Problemas

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El sol se ocultaba junto con el sentimiento de calma que daban los rayos de luz, ahora mismo se podía deslumbrar dentro de una habitación a cierto herrero de temperamento frágil en el piso, inconscientemente por la sobre estipulación de cosquillas que su omega le había proporcionado para que este no se perdiera en el enojo que claramente los dos compartían.

Kanamori con respiración agitada por el gran esfuerzo que hizo para derribar a su esposo, solo sudaba frío aún procesando lo dicho por la pilar del insecto referente a su bien más preciado; Kotetsu Kanamori.

— Señor Kanamori, permitame que se siente -Dijo la pilar compareciendose del herrero, tomando su mano con cuidado notando lo temblorosa de esta.

Era difícil definir como se podría sentir alguien en una situación así, Kanamori no estaba preparado para algo así ni en lo más mínimo, ¿cómo imaginar que alguien que hace apenas unos meses lo cuidaba como si fuera un niño ahora tendría otro?, era imaginable, y absurdamente abrumador en diversos sentidos.

Sentarse no dejaba de que su sangre helada le hiciera sudar, no solo se rehusaba a pensar a Kotetsu en una situación así, se rehusaba que fuese con el pilar de la niebla en especial, a ninguno de los dos los veía capaces para criar a un niño de forma plena.

— Q-quiero ver a Kotetsu... -Soltó suspirando para regular sus emociones.

La pilar había omitido la parte sobre la salud del joven omega solo para no preocuparlos, pero tendía que decirle en dado caso que quisiera verlo.

— Señor Kanamori, hay algunas cosas más que quiero decirle antes de que vaya con él -Con cuidado y sin sostener su sonrisa y teniendo una imagen más neutra se sentó enfrente del omega mayor.

— Te escucho.

— Primero, aún esta en reposo, estoy consciente que en 3 días es su boda y sobre ello no hay problema, pero necesita reposo absoluto ya que tiene una costilla rota... -Hizo una pequeña pausa, la suficiente para que Kanamori con manos temblorosas las acercará a su cara. — No perforó ningún órgano o lugar importante y en 5 meses sanará, ya que su cuerpo aún es muy joven y con los cambios hormonales puede sanar incluso más rápido, así que no hay mucho de lo que preocuparse.

Tratando frío Kozo Kanamori se quito la máscara mostrando una cara sudorosa y preocupada, una expresión que hizo sentir mucha preocupación a la pilar del insecto, que no le iba a negar que lo entendía en lo absoluto, Shinobu no dijo nada respecto a ver su cara, aunque sabía que no debia de hacerlo, tambien sabia de la confianza que le estaba teniendo el omega para dejar que ella lo viera.

— Dime, esa costilla, se rompió por culpa del Joven Tokito, ¿no?. -Preguntó quitando algo del sudor de su cara, sudor frío.

— Si... -No podía mentirle a un padre preocupado, eso era lo último que podría hacer Shinobu.

Las dos miradas, la del pilar y la del herrero se cruzaron, dos preocupadas y frías.

— ... ¿Moretones, daños secundarios, algo más de lo que deba saber?... -Volvió a preguntar Kanamori sin cambiar su cara.

— Algunos ematomas en los brazos, moretones en el torso, ragullos en cintura y muslos, mordidas, la marca y algo de desgarro... ahí abajo, pero nada fuera de lo que podría imaginar más que la costilla rota. -Respondió con honestidad la pilar del insecto, tomando con cuidado de una mesa cercana una libreta pequeña donde tenía anotado el expediente de Kotetsu. — Físicamente ya me encargue de todo, pero mentalmente no lo se, eh escuchado que después de una primera vez muy violenta puede haber efectos secundarios, en el omega,  por seguridad no eh dejado a Tokito y Kotetsu en una misma habitación.

Unión por compatibilidad [Muitetsu] <Concluida>Donde viven las historias. Descúbrelo ahora