El Secreto de un Héroe

XIV.- Familia Reunida

Stiles despertó aturdido. ¿Todo había sido un sueño? No... Él había asesinado a Scott, a la persona que fue su mejor amigo de la infancia, la persona que lo abandonó, la persona que abusó de él, la persona que se dedicó a hacer su vida un infierno, la persona que le arrebató a las personas que más amaba. Él asesinó a Scott Mccall, aquel que dejó de ser un Alfa Verdadero y se convirtió en un Omega. No debería de sentirse mal... entonces... ¿Por qué las lágrimas no paran de correr por sus mejillas?

Unos brazos lo rodearon con cariño y pronto tenía su rostro enterrado en un suave pero firme pecho. Las caricias calmaban su corazón herido y lo hacían sentir bien. Escuchaba suaves palabras de consuelo, no las entendía pero se sentía bien.

Clark sentía su corazón romperse al ver lo desconsolado que estaba llorando su castaño, no lo había visto de esa manera desde que había pensado que Derek había muerto. Pero también, de cierta manera, se sentía bien que Stiles al fin pudiera sacar todos esos sentimientos que había guardado por años. Solo pudo tomarlo entre sus brazos y susurrarle palabras suaves.

— Todo va a estar bien. Lo hiciste bien. — le susurró el héroe mientras dejaba un suave beso en la cabeza del castaño.

Stiles lloró por horas en los brazos de Clark hasta que volvió a quedarse dormido.

— ¿Cómo está? — preguntó Jackson entrando a la habitación.

— Creo que estará mejor ahora que pudo desahogarse. — le dijo Clark mientras quitaba un mechón de la frente del castaño.

— Ha estado guardando mucho desde hace años. — suspiró — La verdad sabía que Mccall actuaba muy posesivo con Sti, pero jamás vi todo lo que hacía. No puedo creer que lo hiciera sufrir y no hice nada para evitarlo. — dijo Jackson frustrado mientras se sentaba al lado de la cama.

— Jackson has cuidado muchísimo de Stiles, siempre has tratado de hacerlo feliz y que nadie lo dañe. No eres solo su mejor amigo, eres su hermano y sé lo mucho que él te quiere. — rio levemente — Cuando salíamos me ponía celoso cuando hablaba de ti o pasaba tiempo contigo, era algo tonto pero así me di cuenta de lo mucho que Stiles te apreciaba y quería.

Jackson sonrió y miró a la chispa dormida.

— Sti me salvó de muchas maneras y lo quiero muchísimo, también es mi hermano y no sé que haría sin él. — miró al héroe — Por favor sigue haciéndolo feliz.

— Lo haré hasta el día que muera.

Ambos sonrieron y velaron por el sueño de su adorado castaño.

*

Derek sonrió al ver a su hermanito tan grande, lo dieron de alta del hospital unos días después de que ingresó. Necesitaba muchos cuidados para recuperarse por completo pero ahora podía ver a su hermanito crecer. Su padre seguía inconsciente después de gastar tanta magia para salvarlo, pero estaría bien, además de que Clark lo cuidaba todo el tiempo.

— ¿Estás bien, Der? — le preguntó Eli sentándose al lado de su hermano. Los Stilinski estaban sobre el sofá en la sala de estar de los Kent.

Clark quería que Derek se sintiera en casa así que preparó una habitación para el mayor en el primero piso y poco a poco compraban cosas que le gustaban al castaño. El mayor estaba agradecido, aunque no hubiera podido hablar con su papá se sentía muy bien con toda la manada y los cachorro a su alrededor, también Jon y Jor lo hacían sentir en casa, los chicos eran geniales.

— Estoy muy bien. Solo estaba viendo lo mucho que has crecido, te pareces mucho a papá. — le dijo Derek con ternura mientras acariciaba el cabello del menor.

— ¿De verdad? Yo siempre he sentido que tú eres la copia de papá.

— Los dos lo somos, pero te pareces a él cuando era joven. El tío Issi me ha contado muchas anécdotas de papá y eres igualito.

Eli sonrió con emoción.

— Me alegra parecerme a ti y a papá. No quiero ser como él.

Derek tomó el rostro de su hermanito.

— Jamás serás como Mccall, tú eres lindo y tierno, además amble y siempre piensas en los demás. Puede que el haya sido un donante para que nacieras, pero solo es eso, tú eres hijo de Mieczyslaw Stilinski y mi hermanito, no eres de nadie más. Eres un Stilinski.

Eli sonrió y abrazó al mayor.

— Me alegra de que estés aquí, ahora si la familia está completa y papá podrá ser completamente feliz.

— Lo extrañe muchísimo.

— Yo también, Der.

Eli sonrió en los brazos de su hermano mayor, quería memorizar hasta el pequeño detalle del mayor: su aroma, sus latidos, su respiración. Todo. Ahí estaba su hermano mayor después de tanto tiempo vivo y feliz.

*

— ¿Así que te enamoraste de Eli a primera vista? — le preguntó Derek al chispa con ternura.

— Algo así, la verdad se veía muy tierno y no pude evitar ser amable con él. — dijo Jonathan levemente sonrojado.

— Esta siendo tímido, cuando llegaron Sti y Eli siempre a su alrededor. Jon andaba como cachorro detrás de Eli, eran tiernos. — dijo Jordan con diversión.

Derek rio levemente mientras comía un poco más de helado. Los cuatro se habían quedado en casa y comer helado, lo último había sido idea de Jordan. Él era el más tranquilo con todo y se esforzaba, a Derek le caía bastante bien y ya empezaba ver a esos dos como sus hermanitos.

— Papá me dijo que Sti al fin podrá salir del hospital, al parecer se despertó ayer por la noche pero volvió a dormirse rápido. — dijo Jordan emocionado.

Ninguno de los menores había podido ver a Stiles en el hospital pero Clark siempre les decía que todo estaba bien y que solo tenía que recuperar su fuerza para ir a casa.

— ¿Estás emocionado? — le preguntó Eli a su hermano.

— Sí, no he visto papá desde esa noche.

— Todo va a estar bien. — les dijo Jordan.

— Desde que pasas más te has vuelto muy confiable y bueno en consolar a los demás. Gracias, Jor. — le dijo Jonathan a su hermano mientras revolvía su cabello.

Jordan sonrió.

La puerta de la casa se abrió y los cuatro sonrieron emocionados al escuchar la voz de Stiles.

— Clark, estoy bien. — rio levemente — Puedo caminar bien.

— Lo sé, solo me preocupo por ti.

— Eres demasiado tierno.

Clark y Stiles entraron a la sala de estar, el mayor rodeaba a Stiles por la cintura, se veían felices.

Derek se levantó y corrió a los brazos de su padre. Eli hizo lo mismo.

— Te extrañe, papi. — le dijo Derek aferrándose a su padre.

Stiles sonrió y abrazó sus bebés, a sus niños y adorados pequeños.

— Yo también te extrañé muchísimo, Der. Ahora estás en casa, estamos juntos, al fin. Los amo mucho, mis niños.

— Nosotros te amamos mucho, papi. — le dijo Eli.

Stiles miró a Clark y los menores y extendió una de sus manos para que se unieran al abrazo. Eso hicieron.