¿Quién es ella?

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El sol apenas se asomaba por el horizonte cuando Jeremy se despertó, sabiendo que el día que tenía por delante no sería fácil. La conversación con Igor pesaba en su mente, y aunque sabía que debía proteger a Sara, no podía evitar sentirse intranquilo. Mientras se vestía, sus pensamientos giraban en torno a las posibles repercusiones que esto podría tener en su relación con el equipo. La camaradería y el respeto entre jugadores eran esenciales, pero el bienestar de Sara era su prioridad.

Después de un desayuno ligero, Jeremy salió de su casa con una determinación férrea, aunque su estómago estaba lleno de nudos. Al llegar al campo de entrenamiento, buscó a Igor entre los demás jugadores, esperando el momento adecuado para hablar con él a solas. No quería que este asunto se convirtiera en un escándalo dentro del equipo.

El entrenamiento comenzó como cualquier otro día, pero Jeremy no podía concentrarse. A cada paso que daba, a cada pase que recibía, su mente volvía al inminente enfrentamiento. Igor, por su parte, parecía ajeno a la tensión que se acumulaba. Sonreía y bromeaba con los otros jugadores, sin darse cuenta de la tormenta que se avecinaba.

Finalmente, el entrenamiento terminó, y mientras los demás jugadores se dirigían al vestuario, Jeremy aprovechó la oportunidad para acercarse a Igor. Con una expresión seria, lo llamó a un lado.

"Igor, ¿puedo hablar contigo un momento?" dijo Jeremy, tratando de mantener la calma en su voz.

Igor lo miró con curiosidad, notando el tono serio en las palabras de Jeremy. "Claro, ¿qué pasa, hermano?" respondió, sin sospechar la gravedad del asunto.

Jeremy tomó un respiro profundo antes de continuar. "Es sobre Sara... Lo que ocurrió anoche en la fiesta y los mensajes que le enviaste después. No me pareció apropiado, y quiero que entiendas que eso no puede seguir pasando."

Igor frunció el ceño, confundido por la acusación. "¿Qué quieres decir? Solo estaba bromeando con ella, no es para tanto."

Jeremy apretó la mandíbula, tratando de mantener la compostura. "No fue una broma para ella, Igor. Se sintió incómoda y me lo hizo saber. Es importante que respetes sus límites."

Igor soltó una risa breve, como si no pudiera creer lo que estaba escuchando. "Vamos, Jeremy, estás exagerando. Solo le estaba enviando un par de mensajes. Si no le gustaba, solo tenía que decirlo."

Jeremy sintió un nudo en el estómago al escuchar la despreocupación en la voz de Igor. Sabía que debía ser firme, pero también quería evitar un conflicto mayor. "Ella no debería tener que decirlo, Igor. Deberías entenderlo tú mismo. Todos necesitamos respetar los límites de los demás, especialmente cuando se trata de algo tan personal."

Igor levantó las manos en señal de rendición, pero con una sonrisa burlona en los labios. "Está bien, está bien. No te pongas tan serio. Dejaré de mandarle mensajes, si eso es lo que quieres."

La respuesta de Igor no tranquilizó a Jeremy. La actitud despreocupada de su compañero solo lo hizo sentir más frustrado. "No es solo lo que quiero, es lo que Sara necesita. Y espero que lo entiendas, porque no quiero que esto afecte nuestra relación en el equipo."

Igor lo miró por un momento, como si estuviera evaluando la situación. Luego, con un encogimiento de hombros, respondió: "Está bien, Jeremy. Lo entiendo. No te preocupes, no habrá problemas."

Jeremy asintió, aunque no estaba del todo convencido por la respuesta de Igor. "Gracias, eso es todo lo que pido."

Mientras Igor se alejaba, Jeremy se quedó solo, sintiendo un alivio momentáneo, pero también una inquietud persistente. La conversación no había salido como esperaba. Aunque Igor había prometido dejar de molestar a Sara, su actitud no inspiraba confianza. Sabía que tendría que estar atento a cualquier señal de que el problema no estaba realmente resuelto.

Un Gol Al Corazón  -  Jeremy Sarmiento Donde viven las historias. Descúbrelo ahora