Precious Things - Freenbecky

Capítulo 8

No escucho mucho de lo que mi profesora de Historia dice durante el resto de la clase. De hecho, estoy aturdida por el hecho de que todavía parezco estar viva. Es como si mi mayor sueño y mi peor pesadilla se hubieran hecho realidad al mismo tiempo.

Sé que mi abuelo espera que ponga mi cabeza en la almohada a las diez de la noche y duerma al instante. Bueno, mi cabeza no siempre accede a sus expectativas y me quedo despierta. Por supuesto, pienso en ella. ¿Qué más hay que pensar? Las horas y horas de cinta de video almacenada en secreto en mi cabeza que reproduce la película de Rebecca Armstrong una y otra vez a veces son interrumpidas por ese bastión de todos los cerebros adolescentes: soñar despierto. ¿Todavía se llama soñar despierto por la noche? 

Siempre, siempre, Becky y yo nos vemos empujadas por las circunstancias y siempre, ella me encuentra irresistible. Por supuesto, las circunstancias siempre son un poco más dramáticas, como terremotos, invasiones de escuelas y hordas alienígenas invasoras. Nunca son tan banales, pero, de nuevo, nunca son tan reales.

El problema con soñar despierta es que yo los controlo. Nunca salen mal porque entonces serían pesadillas, lo cual no tiene ningún sentido. El problema con la realidad es que no tengo control sobre ella, y nunca lo tendré. Las cosas pueden, y casi con certeza lo harán, salir mal. Y ahora que estoy entrando en pánico por eso, estoy segura de que podría cagarlo todo en nuestro primer encuentro. 

¡Oh, Cristo! 

Al final de la lección, la señorita Suwan nos da cinco minutos para decidir cuándo vamos a empezar a trabajar juntos. Tendremos casi un mes para hacer este proyecto, y habrá tiempo de clase, pero la mayoría de las veces tendremos que trabajar fuera del horario escolar. Esto, anticipo, será un gran problema dado mi abuelo, pero aún así, hay que hacerlo. Supongo que la mayor parte de mi trabajo lo haré en solitario.

Me golpea un pensamiento: ¿y si Becky solo quiere dividir el proyecto? ¿Y si trabajamos por separado? Es a la vez un posible escape y una idea horrenda. 

Ojalá pudiera tomar una decisión al respecto. 

Mientras todos los demás se esfuerzan por el aula para hablar con sus parejas, Becky y yo permanecemos en nuestros asientos. Me doy la vuelta para mirarla, para ver si me hace una señal para que me acerque o si se dirige hacia mí. Ella no hace ninguna de las dos cosas, simplemente se recuesta en su silla e inspecciona un clavo. La acción hace que su camisa se suba y una deliciosa franja de piel hermosa y tonificada hace que se me ponga la piel de gallina en el brazo.

Después de un minuto de que ella no me mirara, finalmente tomo una decisión. Me echo la bolsa al hombro y camino por el pasillo, con el corazón latiendo con cada paso. Se sienta entre Ratree y Jan en cada lección de historia. Sus dos compañeros han estado inclinados sobre su escritorio hablando, lanzándole comentarios de vez en cuando. Ratree me ve venir y se apresura a dejar su asiento, un movimiento que sorprende a las tres mujeres que lo rodean. 

Sonriendo, dice: "Aquí", y se mueve al frente de la clase donde la señorita Suwan lo deja escapar temprano.

Tomo su asiento con cuidado, de lado, y estoy a punto de decir algo a Becky cuando Jan se sacude el cabello sobre su hombro y comienza a hablar.

–Amiga, la fiesta de Sinuhe este fin de semana... Vamos sí o sí.

Becky levanta una ceja perfectamente esculpida, mira hacia su uña y luego me lanza una mirada, seguida de otra hacia Jan.

–Suena bien.

Para mi sorpresa, luego se gira hacia mí.

–Este trabajo o lo que sea.