La estruendosa risa de la pelinegra resonó en las cuatro paredes de la habitación, haciendo que Draco se avergonzara y cubriera su rostro con sus manos.
Los cuatro amigos se encontraban en la habitación del azabeche, pasando un agradable momento entre charlas y risas, mientras sus padres conversaban en el salón de la mansión Nott, habían subido una vez que la hora del almuerzo había terminado, llevándose de contrabando algunos postres que la señora Nott había preparado especialmente para los chicos junto con chocolate caliente.
Cada uno de los chicos se había apoderado de una esquina de la cama, al igual que de una almohada; el dueño de la habitación se encontraba junto a la pelinegra en la parte superior de la cama, mientras que los otros dos chicos se estaban sentados frente a ellos en el otro extremo.
— Ya basta con el tema, Zabini —habló el rubio siendo incapaz de quitar sus manos de su rostro.
— Vamos, Dray —le molestó el moreno, recostando su cabeza sobre el hombro de su amigo— ¿de qué tanto hablaron tu y Potter en la biblioteca?
Draco frotó su rostro con sus manos entes de levantar la mirada, mirando de mala gana a un sonriente moreno a su lado.
— Te lo he dicho mil veces, me preguntó algo sobre la clase de encantamientos —mintió el rubio.
— Imposible, la rata de biblioteca es la mejor en esa clase, ¿por qué te lo preguntaría a ti y no a su mejor amiga?
Draco puso los ojos en blanco con fastidio.
— Es la mejor en su casa —le corrigió— yo soy el mejor de toda la clase, por eso mismo me preguntó.
— Pues nuestros informantes no dijeron los mismo —habló la pelinegra soltando una risita.
— Tu informante te dice lo que quieres escuchar, porque está enamorado de ti.
Pansy hizo una mueca de asco, haciendo reír a Theodore.
— No te rías, Theo, es perturbador.
— Pucey es lindo.
— Y ya está en su último año—le recordó la pelinegra— es asqueroso, Theo, ¿por qué le gustaría una niña de cuarto año?
El azabeche le dió la razón asintiendo.
— Igual sigue siendo lindo.
La pelinegra le dedicó una mala mirada a Theodore, quién solo se encogió de hombros y volvió a tomar su chocolate.
— Ya, no desvíen el tema —habló Blaise nuevamente— Draco, ¿qué pasó entre tú y Potter?
— Nada.
— Entonces —carraspeó antes de continuar— Draco, ¿por qué te pusiste como un tomate mientras hablabas con Potter?
Draco frunció sus labios en una fina línea, ganándose una mirada burlona por parte de su amiga pelinegra.
— Seguramente se coquetearon de esa forma tan rara en la que ustedes lo hacen —dijo el moreno.
Draco miró confundido a su amigo.
— Ya sabes —continuó mientras movía sus cejas de arriba hacia abajo— se miran durante largos periodos de tiempo mientras el otro está distraído, chocan miradas, el sonríe, te sonrojas, le miras con desprecio y desvías tu mirada, luego el se encoje de hombros y también desvía su mirada.
Los tres chicos miraron al moreno con sorpresa.
— Eso es aterrador, Zabini —habló la chica haciendo una mueca.
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Lumos | Drarry
FanficDraco estaba pasando por el peor momento de su vida, hundido en una profunda depresión, tratando de sobrevivir solo con sus pensamientos, hasta que aquel chico de ojos color esmeralda le dió un sentido a su vida, dándole felicidad y paz a su mente y...