🪡011🧶

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Milica, 8 años, Serbia distrito Belgrado.

Todo se veía tan bonito, habíamos venido de vacaciones quería ver las playas e ir a los museos.

— Papi, papi podremos ir a los parques —  pregunté dando saltitos, mi hermano venía agarrando mis manitas para que no me cayera y golpeara.

— Claro que sí mi joya, iremos a todos los lugares que ustedes quieran pero primero hay que cambiarnos — dijo con una sonrisa, mamá venían a nuestro lado.

habíamos llegado hace dos días pero papá primero tenía que hacer algunos trabajos con señores trajeados. Mamá se acercó poniendo en mi cabeza un sombrero blanco, que hacía juego con mi vestido azul y flores blancas.

Vi un puestecito de helados y se me antojaron mucho.

— Mami podemos comer helado, quiero uno con muchas chispas de chocolate —  pregunté, mamá asintió y fuimos a comprar helados.

Al acercarnos, el señor nos sonrió con amabilidad.

— Buenos días señor, me da tres helados por favor de vainilla y uno con chispas de chocolate por favor, Andrej cariño de que quieres el tuyo —  preguntó hacia mi hermano. El eligió uno de fresa con chispas de colores.

— Se ve muy rico, me compartes del tuyo —  pregunté hacia mi hermano. Me dio del de él con la cucharita. Pero no era tan rico, hice un gesto feo — eso sabe feo, ya no quiero el tuyo.

— Para que me pides tonta, a ti nunca te ha gustado la fresa — dijo desordenado mi flequillo, lo manotee y el solo río.

Caminamos hacia los autos grandes y nos subimos para ir a casa. El camino estaba lleno de árboles muy grandes, y muchas flores. Al llegar había otros autos grandes que no eran de papi.

— Papi quienes son, se ven feos y me dan miedo — pregunté poniéndome detrás de él una vez bajamos de los autos.

— Tranquila solo son los que cuidan de tu abuela, ¿Quieres conocerla? — preguntó con una sonrisa, se me iluminaron los ojos, nunca había conocido a la abuela por parte de mi padre.

— Si quiero conocerla, será igual de increíble que la abuela Branka —  pregunté sonriendo, recordando a mi abuelita, quería que está también fuera así con nosotros.

Papá sonrió triste, no sé porqué pero luego asintió. Caminamos dentro de la casa y en el vestíbulo había una señora que parecía a las brujas que salen en los cuentos, me escondí detrás de mamá.

— Madre, que gusto que vinieras, pero me gustaría más que me avisarás — dijo papá acercándose a la bruja.

Mamá trato de sacarme para poder saludarla pero negué varias veces, se veía mala.

— Hijo, no creí conveniente que tuviera que avisar para poder conocer a mis nietos, o si Nuera — dijo y yo sentí muy feo, mamá sonrío asintiendo.

— Así es señora, ellos son Andrej y Milica — mamá nos presentó, mi hermano se acercó con rostro serio y yo solo asentí.

— Te pareces mucho a tu padre, pequeño, igual de hermoso — sonrío hacia Andrej y luego volteó a verme, quería esconderme o comerme uno de los pastelitos de Alicia y hacerme pequeña. — Tu debes ser Milica, saliste a tu madre eso parece.

Miró a mamá feo, y se giró para poder hablar con papá juntos se fueron hacia donde papá trabajaba.

— Mami ella me da miedo, se parece a las brujas sólo le falta la nariz chueca, no me gusta —  dije y mamá me acarició mi mejilla.

Runaways En Las Nubes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora