•FRUTO PROHIBIDO• [COMPLETA]

Epílogo

Cinco meses después...

¡Puedo hacerlo!

Es solo un pequeño discurso. Diez minutos y habré terminado.

Calmate, Madison.

¡Calmate!

Siento que tengo los nervios a flor de piel.

— ¡Hey! ¿Estas lista? — Karen se me acerca y casi doy un brinco, así de nerviosa estoy.

— Creo que se me acaba de olvidar todo el discurso.

Karen me da un codazo y me pone las manos en los hombros.

— Lo harás muy bien — me anima mi amiga y a su lado llega Taylor.

— Apoyo lo dicho — expresa Taylor sonriendo —. Estoy seguro de que conmoverás a todo el público.

— Eh, ya lo veremos... — suspiro aun nerviosa.

— ¡Eh, chicos! — nos llama Keith acercándose —. Deberíamos ir a nuestros lugares. Ya va a empezar.

— Si, claro — Karen toma la mano de Taylor y me mira —. ¿Vienes, Madison?

— Sigo esperando a que llegue Brando. Se quedo atrapado en el tráfico...

— Bueno, al menos tu mamá grabara la ceremonia.

— Es cierto — digo y miro a la entrada.

— Además, tu mamá trajo un megáfono — informa Keith y la miro horririzada —. Pensé que debía advertirte ahora.

— Oh Dios, estas bromeando.

— No — responde y trata de no reírse —. Seguro que lo va a usar antes y después de tu discurso.

— Oh, cielos. ¡Gracias por avisarme!

Pongo los ojos en blando y sin mucho me río, y los despido.

Con o sin Brando, necesito un momento para aclarar mi mente. Y es entonces que lo veo escabullirse entre la multitud y acercarse a mi a zancadas.

— Gracias a dios llegue a tiempo — dice y me da un rápido beso, y me mira a los ojos —. Entonces, ¿que tan nerviosa estas?

— Digamos que estoy alterada.

— Vas a estar increíble — me dice y sonríe ampliamente —. Tu discurso es inspirador, reflexivo y entretenido. A todo el mundo le va a encantar.

— Eso espero.

— Lo se — afirma Brando.

— ¿Ves? Por eso te amo.  Por esto y por mil razones más.

— Siempre a tu sevioso — Brando hace un reverencia y ambos reímos.

El ambiente se puso mejor que antes.

— En ese caso... — me acerco y le susurro al oído —. ¿Crees que puedas convencer a mi mamá de no exagerar con el megáfono?

Casi se ahoga de la risa.

— ¿Trajo eso? — pregunta sin aguantar la risa.

Si, ríete. Como no eres tu el que va a pasar por eso...

— Si, lo trajo.

Se ríe de nuevo y sacude la cabeza con incredulidad.

— Claro, haré lo que pueda. Ahora ve y se la estrella del día. Te lo has ganado.

— No podría haberlo hecho sin usted, Sr. Clark — se lo digo de forma seductora sonriendo con picardia.

— Mmm... Me encanta cuando me llamas Sr. Clark.

Brando me toca de la cintura y me da un casto beso en los labios.

— Te amo — le digo contra sus labios.

Cada día que paso, siento que me enamora de este hombre.

Mio.

— Yo tambien te amo.

Nos separamos y voy a buscar mi lugar en la primera fila... Pasan unos minutos y cuando llega el momento, subo al escenario.

Mis manos tiemblan un poco al principio, pero respiro profundamente y me dirijo al público.

— Queridos compañeros graduados... Estamos aquí para conmemorar y celebrar un logro importante en nuestras vidas. Y no me refiero a nuestros títulos, aunque serán una linda decoración para nuestras paredes — El público se ríe, y yo me relajo un poco —. Lo que realmente hemos venido a celebrar es nuestro futuro. Porque este es el momento en el que todo es posible, ¿pueden sentir todo ese potencial? El aire vibra con él. O tal vez sea el teléfono de alguien — les sonrió antes de continuar —. Durante años, hemos aprendido y soñado y planeado... Y hoy es el día en el que todos esos sueños están a punto de hacerse realidad. Pero, ¿estamos preparados para hacerlos realidad? Yo creo que si. Porque creo que en nuestros años aquí, aprendimos más de lo que estaba en los libros. Nuestros profesores y nuestro director nos han enseñado a ser firmes pero justos. Y a ser solidarios, amables e inspiradores. Y con eso, aprendimos a ser mejores... Hemos aprendido a formar amistades duraderas. Y también a amar, y a sufrir, y a levantarnos y seguir adelante — dirijo mi mirada donde se encuentra Brando y le guiño un ojo —. Y ahora depende de nosotros — de ti —. El salir a la calle y compartir ese conocimiento con los demás. Hacer este mundo un lugar mejor. Porque sabemos que lo llevamos dentro. Gracias.

El aplaudo estalla, tan fuerte que soy incapaz de saber si mi mamá realmente uso el megáfono. Reprimo lágrimas de felicidad, al mirar a mis seres queridos entre la multitud... Y estoy preparada para lo que ne depare el futuro.

Fin...

💕AGRADECIMIENTOS💕

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Queridos lectores,

Hoy quiero tomarme un momento para expresar mi más sincero agradecimiento a cada uno de ustedes. Desde el primer día en que compartí mi historia, su apoyo ha sido una luz brillante que me ha guiado en este hermoso viaje. Cada palabra de aliento, cada comentario y cada mensaje han hecho una diferencia significativa en mi vida y en mi escritura.

Ustedes no solo son lectores; son parte fundamental de este camino. Su entusiasmo y su compromiso me han inspirado a seguir adelante, incluso en los días más desafiantes. Me han recordado por qué empecé a contar historias: para conectar, para compartir emociones y para crear un espacio donde todos podamos sentirnos comprendidos.

Agradezco profundamente que hayan estado a mi lado desde el principio, acompañándome en cada paso del proceso. Su presencia en esta travesía significa el mundo para mí. Cada uno de ustedes ha aportado algo único y valioso a esta comunidad, y por eso les estoy eternamente agradecida.

Espero que sigamos creciendo juntos, explorando nuevas historias y compartiendo momentos inolvidables. Gracias por ser parte de mi historia y por permitirme ser parte de la suya. ¡Sigamos soñando y creando juntos!

Con todo mi cariño,

Keila Mejía.

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