Capítulo 1

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Stanford, un genio de la tecnología, había pasado años trabajando en su proyecto más ambicioso: un laberinto de realidad virtual que podría revolucionar la industria del entretenimiento. Sin embargo, su obsesión por el proyecto lo había aislado de su entorno, y su vida social era prácticamente nonexista.

Una noche, mientras trabajaba en su laboratorio, escuchó un ruido extraño. Se levantó de su silla y vio a un joven espiando por la ventana.

— ¿Qué haces aquí? — preguntó Stanford, con una mezcla de sorpresa y enojo.

— Estoy buscando la verdad sobre tu proyecto — respondió Bill, sin vacilar, mientras se acercaba a la ventana.

— ¿Y qué verdad es esa? — preguntó Stanford, con una sonrisa sarcástica.

— He oído rumores de que has creado un laberinto de realidad virtual — respondió Bill, con una mirada intensa.

Stanford se acercó a Bill, y por un momento, pareció que iba a expulsarlo. Pero algo en los ojos de Bill lo hizo cambiar de opinión.

— ¿Quieres ver el laberinto? — preguntó Stanford, con una sonrisa enigmática.

Bill asintió, y Stanford lo llevó a una sala secreta en el sótano de su edificio. Allí, Bill descubrió el laberinto de realidad virtual, y se sintió atraído por su belleza y complejidad.

— Es increíble — dijo Bill, con la boca abierta.

— Sí, es mi obra maestra — respondió Stanford, con orgullo.

— ¿Quieres entrar? — preguntó Stanford, con una mirada intensa.

Bill asintió de nuevo, y Stanford lo llevó al interior del laberinto. Allí, Bill descubrió un mundo de seducción y pasión, donde nada era lo que parecía.

— Estoy a tu merced — dijo Bill, con una sonrisa.

— No te preocupes, te guiaré — respondió Stanford, con una sonrisa enigmática.

Y con eso, Bill se sumergió en el laberinto, sin saber qué lo esperaba.

Atrapados en el Laberinto de la PasiónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora