Salí de bailar acalorada de un boliche e hice unos pasos hasta llegar a un callejón y me apoyé sobre la pared.
-¿Me pasas un porro?-miré al muchacho que estaba fumando uno y él levanto su mirada, pero no lo vi bien, no vi sus ojos, la poca luz me estaba jugando una mala pasada.
-Podemos compartir este y después hago otro-soltó como si nada, como si me conociera.
Él se acercó y ahora sí alcancé a ver su cara, había poca luz, pero noté algo que me llamó la atención, tenía un lunar en su carita y una mirada curiosa.
Me dio el porro y fumé un poco, él se apoyó sobre la pared quedándose a mi lado.
-Gracias-se lo devolví-¿te hartaste de estar adentro?
Él negó con la cabeza.
-No entré.. yo.. tengo un amigo que me pidió que le hiciera la segunda para encarar a una mina.. y no solo es mi amigo, estoy trabajando para él, así que no tengo otra que esperarlo -me miró con mirada pícara y me reí- es algo anticuado, ¿no? Esto de esperar a un amigo a que..
-Entonces vos sos una persona de valores, que se preocupa por los suyos y no lo dejaste en banda, escasean los grandes amigos.. bueno, los grandes hombres-me sorprendí "halagándolo" y el asintió con la cabeza
Lo vi fumar y devolverme el porro.
-Así es, supongo.. igual teóricamente ahora estoy cumpliendo con mi trabajo, me paga.. nuestra amistad surgió después de que me contratara, y no, ¡no soy un interesado! mi amistad es real-lo noté sincero y me reí, él se rió conmigo.
-Yo me escapé de ahí adentro, iba a verme con alguien, él quería coger pero yo no... yo prefiero conocer más a la gente, ¿sabes?-me abrí y comencé a hablar cómo un loro- ya sé, personas como yo escasean
Él elevó sus cejas y asintió con la cabeza.
-Yo también soy más de tu palo... obvio que coger es genial, pero... últimamente.. ya soy más viejo che, creo que hoy por hoy elijo que antes me pase algo-me miró y se le asomó una pequeña sonrisa.
Nos terminamos de fumar el porro y él armo otro, me lo puse entre los labios y el chabón lo encendió, me miró a los ojos y lo miré a los ojos.
-Entonces..-le hablé y me quedé en blanco- ¿hacemos algo? Otra cosa-cambié de tema- ¿una cerveza?
El "chabón" asintió y le sonreí, le hice señas para que me siguiera y cerca había un kiosko abierto, él compró bebidas medio de "contrabando" y las pagó él.
-Después me decís cuanto es-lo miré medio mal y él solo me sonrió-¡pero decíme tarado!
-¡Que confianza eh!-me jodió y elevó sus cejas.
Mordí mis labios y me reí, me di cuenta de que el sujeto me caía bien.
-¿Vamos a una plaza o...-¿le sonaría raro el que le sugiera ir a mi auto?- es más seguro en otro lado.. mi casa no aunque estemos cerca, y no vamos a hacer nada raro, ¡mejor mi auto!.. es un lugar cómodo, intermedio y seguro-decidí por los dos- es que en realidad no te conozco
Él chabón me miró con diversión y le sonreí, él me ofreció su brazo y lo tomé por ahí como si fuera mi amigo de toda la vida.
Caminé con él en absoluto silencio hasta que nos subimos juntos a mi auto.
Me dio el porro, fumé un poco y el chabón abrió una cerveza que me dio, después se abrió otra.
-¿Brindamos?-sugirió y asentí- por.. esta linda noche.. en la que tuve el gusto de conocerte.. mujer de baja estatura con sonrisa hermosa
Me reí fuerte.
-Soy Lali-le aclaré- en realidad Mariana, prefiero que me digas Lali antes que "mujer de baja estatura"-lo jodí y le saqué una sonrisa nerviosa.
-Mala mía Lali... ¡igual dije sonrisa hermosa!-se hizo el capo y nos reímos juntos- soy Peter.. Juan Pedro pero me dicen Peter-se presentó.
Choqué mi botella con la suya y bebimos.
-Un gusto Peter-dije al cabo de unos segundos- así que.. ¿estabas embolado?
-Sí.. pero ya no-fumé y solté el humito cerca de su cara antes de devolverle el porro- perdón que te lo diga.. pero que boludo el chabón con el que te ibas a ver que no quiso esperar a primero conocerte y después decirte lo de tener sexo.. sos la clase de mina que uno ve y dice FAAA QUE MINON-¿acaso me halagó?
Solté una risita.
-¿Gracias?-me hice la humilde- vos tampoco estas mal-tomé un sorbo pronunciado de cerveza y le toqué el pelo a chabón-¡que envidia! ¡Lo largo y sanito!
Él se rió de mis ocurrencias y me miró con intensidad a los ojos.
Y de un momento al otro me encontré fumando un montón, riéndome con un extraño, pasando una de las mejores noches que no tuve en mucho tiempo.
-¿Alguna vez alguien te chupó el lunar?-le pregunté más en confianza- alguna ex.. alguna actual..
-¿Te interesa saber mi situación sentimental?-se hizo el picante y le di un golpecito en el brazo riéndome.
-No tonto.. solo me da curiosidad... la gente suele tener fetiches..-le sonreí.
-Entonces si vos fueras mi ex o mi actual... ¿ese sería tu fetiche? ¿Lamerme el lunar?-me molestó y solté una carcajada.
-Sería uno MUY bizarro-lo admití y me encogí de hombros, el tipo elevó sus cejas coqueto- yo...-hice una breve pausa al ser consciente de nuestra cercanía-¿me estas poniendo tu cara para..
Él se rió y cedió, entonces hice una "locura" le lamí el lunar a un hombre que había conocido hace.. ¿una hora? ¿Dos? ¿Cuanto tiempo llevo drogándome y tomando con este tipo?
-Bueno.. eso es.. todo..-él se apartó y se terminó su cerveza de una-supongo que tenes otras cosas que hacer, me voy a..
Iba a irse, él pensaba abrir la puerta, pero lo detuve agarrándole la mano, en ese instante sentí electricidad, desconcertada lo solté.
-No quiero que creas que soy una degenerada que te esta acosando.. te agarré porque.. lo estamos pasando bien y... me caes bien y... no quiero irme a mi casa a dormir
-¿Entonces que cosa más te gustaría hacer?-me miró a los ojos y me acerqué lentamente.
Toda mi idiología de no avanzar demasiado en una primera cita se fue al diablo, y se fue al diablo porque esto no era una cita, frente a mi tenía a un chabón que a lo mejor no iba a ver nunca más.
Y lo besé...
Él se quedó estático, tieso... y me arrepentí, pero de última podía hecharle la culpa a mi poco juicio, al alcohol y la marihuana.
Estaba por agarrarme un ataque de nervios, me aparté levemente y él me tomó por la barbilla, acercándome a sus labios, me los miró y me miró.
-No.. no te rechacé solo.. antes hablamos de.. vos no sos.. yo tampoco soy.. somos más sentimentales.. y..-iba a seguir dando vueltas y me reí-¡¿qué?!
-¡Ya está! ¡Ya fue Juan Pedro! No hace falta que me expliques nada... -quise cambiar de tema para no sentirme más humillada.. entonces hubo un giro inesperado, él no me soltó de la barbilla, en vez de eso me besó.
Mis labios y los suyos se amoldaron de una manera increíble, me animé a acariciar su lengua con la mía y se me escapó un maldito y audible jadeo.
-OK, esto fue suficiente-me reí nerviosa y le di golpecitos en el pecho- tengo más calor que antes, ¡la puta madre! Y vos mismo lo dijiste.. antes te dije algo.. y vos me dijiste algo.. y.. eso -finalicé.
Puedo decir algo: todo se fue a la MIERDA.
Terminé chapando como una quinceañera, en mi auto y desnudando a este ser humano gracioso, sexy e interesante.
Él dudó en varios momentos, pero yo lo guié y le hice saber que estaba dispuesta a ir por más.
Juan Pedro me hizo una caricia en la espalda desnuda mientras me acomodaba sobre él para arrancar a experimentar lo que sería "la frutilla del postre" de una gran noche/madrugada.
Escondió su cara en mi cuello mientras nos dejábamos ser y hacíamos lo que los dos nos contamos que nunca íbamos a hacer, por lo menos en este momento de nuestras vidas.
Fue increíble, rápido, y quise más.. entonces no lo dejé irse pronto, y él tampoco quiso soltarme.
Aferrada a él me quedé agitada, y mi corazón estaba acelerado... alocado..
-Ahora.. ahora creo que sí que tengo que irme.. me deben.. estar buscando, bueno mi amigo o...-Juan Pedro buscó su celular por mi auto y tardó en encontrarlo, mientras tanto me puse mi top para no estar tan en bolas- ahh, ya se fue sin mi-leyó su celular- no escuché cuando sonó, estaba en mudo
-Qué lastima...-lo miré burlona- igual mal no lo pasaste querido-le sonreí.
-Claramente mal no lo pasé.. y vos tampoco lo pasaste mal-su sonrisa pícara me gustó mucho, a los segundos soltó un suspiro y le cambió la cara- ahora que lo pienso me quedé a pata.. él tenía su auto
-¿Te llevo?-me ofrecí voluntariamente- aunque.. creo que no es una buena idea que maneje.. ¿y vos irte así?-lo señalé- fumado.. tomado... despeinado-me reí divertida y él elevó sus cejas coqueto-podes.. venir.. a mi casa y.. descansar.. en el sillón eh, es a unas cuadras.. y en unas horitas volvemos caminando hasta acá y te llevo en mi auto.. ¿o es mucho lo que te estoy ofreciendo?
-Es.. es una buena idea la tuya-aceptó sin dar vueltas y nos bajamos de mi auto después de cambiarnos del todo.
Caminé por algunas cuadras y me siguió mientras cantaba una canción de los Bábasónicos que me sonaba mucho pero no me acordaba el nombre.
-Hogar dulce hogar-abrí la puerta principal de mi edificio.
Nos subimos al ascensor y toqué el número del piso.
Juan Pedro empezó a cabecear y chasqueé mis dedos frente a su cara para que no se duerma, él se sobresaltó y abrió nuevamente sus ojos.. y pude verlo bien.. en la luz.. sus ojos eran verdes, y su lunar era imponente.
Sonó el ruido del ascensor indicando que llegamos a mi piso, Juan Pedro me abrió la puerta para que pase primera y ese gesto me sorprendió.
-Ahora sí hogar dulce hogar-abrí la puerta de mi lugar, mi hogar, sin ser consciente realmente de lo que había hecho le abrí las puertas de mi hogar a Juan Pedro, el chabón interesante.
Me saqué los tacos y comencé a sacarme el maquillaje en el baño, hice la mía, y cuando iba a tirarme a mi cama me acordé de que no estaba sola.
-Te ves.. bien..-Peter me halagó y le sonreí con una sonrisa chiquita- sin nada de todo eso..
-Gracias-suspiré- te doy.. te doy algo para..-agarré una almohada de mi cama y me paré para buscar una frazada- no encuentro ni una colcha, no se donde carajo guardé las cosas-me quejé en voz alta.
-Tranqui, con la almohada estoy, solo voy a quedarme a dormir un ratito-fue lo último que dijo antes de quedarse a dormir un ratito: hasta la una de la tarde del día siguiente.
El agotamiento físico me pasó factura y me quedé dormida de manera profunda, y cuando abrí los ojos al día siguiente me encontré con que estaba compartiendo mi cama... y eso era algo que no sucedía hace AÑOS.
Me quedé pensando, mientras miraba al sujeto que tenía a mi lado dormir.. ¿el porque todo había terminado así?, algo de especial tenía que tener este ser, para que a pesar de estar tomada y fumada haya confiado.. le haya permitido dormir bajo mi techo y le haya permitido tocar mi cuerpo.
Todo se desvirtuó, pero cuando me desperté no me arrepentí.
Él abrió sus ojos verdes y me atrapó mirándolo, me sonrió con una sonrisa y algo en mi interior me hizo pensar de que él iba a ser el comienzo de mi final.. ¿final de qué? ¿Final de soltería? ¿Final de vida? Final..
-Tengo que irme-me cortó todos los pensamientos de una y elevé mis cejas- gracias por todo
Se puso de pie y se puso de espaldas, se puso los pantalones y por eso me di cuenta de que todo este momento había estado durmiendo conmigo en mi cama y en ropa interior.
Desconcertada me arreglé para salir de mi habitación presentable y lo acompañé hasta la puerta.
-A lo mejor nos volvemos a ver y.. podemos hacemos amigos-soltó mientras bajábamos en el ascensor.
Sus palabras me "descolocaron".
AMIGOS, ¡GENIAL!
-Ok-respondí cortante sin saber bien porqué.
Caminamos juntos por la entrada principal de mi edificio y le abrí la puerta dispuesta a despacharlo.
-Entonces.. ¿nos vemos?-me saludó como si nada.
Lo dejé pasar delante de mi para cerrarle la puerta en la cara.
-Ey, pasame tu número-él habló antes de que cierre la puerta- Mariana, ¿no?-se hizo.. ¿el desentendido?
Asentí con la cabeza.
Él tipo escribió mi nombre en su celular y me lo pasó para que anote mi número, lo hice y le sonreí con sarcasmo.
-No creo que volvamos a vernos, pero igualmente te deseo lo mejor-me despedí y el guacho me sonrió con una sonrisa genuina y linda, adorable... ¡¿adorable?!
Me saludó con la mano y lo saludé con la mano.
Cuando me quedé sola y lo vi caminar de espaldas a mi y a lo lejos le hice fuck you., eso porque por un momento me hizo creer que era un hombre fuera de lo común, pero al parecer es igual a la mayoría, el tipo es la clase de hombre que tiene sexo y manda a sus "conquistas" a la friendzone.
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Friendzonados
FanfictionA dos personas leales no les gusta tener que mentir, pero dos personas leales sí pueden mentirse a sí mismas, porque no les gusta lastimar, hasta podrían sacrificarse..