El Cazador en la Sombra
.......................El sonido del motor de un coche negro rugía en la distancia, mezclándose con el eco de la ciudad que nunca dormía. La noche había caído hace horas, envolviendo todo en una manta oscura, y bajo esa sombra se movía un hombre con pasos silenciosos pero seguros. Sus ojos grises, fríos y calculadores, observaban desde las sombras mientras ella caminaba sin notar su presencia.
Aurora no sabía que alguien la estaba observando, no sabía que cada uno de sus movimientos había sido cuidadosamente estudiado durante semanas. Era una rutina diaria, caminar sola desde su trabajo hasta su apartamento. A pesar de su carácter tranquilo, el miedo siempre la acompañaba en esas noches solitarias. Había perdido a sus padres cuando era niña, y desde entonces, la sensación de soledad era su única compañía constante, excepto por su mejor amiga, Nicol, que era lo más cercano a una familia que tenía.
El viento frío de la noche acariciaba su piel mientras apresuraba el paso, sintiendo un escalofrío recorrerle la espalda. No podía explicarlo, pero había algo diferente esa noche, una sensación que no podía ignorar. Sin embargo, descartó rápidamente ese pensamiento y continuó su camino.
Desde la sombra de un callejón, Stefano Moretti la observaba. No era la primera vez que lo hacía. Cada noche se aseguraba de que ella llegara a salvo a su apartamento, sin que ella lo supiera, claro. Su obsesión con Aurora había comenzado de manera repentina, como un golpe inesperado. No podía dejar de pensar en ella, en su inocencia, en la manera en que sus ojos reflejaban una mezcla de vulnerabilidad y fortaleza. Había algo en ella que lo atraía como un imán, algo que lo impulsaba a querer protegerla... y poseerla.
Stefano no era un hombre común. A sus 24 años, ya era un nombre temido y respetado en el submundo criminal. Heredero de una de las familias mafiosas más poderosas del país, el poder y la violencia eran parte de su vida diaria. Pero nada de eso le había preparado para el torbellino de emociones que lo asaltaban cada vez que la veía. No era solo un deseo pasajero; era una necesidad, una obsesión que crecía cada día.
Aurora llegó a la puerta de su edificio y soltó un suspiro de alivio al entrar. Cerró la puerta detrás de ella y subió las escaleras hasta su apartamento en el tercer piso. Estaba cansada, pero una vez dentro de la seguridad de su hogar, se permitió relajarse. Dejó caer su bolso en el sofá y se dirigió al baño para darse una ducha caliente. El agua corrió sobre su cuerpo, llevándose consigo el estrés del día, pero no logró despejar la inquietud que sentía en el fondo de su mente.
Mientras tanto, Stefano seguía vigilando desde el exterior, su mandíbula apretada con frustración. Sabía que esa noche no sería como las anteriores. Había llegado el momento de actuar. Su paciencia tenía un límite, y ese límite había sido alcanzado.
Dentro del apartamento, Aurora salió de la ducha, envuelta en una toalla, y se dirigió a su dormitorio. Justo cuando estaba a punto de dejarse caer en la cama, el sonido de su teléfono la sobresaltó. Era Nicol.
-¿Todo bien? -preguntó su amiga al otro lado de la línea.
-Sí, solo cansada -respondió Aurora mientras se dejaba caer en la cama. La voz de su amiga siempre tenía un efecto tranquilizador en ella.
-¿Segura? Suenas... no sé, rara.
Aurora soltó una risa suave. -Estoy bien, de verdad. Solo ha sido un día largo. Te veo mañana en el café, ¿sí?
Nicol aceptó a regañadientes y colgó, dejándola en la oscuridad de su habitación, con solo el sonido de su respiración para romper el silencio. Cerró los ojos, pero esa sensación de ser observada volvió, más fuerte que antes.
Afuera del edificio, Stefano apagó su cigarrillo, su mente tomada por la decisión que había postergado durante demasiado tiempo. No podía seguir simplemente observando. Aurora le pertenecía, aunque ella no lo supiera todavía.
Aquella noche, el cazador en la sombra decidió que era hora de hacer su movimiento...
"Espero que este primer capítulo las envuelva en un mundo de emociones y las deje con ganas de más."
"Agradezco enormemente a [Nicol] y [Cristian], quienes me brindaron su apoyo incondicional y sus conocimientos en [creación de este libro]."🦋
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ENREDADOS EN LA OSCURIDAD
Teen FictionAurora nunca imaginó que su tranquila vida cambiaría de manera tan abrupta. A los 19 años, marcada por la tragedia de haber perdido a sus padres a una edad temprana, se había refugiado en la sencillez y la rutina, confiando únicamente en su mejor am...