DxD God Destructor

Cap 7. Lucha Interna P. 2.

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Capítulo 7. Lucha Interna P. 2.

El ambiente en la mansión era extraño, lleno de una tensión palpable mientras Melody y sus amigas caminaban por los pasillos de la mansión. Todos los sirvientes se sentían muy presionados no solo por la repentina visita de un extraño invitado mal herido al que tenían que cuidar con mucho esmero, sino que incluso el legendario patriarca de la familia Gremory se presentó en la mansión, no podían permitirse ni un solo descuido o error.

Mientras tanto el eco de los pasos de las chicas apenas resonaba en el suelo, sus pensamientos estaban centrados en una sola cosa: el misterioso hombre que había caído del cielo y que seguía inconsciente, bajo el cuidado de su familia.

—¿Cómo alguien así puede existir? — susurró Fiora, aún incrédula por lo que había presenciado. —Ni siquiera nuestro ataque combinado pudo atravesar su escudo. ¿Acaso es un Gran Demonio? No puedo imaginar otra explicación para su fuerza. —

Melody asintió con el ceño fruncido, rememorando el momento en que intentaron atacarlo cuando caía del cielo.

Ni siquiera un ataque combinado de las cuatro fue capaz de rasgar la barrera de energía que lo protegía. Su poder parecía algo imposible para un mortal, pero lo que más inquietaba a Melody era la sensación que había sentido, algo en él era diferente y no era por su fuerza. Casualmente, cuando trato de transformarlo en un demonio anteriormente con sus piezas toco un poco su sangre y sintió remanentes de una energía destructiva, similar a la energía aniquiladora que usa su padre y su abuelo, pero completamente diferente al mismo tiempo, era algo muy intrigante para ella.

—¿Creen que de verdad pueda ser un Gran Demonio cuando se transforme? — preguntó Elara, con voz preocupada, pero también emocionada. —Nosotras apenas somos demonios comunes, ni siquiera hemos alcanzado el rango suficiente para ser consideradas en la élite. ¿Cómo haremos para que no nos menosprecie? —

Fiora hizo una mueca. —No lo sé, pero si tiene 60 puntos en el medidor, no hay duda de que su potencial es descomunal, sin embargo, también es cierto Lord Abalon menciono que el hombre tenía cerca de los 60 años que para la mayoría de los mortales es bastante tiempo, no creo que sea una persona tan mezquina e infantil como para menospreciarnos. —

Melody frunció el ceño, mordiéndose el labio mientras escuchaba a sus amigas discutir. También la preocupaba poder mantener su control sobre ese hombre, si ese tipo realmente era así de fuerte no podía dejarlo ir bajo ningún concepto, este hombre en el futuro era indudable que entraría en los rangos nobles de los demonios.

Olvídate de un Gran Demonio o incluso un Archidemonio Supremo, con su talento llegar a ser un Emperador Demonio como su padre no debería ser muy complicado, incluso debería ser posible ser un Gran Emperador como su abuelo, o incluso alcanzar el Mítico reino de los dioses demoniacos, salvando a su clan en decadencia.

Finalmente, decidieron ir a verlo, impulsadas tanto por la curiosidad como por la necesidad de obtener respuestas. Un sirviente de la mansión las guio hasta la habitación donde el hombre descansaba, y a medida que se acercaban, la sensación de inquietud en Melody crecía. ¿Qué tan peligroso podría ser alguien con tanto poder? ¿Y si en el futuro descubrían que era una mala persona? ¿Y si los acaba traicionando? ¡O peor aún...! ¿Y si él... termina siendo un lujurioso empedernido...?

Al ver que ya llegaban a la habitación donde descansaba el hombre Melody decidió ignorar todas esas dudas por ahora, al final solo eran miedos infundados, no tenían por qué ser reales.

Cuando entraron en la habitación, lo primero que vieron fue a su padre, Abalon, de pie junto a una silla, donde el venerable Gaius, su abuelo, permanecía sentado, aparentemente dormido, aunque mantenía una mano sobre la frente de Vegito que estaba acostado en su cama.