Damon se encontraba en su habitación, sentado en el borde de la cama con el pequeño empaque de plástico que le había dado Jamie en el coche.
El contenido del paquete, unas estampillas de LSD con dibujos infantiles y coloridos, parecía inofensivo a simple vista, pero Damon sabía que la sustancia contenía un poder perturbador.
Había cuatro de ellas, cada una con un diseño distinto, y Damon se tomó un momento para contemplarlas.
El dibujo de la mariposa le parecía el más apropiado para su plan.
Con la sustancia en la mano, Damon sintió una mezcla de nervios y anticipación. Pensó en lo que estaba a punto de hacer: una manipulación que cruzaba todas las fronteras de lo ético y moral.
Pero la tentación era fuerte, y la idea de tener una oportunidad con Liam después de tanto tiempo lo llevó a tomar una decisión que en el fondo sabía que no estaba bien.
La vida con Liam no siempre había sido fácil. Damon se había prometido a sí mismo que cuidaría de él, y aunque en el fondo sabía que este plan no era el cuidado que Liam necesitaba, se aferraba a la idea de que sería una forma de tenerlo cerca, de sentir su cariño de una manera que nunca había sido posible.
La perspectiva de ver a Liam vulnerable y bajo su control le daba un sentido de poder y cercanía que nunca había tenido antes.
Esa noche, después de una larga jornada laboral, Damon estaba ansioso por ejecutar su plan.
Liam, agotado como siempre después de un día de trabajo, se había quedado dormido en el asiento del copiloto del coche.
Damon le ayudó a entrar a casa, guiándolo con cuidado para no despertarlo.
Era una de esas noches en las que Liam no estaba dispuesto a resistirse y, como esperaba Damon, se dejó caer en la cama sin muchas protestas, quitándose los zapatos con pereza.
Damon esperó pacientemente hasta que Liam estuviera profundamente dormido.
El reloj en la pared parecía moverse lentamente mientras contaba los minutos, cada segundo que pasaba aumentaba su ansiedad y la sensación de culpa.
Pero estaba decidido a seguir adelante.
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Cuando finalmente sintió que Liam estaba en un sueño profundo, Damon se movió sigilosamente hacia la puerta del cuarto y la cerró con llave. Asegurarse de que no pudiera ser interrumpido era crucial.
Con manos temblorosas, Damon abrió la caja donde guardaba el LSD.
Seleccionó una de las estampillas, la que tenía el dibujo de una mariposa, y la retiró cuidadosamente del empaque, sacando un cuadrito.
La estampilla era diminuta, la mariposa era un color morado que contrastaba con la superficie blanca.
Damon se acercó a Liam, su corazón latía con fuerza mientras se inclinaba sobre él.
Él abrió suavemente la boca de Liam, que permanecía relajada en la almohada.
Con cuidado, colocó la pegatina de LSD en la lengua de Liam, presionándola suavemente contra el paladar.
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ᡃ§ɧαʈʈeɽeᶑᡃ •°ᵈⁱᵃᵐ°• ⁅𝟭⃪𝗿⃪𝗮⃪ 𝗧⃪𝗘⃪𝗠⃪𝗣⃪𝗢⃪𝗥⃪𝗔⃪𝗗⃪𝗔⃪⁆
Fanfiction⊰ En un susurro de sombras y dolor, dos almas se desmoronan en una danza de destrucción. ⊰ Liam, con su amor roto, se desvanece bajo el peso de las manos de Damon, que, cegado por la furia, lo destroza. Un último "perdón" resuena en la oscuridad, m...
