todos por hacerlo tan especial.

Con el sol comenzando a ponerse, la familia de Ferran y los amigos comenzaron a despedirse, dejando atrás recuerdos inolvidables y una celebración que sería recordada con cariño por todos.

𝑁𝑢𝑒𝑠𝑡𝑟𝑎 𝐻𝑖𝑠𝑡𝑜𝑟𝑖𝑎  ~ Ferran Torres y Victoria de AngelisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora