Tu no cuentas

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Querido y gentil lector:

Lamento mucho las demoras con los capítulos, pero haré lo posible por subir por los menos tres capítulos por semana, me han dejado muchas tareas y no he podido escribir, plis perdonen los errores, y escriban sus opiniones, algo que piensen que pueda mejorar, tomaré en cuenta todo lo que me digan, siempre me encantan sus comentarios, espero la historia sea de su agrado, sin más por el momento, espero les agrade este capítulo 🐝🦋

Atentamente

Lady Karyquev❤️🐝🦋

Seguían pasando los días y Colin no podía más con el distanciamiento entre él y su amiga, así que decidió ir a la casa Featherington, después de la hora de cortejo, sabía que ella estaría desocupada, pues escuchó a Eloise mencionar que Lady Featherington estaría en casa del señor Finch con sus hijas mayores porque las revisaría un médico para darles recomendaciones para quedar embarazadas y su mamá no le había permitido asistir a Penelope, pero que Eloise tampoco podría ir porque su madre la llevaría toda la tarde con la modista, así que estaría sola, por lo que decidió ir esa tarde que estaría sola.

Rae le anuncio a Penelope la visita y ella acepto recibirlo, así que eso al menos era un avance

-Buenas tardes -dijo haciendo una reverencia que Penelope correspondió educadamente

-Buenas tardes, Señor Bridgerton

-Vamos Pen, dime Colin

-Claro Colin, perdón últimamente, he utilizado incluso con Eloise las normas sociales, pero ¿Quieres sentarte?

-Después de tí -ambos se sentaron y Rae volteó hacia Pen y le menciono que traería bocadillos, mientras veía a Colin con una mirada curiosa, reprimiendo una sonrisa, debido a la sorpresa de su visita, sabiendo que Penelope lo había extrañado y necesitaban un momento a solas, además conocía muy bien el apetito del Señor Bridgerton, así que se despidió de ambos para dirigirse a la cocina -Pen quiero que sepas que de verdad lamento mis comentarios anteriores, pero no soy el mismo hombre de hace un año

-La verdad ya hablé con Eloise al respecto y me dijo tus motivos, pero para mí igual es doloroso y ahora es un fastidio verte volver a la sociedad con tanta soltura, que te hagas el interesante, y me hace pensar que estás fingiendo ser el hombre que sí quiso decir esas palabras, ese no es mi amigo y jamás lo será, yo oro por tener la misma atención, desde hace mucho tiempo y me he esforzado por eso.

Colin sabía que en Realidad ella tenía la razón y que eso era exactamente lo que estaba pasando, así que en ese momento decidió dejar de ser ese hombre que aprendió a ser en el verano -Pero ahora la tienes, siendo la Esmeralda de la Reina

-No es así de sencillo, si bien tienes razón y tengo más atención, eso no lo hace más fácil, es muy difícil mantener una conversación con un caballero, con el único caballero que se me facilita la comunicación es con Lord Debling -Colin no lo conocía, solo sabía por comentarios de su madre y hermanos que era muy excéntrico, pero desde ese momento el supo que no le caería bien, ni ahora, ni nunca, pero decidió ignorar aquel comentario, le pareció lo más cómodo.

-La verdad tus opiniones acerca de todo, ya sea literatura, escritura, arte, música, cualquier tema, siempre me parecen las más acertadas, no se lo digas a Eloise. -Lo último lo dijo apenas en un susurro.

Ella no pudo evitar reír ante tal comentario -Bueno quizá es cierto, porque en mi interior yo sé que puedo ser inteligente, graciosa y entretenida, pero de algún modo cuando estoy con un caballero, mis palabras se pierden entre el corazón y la boca, por lo que me encuentro diciendo algo torpe o probablemente nada, he mantenido conversaciones con algunos caballeros, pero normalmente se centran en lo que pasa en los bailes y suelo solo responder un sí o no -suspiro pesadamente mientras se recargaba en el respaldo del sillón.

-Siempre mantienes conversaciones interesantes conmigo -Colin respondió con una sonrisa dulce

-Sí pero tú no eres un pretendiente, tu... Tu no cuentas... Tu eres Colin... Tu eres mi amigo, ¿entiendes?

