♡𝕰𝖓𝖙𝖗𝖊 𝖊𝖑𝖑𝖔𝖘♡ | 𝔑𝔞𝔪𝔧𝔦𝔫

ℭ𝔞𝔭𝔦𝔱𝔲𝔩𝔬 42: 𝔒𝔰𝔠𝔲𝔯𝔦𝔡𝔞𝔡

Cuando la noche fría cayó, todo el lugar quedó en una oscuridad infinita. No había luna ni estrellas. Mucho menos luz. La lluvia seguía cayendo; tan ruidosa y fría como desde un inicio. No parecía querer cesar ni siquiera un poco. Al contrario, parecía que cada vez era más intensa; llegando al punto de provocar leves truenos en la extensión del infinito cielo.

Los gruñidos y los toques salvajes en algunas puertas de todas las habitaciones y oficinas de la base, eran inquietantes. Cada infectado cautivo en aquellos cuartos eran completamente alterados por los truenos. No bastaba con la horda de la carretera. Definitivamente esas cosas estaban por todos lados.

NamJoon avanzaba a su debido ritmo, perdido en la inmensidad de todos esos pasillos, permitiendo que pocas veces la luz de la linterna se observara desde lo lejos. La única luz que parecía verse a la redonda. Tenía frío. El ambiente helado que provocaba la fresca lluvia, lo hacían sentir leves escalofríos y unas enormes ganas por sentir algo de calidez.

A pesar de que se encontraba completamente solo y levemente asustado, no podía evitar pensar en SeokJin. Cuando sentía escalofríos, lo único que venía a su mente eran los abrazos cálidos del menor, su compañía, su sonrisa y sus suaves besos. Y no lo dudaba; definitivamente quería estar con el menor.

Desde que había salido de la habitación de enfermería, había avanzado por los pasillos en busca de las escaleras para poder llegar al penúltimo piso, sin embargo, debido a que no conocía el lugar y mucho menos la cantidad de escaleras, terminó por perderse pocos minutos después. Tal parecía que la noche había llegado más rápido que de costumbre.

Caminaba, iluminando el suelo por donde pasaba; las enormes ventanas, las paredes manchadas de sangre, los cuerpos tirados en los suelos y gran cantidad de balas usadas. Incluso cuando se asomó por una de las tantas ventanas, pudo ver el oscuro exterior de la base. No podía ver qué había allí afuera, pero por lo poco que lograba iluminar la linterna a lo lejos, podía ver siluetas corriendo bajo la lluvia.

Aunque no podía escuchar los gruñidos de esas cosas debido a la lluvia, el poder ver a esos infectados afuera, mojándose, corriendo de un lado a otro y en plena oscuridad, le hacían sentir a NamJoon un poco de escalofríos. Por ello, se apartó de la ventana rápidamente, temiendo que algún infectado apareciera por la ventana para atacarlo.

Era un pensamiento muy tonto, pero debido a todo lo que pasaron, incluso el pensamiento más loco era una forma de advertirse a si mismo de algún peligro. Además, el lugar no era de confianza para nada, y más cuando se encontraba completamente perdido.

— Este lugar es un maldito laberinto — Bufó con voz molesta; iluminando al vacío del oscuro exterior. El mismo al que iluminaba constantemente, pudiendo ver la cantidad de gotas de lluvia que atravesaban la luz que emitía la linterna.

La apartó enseguida, comenzando a avanzar entre pasos inseguros, temiendo que algún infectado logrará localizarlo. No había encontrado alguno por el momento; la mayoría se encontraban encerrados en los cuartos y habitaciones.

No fue entonces, cuando pudo divisar una luz de linterna a lo lejos, en otro bloque de esa inmensa base. Estaba exactamente en el segundo piso, moviéndose de un lado a otro, por lo cual le daba a entender que uno de sus compañeros estaba iluminando el camino por donde avanzaba, permitiendo que algunas veces la luz se dirigiera a otros extremos de aquel lugar.

Tal cual lo había estado haciendo instantes antes.

— Espero que sean estos idiotas — Bufó, iluminando a la dirección de donde provenía la otra luz, tratando de que su contrario pudiera verla. Pero no fue así, ya que la luz del otro bloque desapareció de momento a otro —. ¡Maldición!