Capítulo 68: La calma antes de la tormenta

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Mañana del viaje – Casa Blopaz.

- Buenos días señora Blossom. – Saludó Bella entrando a la cocina y sentándose en una de las banquetas que daba a la puerta de vidrio que conectaba la cocina con el jardín.

- Bella, me conoces desde la vez que las encontré a ti y a Beth besándose en el departamento... Creo que ya me puedes decir Cheryl – le dijo de forma simpática a la amiga de su hija. Tanto Beth como Bella habían llegado de la universidad la noche anterior para unirse al viaje al campo de los Topaz.

- Tiene razón señor... – Cheryl la miró. – Tienes razón Cheryl – Cheryl sonrió. – Tengo que decirle dos cosas – anunció Bella. – La primera es que usted está hermosa como siempre – Cheryl se sonrojó – y la segunda es gracias por dejarme ir con ustedes al campo, desde la última vez que fui, me quedé con ganas de volver – dijo.

- Sabes que eres bienvenida a donde quieras, demasiado tienes con tener que compartir habitación con mi hija en la universidad – resaltó.

- ¡OYE! – Beth entraba a la cocina. – Te escuché – le dijo a su madre para después dejar un beso en su mejilla. – Buen día mamá, y para que sepas Bella no es la gran compañía tampoco – apuntó mientras iba hasta la canasta de frutas.

- Yo que tú cuidaría lo que dices – le advirtió su amiga. – No vaya a ser que se me escape enfrente de tu madre lo que hacen tú y Lucas en nuestro dormitorio – Cheryl miró inmediatamente a Beth y Beth no demoró en tirarle la naranja que tenía en su mano a su amiga.

- ¡MUY BUENOS DÍAS A TODOS! – ni hace falta decir que Lexi se había despertado y salvaba a su hermana de una mirada asesina.

- Buen día cariño – la saludó Cheryl.

- ¿Cuánto falta para que se despierte Jules? – preguntó Bella inquieta.

Cheryl miró a su hija mayor para ver si obtenía una explicación sobre la pregunta de su amiga, Beth giró los ojos. – Desde que le conté del ritual del lobito muere por verlo – explicó. – Y no vas a tener que esperar mucho más – el cangurín señaló a su hermana menor que venía llegando.

La pequeña caminó hasta su madre, sin mirar a nadie y sin decir nada, cuando llegó a ella le estiró los brazos para que la alzara. – Buenos días pequeña – la saludó Cheryl. La pequeña besó a su madre y después apoyó la cabeza en su hombro para volver a cerrar sus ojos. – Esta es la fase donde ignora a todo el mundo y solo quiere estar con su mamá ¿Cierto lobito? – Cheryl picó un costado de su hija para que se escuchara una suave sonrisita que hizo que los que la escucharan sonrieran como bobos. – La otra fase es el desayuno con su mami o nada – contó besando la cabecita de Jules.

- ¿Mami está corriendo? – Le preguntó Beth mientras le hacía el desayuno a sus hermanas y a su madre. Cheryl asintió - ¿Sigues en periodo de sillón? ¿Por qué Emma me contó que no lo cumpliste? – le reprochó.

- No puedo dormir en esa cosa Beth – se defendió la fotógrafa.

- No funcionó la ropa de Victoria's Secret. – Anoche habían visto llegar a Cheryl con varias bolsas de la marca en sus manos.

- No te preocupes que ya va a caer – aseguró Cheryl. Ya había visto la defensa de Toni titubear cuando anoche entró al cuarto y Cheryl estaba "Leyendo" un libro solo en ropa interior y sus anteojos de lectura. La fotógrafa pudo ver el deseo que irradiaba la morena. – Nadie se resiste al efecto Blossom – dijo.

- ¡EXACTO! – Lexi apoyó a su madre. – Hacemos así – Lexi chasqueó sus dedos. – Y tenemos el mundo a los pies – comentó haciendo reír al resto.

Cuando, donde y como el amor quiera // ChoniDonde viven las historias. Descúbrelo ahora