Parte 2/2
Wait ~ M83Ava
Las carcajadas de Noah inundaban el lugar, interrumpiendo el silencio incómodo que se había formando unos minutos antes.
Tyler, su mejor amigo, se mostraba tímido como de costumbre sentado a mi lado.
Hacía ya un buen rato que los dos habían llegado a casa para cenar, Noah había llegado tan emocionado como si fuese a recibir un premio enfundado en una playera con colores vivos que le resaltaba sus características físicas como su pelo castaño y sus ojos verdes.
Por parte de Tyler, iba bastante sencillo pero a la vez formal junto con una sudadera color otoño a juego con su cabello rojizo.
Nuestra pequeña convivencia había sido... aceptable. Ahora estábamos sentados todos a la mesa mientras cenábamos y esta era la situación:
Caleb y yo no habíamos cruzado palabra desde hace más de una hora cuando ocurrió nuestra pelea.
El pobre Tyler desde que pisó esta casa no a parado de recibir miradas de odio por parte del rubio junto con las de su perro.
Porque sí, Milo en cuanto vió al pelirrojo comenzó a ladrarle como si fuesen enemigos mientras que Tyler se apartaba, apenado. Yo intentaba detener sus ladridos aprovechando su cariño hacia mí pero al parecer la expresión orgullosa de su dueño no ayudaba.
Desde entonces, Caleb no dejaba de fulminarlo con la mirada mientras que el menor se encogía en su lugar. Noah se resumía en sus risitas.
¿Acaso sabían algo que yo no?
No, imposible. Se habían acabado de conocer.
¡Pero no era justo para Tyler! Hasta hace un rato se me había quedado mirando como si yo fuese el cuadro de la Mona Lisa original antes de que Caleb le diera un manotazo en el hombro sin un ápice de delicadeza dejándolo casi asustado.
Ahora estábamos sentados en la mesa mientras cenábamos, Noah y Caleb juntos frente a Tyler y yo.
Como olvidar la mirada que Caleb me lanzó cuando me senté al lado de Tyler solo para provocarlo.
—Estuvo muy bueno— comentó el pelirrojo cuando acabamos la cena.
—¡Sí! ¡Me comería hasta otro plato!— soltó Noah con una sonrisita en mi dirección.
—Tus insinuaciones no me compran, hermanito— dije alzando una ceja.
—Que molesto es que me conozcas tanto— hizo una mueca— Aveces pareces psíquica.
Como si estuviésemos programados, Caleb y yo buscamos nuestras miradas instantáneamente. Estar frente a frente nos lo facilitó.
—Sí que lo es— murmuró con una pequeña sonrisa.
Sostenimos un silencio incómodo hasta que el mejor amigo de mi hermano me miró.
—No sabía que sabías cocinar tan bien— sonrió intentando entablar una conversación.
—Eh...— no supe que decir, al parecer él sí.
—No fue ella quien hizo todo esto— la voz de Caleb resonó en el comedor.
—¡Oh!— se removió en su lugar notoriamente incómodo— ¿En serio?
—Yo solo fui la ayudante— sonreí orgullosa.
—No sé en qué pudiste ayudar, eres un lío en la cocina— Noah aportó su granito de arena.
—Cocinó muy bien los problemas— Caleb se le sumó observándome.
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Yo Puedo
Teen FictionAva Parker, una chica de veinte años con gustos bastantes oscuros y brillantes a la vez, convive entre siniestras sombras a las que tiene que llamar "padres". Ha tenido que obligarse a apagar el brillo que la hacía ser ella para moldearse a otra chi...