DIECISÉIS

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Una brisa azota la ventana apartando las cortinas permitiéndome percibir el auténtico clima gélido en Forks.

Suelto un suspiro pesado mirando con desdén la ventana, el evento ocurrido hace días no logra salir de mi cabeza 'el cumpleaños de Bella' pensé para no continuar mortificandome con el tema de mi hermano.

El sonido del motor resonando por cada calle hasta llegar al instituto finalmente cayendo en último año de nuevo una vez estacionada la moto emprendí mis pasos apresurados hasta aparecer frente a Bella con una sonrisa cálida está me mira un momento.

Detiene su caminata sacando una cámara de su bolso.
—¿Puedo tomarte una foto? Mi madre quiere que llené un álbum de mi último año.
—Una sonrisa tímida apareció en su rostro.

—Muy bien, tomemos una foto.
—Por ser la más alta tome la cámara alzándola una vez tomada la castaña vio la foto con una leve sonrisa.
—Gracias.
—Pronuncio en un susurro audible sonreí relajada.

—No es nada, Bells.
—Di unas suaves palmadas en su cabeza un momento después se aproximó a los chicos con la misma petición recibiendo aceptación la diferencia es que esta vez ella no sale en la foto.

Unas manos rodearon mi cintura golpeando levemente mi espalda con el pecho del rubio sus caricias se hicieron notar.
—Controlarme cerca de tí está siendo cada vez más difícil, ricitos.
—El aliento golpeó suavemente mi oreja provocando que cierre los ojos disfrutando su melodiosa risa también lo que provoca ésta.

Inmediatamente abrí los ojos volteando a ver los suyos que destellan picardía, sabe muy bien lo que provoca.
—¿Estas jugando sucio, ricitos?
—Mi voz sonó un poco más grave que antes.

—Será mejor que se tranquilicen estamos en publico.
—Emmet se entrometió con su típico tono ocurrente.

Voltee a este con una sonrisa.
—Explicaselo a éste retozón.
—Mi mirada viajo nuevamente hacia el rubio encarandolo con viveza.

—Vayamos a clases.
—Comento a Alice tomándome del brazo mis órbitas encontraron en el paso a Bella hablando con un moreno cuyo cabello es largo extrañamente un olor no tan fuerte a lobo se encuentra impregnado en él.
En las escaleras me detuve notando que Bella venía junto a Edward charlando de un salto Alice se encuentra frente a la pareja felicitando a Bella por su cumpleaños con pena recibe su abrazó le entrega una caja la castaña con vergüenza le reprocha no queriendo regalos mientras Aiden espera a Alice a un lado del rubio que no piensa soltar su agarre sobre mí notando la duda de la castaña hacia la cordial invitación de Alice subí mi mirada hacia Jasper que imita mi acción le señaló con los ojos hacia Bella un momento después Bella se redimió ante la pequeña vampira.

Sonrío con timidez hacia nosotros.
—Jasper no es justo que controles el estado de ánimo.

—Lo lamento Bella.
—Me miró disimuladamente aún así lo noté.
—Feliz...

Este se interrumpió al notar el disgusto de la castaña.
—Olvídalo.

—Feliz cumpleaños, Bella.
—Pronuncie suavemente con cierto disimulo hacia ésta que por suerte no me miró con reprochó todo lo contrario me regaló una sonrisa sincera que correspondo con gusto.
Las clases transcurrieron con aquel ambiente insípido que le caracteriza por ser aburrido, tedioso, y una infinidad de palabras que describen su atmósfera.
Deslizó mis manos suavemente por la tela arreglando cada detalle su ropa mis órbitas se fijan mas arriba encontrándose con las suyas que observan atentamente cada una de mis movimientos mi palma va directo a su rostro el simple contacto enloqueció mi instinto sonreí levemente golpeando suavemente mi nariz con la suya una vez separados.
—Te ves muy apuesto con todo, eh.
—Mi dedo rozo el torso de su nariz con ternura.

Ha caído la noche la casa Cullen no puede estar más animada por la celebración dedicada a la pequeña humana apreciada por la mayoría de miembros de la familia, el roce de sus labios contra los míos hicieron mis manos temblar levemente que se deslizaron por la nuca hasta masajear el cabello del rubio profundizando el beso, mi cuerpo exige más, más, mi corazón late como loco, mis colmillos amenazan con salir ferozmente con un objetivo, mi mano se posó en su pecho alejándolo rápidamente baje mi mirada al suelo con mis palmas echas puños, mi corazón se apretujo dentro de sí al alzar la mirada el rubio debió haber pensado que le he rechazado pose mis manos en su rostro rápidamente.
—Cariño, no es lo que estás pensando.

Su mirada seguía evitando a toda costa la mía cabizbaja.
—Será mejor que bajemos.
—Su tono de voz deprimente hizo un vuelco en mí.

—Jasper.
—Pronuncie sin remedio buscando las palabras para intentar explicarle; cuando se deshizo cuidadosamente de mi agarre emprendiendo los pasos hacia abajo yo siguiendo su ritmo desanimada definitivamente le tendría que contar sobre la marca una vez abajo la pareja no tardo en presentarse.

—Lamento todo ésto tratamos de controlar a Alice.
—En un tono amable se defiende Carlisle.

Su esposa ríe levemente con una sonrisa comentando.
—Cómo si eso fuera posible, feliz cumpleaños Bella.
—El flash de las fotos que saca repetitivamente Alice llama la atención de la castaña.

—La encontré en tu bolso, ¿Te molesta?
—Pregunto Alice apenada mientras la castaña responde que no con la cabeza.

—Saliendo con mujeres mayores, excelente.
—Se burló Emmet hacia Edward logrando sacar una corta risa de mi parte.

La rubia le tendió a la castaña una caja.
—Es un collar, Alice lo escogió.
—A lo que la castaña le agradece con amabilidad.

—¡Sonrían!
—Alice tomo una foto de la pareja contenta.

—Éste es de Emmet toma Bella.
—Le entrego una caja a Bella la castaña la sacude un poco intentando averiguar qué permanece allí extrañada por no sentir nada dentro de la caja volteo hacia Emmet.

—Ya está instalada en tu camioneta, al fin, un equipo de sonido decente en esa chatarra.
—Se burló un poco el mastodonte.

A lo que la castaña defiende.
—Oye, no la llames así.

Separándome un momento de Jasper le tendí a Bella un libro bien cubierto por papel de regalo, días anteriores la castaña le hablo sobre ese libro lo asombroso que es y lo difícil que es de conseguir, la castaña me sonrió agradecida.

—Muchas gracias, Selene.
—Volví lentamente hacia Jasper entrelazando mi mano con la de éste que la acepto sin problema mientras Alice anunció el obsequio de Esme y Carlisle.

Fuerte.

Agradable a primer olfateó.

Y dulce como puedo imaginar.

Sangre.

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