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Miraba a Muzi que estaba cambiando el pañal del bebé que Silvio había secuestrado mientras Lin y Silvio discutían abajo.

Muzi término y acostó al bebé en la cama y ví a estrella en su cuna recargando energías.

Muzi me observó y sonreí, sabía que si seguía vivo su plan había funcionado y eso me aliviaba bastante.

Muzi extendió sus brazos y corrí a abrazarlo escondiéndome en su pecho.

— Pensé que estabas muerto — susurré y Muzi me besó levemente.

Sonreí y él beso mi mejilla.

— No te dejaría solo — dijo y le sonreí.

Nos acurrucamos en el sofá juntos ya que las luces estaban apagadas.

Muzi jugaba con mis dedos y yo con los suyos.

— ¿Qué vas a hacer ahora?— cuestioné y Muzi se quedó callado con nerviosismo.

— Iré a ariox — susurró.

La puerta se abrió y Silvio entro.

Force mi sonrisa y Muzi igual y Silvio se sentó con nosotros para sentar a Muzi en su pierna y a mí en la otra.

— encontraron varios soldados muertos por disparos o puñaladas está noche¿Algo que decir?— preguntó Silvio y Muzi lo abrazó del cuello.

— En mi defensa el de rango bajo me descubrió y me disparó primero — dijo Muzi subiendo su pantalón para revelar el agujero de bala que estaba cerrando.

Solté un bostezo y me acosté en el hombro de Silvio para intentar dormir mientras veía a Muzi y Silvio que se habían comenzado a besar.

Muzi confiaba demasiado en Silvio, y sabía que si el plan se cagaba se debía a eso.

Aunque yo no lo llamaría confianza, más que confianza eso parecía ser una obsesión enfermiza y mutua.

Silvio me cargó y me acostó en en sofá para cargar a Muzi a la cama el cual no protesto.

No necesitaba ser inteligente para saber qué era lo que ambos querían del otro.

Y no, no era sexo y mucho menos era amor.

Era poder, era el deseo de competir sin agresividad por poder dominar al otro a su antojo porque ambos me habían demostrado eso desde que salí de ariox, ambos querían derrotar al más fuerte pero todavía no estaban a la altura del otro y por eso simplemente se atraían.

Me habían demostrado algo sencillo...

Muzi y Silvio se iban a destruir mutuamente si seguían con esa relación enfermiza.

Después de todo…ambos eran experimentos creados para destruirse mutuamente.

Mire a Muzi que ahora estaba debajo de las sábanas rasguñando la espalda de Silvio mientras Silvio le mordía el cuello y eso me lo demostraba, cada que se juntanban inconscientemente eran más agresivos que la vez anterior.

Cerré los ojos para intentar dormir y ignorarlos pero recordé algo.

Me levanté y me gane las miradas de ambos y tome al bebé de la cama para ir y jalar el corral de estrella para salir de la habitación.

Malditos estúpidos a mí ni siquiera me gustan los niños menos los bebés.

¿Qué seguía con ellos?¿Medición de penes? Están bastante parejos en ese aspecto también, mejor que sencillamente abracen una bomba hasta que cuente cero y listo.

(***)

Ví a Muzi que estaba ayudando a Silvio a colocarse el uniforme con una pequeña sonrisa, se notaba que estaba disfrutando eso.

Virus Ariox [ Silvexkato ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora