La rueda y la mariposa Una saga de Dan X Pinkie Pie

Arco de invitados Dan contra SyFy: Capítulo 2 Última risa contra Killi-TOK

La rueda y la mariposa: una saga de Dan y Pinkie Piepor Justice3442Arco de invitados Dan contra SyFy: Capítulo 2 Última risa contra Killi-TOK

        —¿En serio? —repitió Dan con enojo, poniéndose de pie y olvidándose por un momento de la monstruosidad mecánica que intentaba matarlo mientras miraba con el ceño fruncido a la chica que había aparecido de la nada—. ¿ De verdad vas a usar esa introducción en esta situación? ¿No has oído hablar de la sutileza? ¿O del buen gusto? ¡Ese cliché es tan viejo que Tallest Horse lo escuchó cuando era potra! ¿Podría ser más obvia tu identidad? ¿Qué sigue? ¿Sacarás una espada forjada de un metal único en el que puedes canalizar tu energía interior para cortar cualquier cosa?

        —¡Sólo si este tipo rompe mi motosierra! —gritó la niña tranquilizadoramente.

        Dan parpadeó por un momento. —Eh. No sé si enfurecerme por esa terrible referencia o alegrarme de descubrir que aparentemente estás haciendo uso de todos ellos... —Abrió los ojos de golpe—. ¡Esquiva!

        La chica dejó escapar un gruñido que sonó disgustado. "Ahora, ¿quién está haciendo el mal…?" Sus palabras se interrumpieron cuando el rayo láser del trasero del robot atravesó su vientre, dejando un agujero con sangre y tripas goteando lentamente a ambos lados, tirándola hacia atrás en el proceso. "... Oh. Maldita sea".

        Pinkie Pie jadeó de sorpresa y miedo cuando el androide comenzó a tambalearse para recuperar su cabeza. "¡Tienes un agujero en el estómago!"

        —¡Me ocuparé de eso más tarde! —espetó la chica. La energía roja se concentró alrededor de sus manos y sacó una escopeta de la nada, descargando varias balas en la máquina, lo que provocó que su cuerpo se abriera en varios puntos dejando atrás agujeros de explosión que parecían casi caricaturescos—. ¡Ustedes dos salgan de aquí!

        —¡Pero dijiste que viniéramos contigo si queríamos vivir! —gritó Pinkie.

        La chica se golpeó la cara con la palma de la mano y apoyó el arma contra su pecho para poder seguir disparando. “¡Entonces llévenme para que podamos salir todos de aquí!”

        Dan y Pinkie corrieron rápidamente hacia la niña y la levantaron sobre sus hombros mientras el señor Mumbles saltaba a su regazo. "¡Eres pesada!", gruñeron juntos Dan y Pinkie mientras salían corriendo del apartamento.

        "Además, todavía estás goteando", agregó Pinkie como una ocurrencia de último momento mientras sentía algo húmedo y pegajoso gotear en su cabello.

        Una vez que estaban en las escaleras que bajaban a la calle, la chica arrojó la escopeta vacía a un lado. “Hemos ganado unos minutos para lidiar con eso”, se quejó. Puso sus manos a ambos lados del agujero y sus manos comenzaron a brillar de color azul. Los trozos que habían goteado de ella volvieron a fluir hacia su cuerpo y los agujeros se cerraron lentamente. Dejó escapar un suspiro de alivio cuando terminó y la energía azul desapareció. “Eso está mejor…”

        —¡Bien! —dijo Dan mientras dejaba caer rápidamente a la niña al pavimento—. ¿Y ahora qué tal si me explicas con más detalle lo que está pasando?

        —Tenemos quizás treinta segundos antes de que esa cosa se recupere y venga a por nosotros —señaló la niña mientras se ponía de pie enojada.

        —¡Entonces explícalo en veinte! —insistió Dan.

        Ella dejó escapar un gruñido de frustración mientras enterraba su rostro en su mano. “¡Bien! Soy la Agente Last Laugh. Esa cosa es Killi-TOK, el arma de último recurso de TOK de donde yo vengo. Casi tuvo éxito en su misión en mi tiempo, y volví para cambiar eso, pero me siguió, ¡así que ahora quiere matarlos a ambos otra vez!”