𝒮𝑜𝓇𝒹𝑜

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Las palabras mis oídos rechazan.

Los tambores resuenan.

La sordera amenaza.

Que deleite sería no oir nada.
La perfección en simples palabras.
En una sordera fácil sería ignorar la quejas.
La ceguera también me aliviaría.

Que manera de atravesar los altibajos.
Con simplemente ignorar los sonidos que me alcanzan.
Cada muestra de voz innecesaria.
Extinta.
Lo amaría.

Escuchar es horrible y comprender aún más.
¿Ya quién aguanta escuchar esto?
No tiene remedio.
Un desvelo,
Que lo arregle todo.
Donde mí respiración es lo único que escucho.
Y las sombras a mí alrededor.

Sus susurros deprimidos como yo.
Lo hacen mejor.

Porque los vivos nos quejamos más que los muertos.

𝕾𝖚𝖘𝖕𝖎𝖗𝖔𝖘 𝖉𝖊 𝖚𝖓 𝖛𝖆𝖒𝖕𝖎𝖗𝖔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora