Capítulo XV

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Desde la primera vez en que Haruki dijo su primera palabra habían transcurrido al menos 3 primaveras más y ahora el pequeño bebé de Yuuji  ha crecido. Por lo que justo hoy era su primer día en el jardín de niños al cual lo inscribió el joven pelirosa.

No era secreto que el pequeño niño con los ojos del cielo y el océano era un completo chicle en cuanto a su papá y Nanami. Y aunque era adorable resultaba un tanto problemático,  justo como ahora.

– debes quedarte un rato Haru-chan – intentaba consolar el rubio – después volverás con Yuuji y conmigo – intentaba despegar a Haruki de la pierna del pelirosa.

– ¡NO! ¡Haruki quere quedase con papá! – gritó fuertemente mientras seguía abrazando a Yuuji – Haruki quere a Yuuji –

– Haru-chan~ – susurro con cansancio – solo serás unas horas, es más, cuando menos te des cuenta ya estarás en casa  – dijo colocándose a la altura del niño.

Haruki pareció pensarlo un momento sin embargó no funcionó,  continuaba renuente a separarse de Yuuji. ¿Pero quien lo podía culpar?  A final de cuentas desde que tenía memoria casi nunca se separo de papá Yuuji o de su papá Nanami,  aunque lo entendía del último ya que este le traía siempre y sin falta de su yogur favorito cada que viajaba.

– Haru-chan~ – llamó con voz baja y tranquila Yuuji – mírame ¿si~? – acarició su cabeza delicamente.

El pequeño albino alzó la mirada con temor de ser visto como un niño malcriado, por que sí,  Yuuji le habia mostrado esa mirada de decepción las veces que se comportaba como uno cuando no conseguía lo que queria y no le gustaba para nada.

Pero terminó encontrándose con una mirada de comprensión y cariño, le hizo sentir mal. Se separó de la pierna de su papá y este se coloco frente a él.

– bien~ ya habíamos tenido esta platica ¿verdad? – preguntó y Haruki asintió levemente – no puedo estar las 24 horas pegado a ti – Haruki miro a Nanami. Yuuji se dio cuenta – y Nanam tampoco – intervino antes de que el rubio contestará – necesitas ir a la escuela para aprender más cosas, además ¿no dijiste que querías amigos~? – expresó con cuidado.

Haruki desvío la mirada. Él lo había mencionado unas veces, pero si eso significaba no estar con papá Yuuji,  entonces no quería amigos, solo necesitaba a su papá Yuuji. Y también con su papá Nanami junto a él.

– Haruki no quere a nadie, sólo a papá – soltó con pequeñas lagrimas apretando la orilla de su camiseta – Haruki se sentirá sólo sin papá – comenzó a sollozar poniendo su mejor carita de perrito triste.

Yuuji trataba de resistirse a esa expresión que le recordaba a alguien que buscaba que siempre apoyara sus "ideas". Maldijo mentalmente a Satoru.

– pero papá se sentirá triste si Haru-chan no va a la escuela – contradijo Nanami –  además cuando salgas podemos ir al muelle y navegar un rato, el barco necesita a un capitán que sea muy inteligente y sabio – continuó hablando.

Después de llegar a un acuerdo en los últimos 10 minutos Haruki por fin acepto entrar a la escuela,  con los ojitos inchados pero sin más lagrimas y con la frente en alto se despidió de su papá Yuuji y papá Nanami. Ambos adultos correspondieron a la despedida observándolo entrar, Yuuji fue el que comenzó a llorar después. Su bebé estaba creciendo.

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