Sombras Del Pasado

Capitulo 7

Léelo en privado.

Cuando te vi irte esa noche a seguir trabajando, sabiendo perfectamente el estado de tu cuerpo y lo cansado que se mostraban tus ojos, me dije: "Mi hermana tiene mucha suerte". Nunca pareces rendirte, a pesar que digas y grites miles de veces que ya no puedes. Y eso... me encanta, me fascina, y me llena de admiración hacia ti.

Realmente espero conocer a alguien similar. Alguien que se esmera para hacer lo mejor posible en esas cosas que muchos consideran pequeñas.

Tal vez no lo sepas Jean Luc, capaz ni siquiera te des cuenta... Pero eres, junto con mi padre, quienes me dan esperanzas por volver a ver a mi hermana con energía, de volver a disfrutar de nuestras extensas charlas hasta que perdamos la noción del tiempo, de saber que estaremos para la otra en los peores momentos...

Esperanza... Es lo que veo en ti.

Esos niños que tienen, son adorables, los quiero como si fueran mis hijos y siempre los trataré de animar y cuidar en todo momento. Y me fascina ver lo iguales que salieron a ustedes dos. Isaac siendo el más tranquilo como tú, y Bell siendo la más energética y creativa al igual que Bluey. Y lo mejor de todo, es que ambos comparten esa bondad que tanto nos hacen sonreír.

No te voy a mentir, pero cada que me preguntan sobre ellos, yo respondo con orgullo: "Esos son mis sobrinos".

Y es por eso que estaba furiosa en esos momentos, porque te fuiste a lo idiota a perseguir bandidos mientras tus pequeños gritaban, aullaban, lloraban, imploraban por su querido padre. En un mar de lágrimas que me estrujó el pecho y que me hacía enfurecer por lo que habías hecho. Bluey también lo supo, y se me partió el alma al saber lo que estaba ocurriendo en el hospital. Ella estaba sumamente preocupada por ustedes y sabía que ella me necesitaba. Pero volví a estar en una posición muy dura, en el que debía acompañar a mis sobrinos o ir directo con mi hermana... Me pusiste en una posición muy dura Jean Luc.

Sabes, yo también he parado al hospital por culpa de mis alergias, y debo decir, que han sido las peores en un inicio. Estar en ese lugar por tanto tiempo, con malestares y aburrimiento, es agobiante y sobre todo frustrante, que llegas incluso a rogar para poder salir por un momento a tocar, saborear y disfrutar la sensación de la hierba recorriendo los dedos de tus pies. Y me duele más por saber que es mi hermana quien está pasando por eso, y lo peor de todo, que esté sufriendo mucho más por tu estupidez...

Yo sé que no eres mala persona, al contrario, eres una de las mejores que he conocido, pero hay veces que te cortas y olvidas analizar bien la situación, y... Provocas esto. Entiendo que estes asustado, aterrado, enfadado... Pero no me parece que ese sea la manera de solucionarlo. No es justo.

"Siempre hay soluciones" Fue lo que le dije a tu hijo, después de haberlo encontrado debajo de la casa con mi celular entre sus manos, marcando al teléfono del hogar que había empezado a sonar en cuestión de segundos, y siendo Bell la que respondía. Pronto, volví a escuchar la voz de mi hermana siendo reproducida por aquella grabadora que le regaló mi padre. Bell respondía angustiada, comentándole sobre lo que sucedía y sobre lo asustada que se encontraba. Isaac simulaba ser la voz de su madre con aquel aparato.

Él logró calmarla, pero, al igual que tú, no vio que esa solución podría perjudicar en un futuro.

Se que no lo hizo con mala intención, al contrario, lo hizo solo para ver tranquila a su hermana y alejarla de todo este dolor. Hasta en eso es igual a ti Jean Luc.

Y, por ende, vas a tener que aprender para ser mejor y guiar, correctamente, a esos niños.

Eres bueno Jean. Una excelente persona. No te niego que todos alguna vez nos cortamos, pero si realmente quieres que tus hijos eviten esos problemas que sientes, empieza viendo el panorama. Y, sobre todo, nunca olvides respirar.