Colin

Claro que entendía y sentí que me había dado un dejavu de cuando yo mismo había pronunciado esas mismas palabras, pero que ahora sentí una amargura al escuchar las palabras, que un nudo en el estómago me impidió hablar, sabía que yo mismo había dedicado aquella frase hacia ella, pero ahora la sentí muy diferente, un gran dolor en el pecho me invadió, me dí cuenta que algo estaba pasando en mi interior desde que había vuelto a ver a Pen, ella era una constante en mi vida, que ahora sabía que siempre había dado por hecho que así sería toda la vida.

Después de que tarde en contestar Pen cambio su cara de una sonrisa cálida a una expresión de preocupación, tenía que contestar, no podía seguir callado

-Claro.. Amigos, es bueno saber que de nuevo somos amigos, este verano deseaba tanto escuchar esa frase -Era la verdad pero eso fue en verano, ahora quería saber que ella siempre sería mi amiga, pero no se lo podía decir o no por ahora al menos, ambos sonreímos -Entonces sí quieres conversar con hombres y encontrar un esposo, quisiera ayudarte.

-¿Ayudarme cómo?, no puedo tenerte conmigo todo el tiempo, mientras me susurras al oído.

-No será necesario, te daré algunas lecciones, y estoy seguro que las dominaras enseguida, la verdad es que estuve en 17 ciudades este verano y lo que aprendí, es que el encanto se puede enseñar... Lo que más deseo en este momento es recuperar la confianza de la única persona que siempre me ha hecho sentir valorado.

-Colin, no sé si entiendes que mi objetivo como mujer es encontrar un esposo, es cierto que conoces muchas partes del mundo, pero no creo que entiendas lo que es ser mujer, tú como hombre puedes elegir lo que quieres ser, tus sueños y pasiones, en cambio una mujer se tiene que limitar a soñar en formar una familia y ser una gran esposa, escondiendo las partes que el mundo no acepta, tengo sueños y sí consigo un buen esposo, podré lograr al menos uno.

Me sorprendió la impotencia de Pen y entendí su punto, no del todo, pero recorde a mi hermana Eloise, comprendí porque eran Mejores Amigas, quizá Pen era más reservada y quería lograr tener un lugar respetable en la sociedad, pero también le frustraba que las mujeres no eran más que futuras esposas -Bueno Pen, tienes razón soy hombre y no entiendo porque limitan el valor de una mujer, pero si lo que quieres es encontrar un esposo, justo por eso necesitas mi ayuda, sé cómo puedes atraer a un hombre. Por favor déjame ayudarte.

-Esta bien, tienes razón nadie entiende mejor a un hombre que otro hombre, así que aceptaré tu ayuda -Llegó la doncella de Pen con los bocadillos y el té, empezamos a comer ya que no pudimos seguir hablando tan libremente, pero me sentí el hombre más feliz del mundo, tendría a mi amiga más tiempo y así podría saber que era lo que estaba cambiando entre nosotros, sabía que quería a Penelope, pero el no tenerla, no saber de ella, me dolía, la extrañé más que a mí familia, aunque creo que fue por el distanciamiento entre nosotros, ¿verdad? ¿Es normal extrañar más a una amiga que a tu familia?, pues claro, ella era Pen, no era cualquier amiga, era mi MEJOR AMIGA sabía que Pen había cambiado, y aunque ya éramos de nuevo amigos, me preguntaba ¿Será normal extrañar a aquella debutante curiosa? Aquella que poco le importaban las apariencias y simplemente era ella cuando bailaba conmigo, esa chica que acompañaba en los rincones y éramos los primeros que tomábamos limonada y comíamos de la mesa de bocadillos, creo que sí, al fin y al cabo, a esa Pen no le preocupaba que decir ante un hombre, esa Pen no buscaba un esposo, simplemente le preocupaban sus amigos y leer, pero ahora, que buscaba un esposo, yo tenía que buscar la manera de pasar el mayor tiempo posible con ella, protegerla como le había prometido y ayudarla a buscar el mejor esposo posible.

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Mientras Colin pensaba, Penelope también lo hacía, ella solo pensaba que quería un buen esposo y le diera su espacio para seguir escribiendo con libertad, sin embargo ese no era el plan de Colin, él quería el mejor esposo para ella, "es lo que merece después de todo" pensaba.

-Mañana saldré a dar un paseo con mi familia, te veré ahí, ahí será la primera lección.

-Perfecto, solo por favor prométeme que no le dirás a nadie de esto, ni siquiera a Eloise, a ella se lo diré yo más adelante.

-Tienes mi palabra -De esa manera concluyó la visita de Colin en la casa Featherington.

Lo Inesperado (Polin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora