A week -JOE JONAS-

fifteen

Hailey's POV

Siempre he sido de las chicas que sienten que estar en casa es estar en su lugar seguro, donde nadie molesta y puedes ser tú misma sin que alguien te juzgue, pero cuando puse un pie en Nueva York, no pude evitar sentir un vacío.

—Bienvenida a casa amor -dijo mamá detrás mío.

—¿Hails eres tú? -escuché decir a Abby desde el segundo piso.

—Ya está aquí Abby, puedes bajar a saludar.

Y en un santiamén estaba con mi hermana tiradas en el piso abrazándonos.

—¡No sabes cuánto te extrañé! Estás hermosa, ¿Vienes embarazada o algo?

—¡Abigail! -escuché decir a mamá.

—Ay mamá ya está lo suficientemente grandecita, ella puedes hacerme tía cuando quiera, sobretodo si es de un Jonas.

—Okey primero, ¿Te sales de encima? Quiero respirar, segundo, déjenme hablar.

—Lo siento.

—¿Qué tal si suben las maletas? Por mientras iré a preparar el almuerzo -intervino mi madre.

—Genial vamos -Abby me tomó del brazo y me arrastró por las escaleras hasta llevarme a su habitación- Necesito que me cuentes todo, ¿Qué tal estuvo todo ayer?

—¿No te has metido a twitter?

—¿Debería? -alzó una ceja- ¿Filtraron alguna foto de ustedes? ¿Sales en alguna revista de chismes?

—No estúpida -rodé los ojos- Sophie llamó anoche a Joe para una audiencia en Londres por lo de sus hijas, así que no hubo cita.

—¿Es decir te dejo plantada? ¿Por segunda vez en una semana?

—Algo así.

—¿Pero fue a disculparse antes de irse, no es así? -alzó una ceja.

—Personalmente no, pero mandó a Sarah

—Es un estúpido -se tiró a la cama- Agradece que al menos envió a alguien y no en una llamada de 29 segundos como a Taylor, ya veo porque le dicen Mr. Perfectly Fine.

—No me molesta, es decir, en ese momento claro que lo hizo, pero son sus hijas Abby, y van ante cualquier cosa.

—¡Pero había un contrato de por medio Hails! Contrato que él se pasó por partes no muy lindas.

—Está bien -rodé los ojos- Mi experiencia no tuvo el final que esperaba pero fue una excelente semana.

—Ni me lo digas, yo te recomendaría que taparas ese chupetón que tienes cerca de la oreja si no quieres que mamá te lo vea.

-yo me toqué la zona y sentí un leve, casi inexistente dolor- Fue una apuesta, no imagines cosas que no son.

—Ajá sí como digas, ¿Porque no le dijiste que te lo firmara? Así podrías presumir por la calle que tienes una marca de Joe Jonas.

—Más te vale no abrir tu bocota mocosita.

—Mis labios estarán sellados cuando sepa todos los chismes.

—No seas estúpida, te sabes todos los chismes.

—Los sucios no me los contaste, por llamada jamás hablaste de eso que tienes en el cuello.

—Solo fue una apuesta -rodé los ojos- Estábamos viendo películas y dijimos que el que primero hablaba perdía.

—Y tú hablaste aproposito.