La hora marcaba las doce y media del medio día y los canales de televisión más importantes se encontraban trasmitiendo la noticia que habría golpeado a un imperio completo varios años atrás, pero esta vez se trataba de lo tan esperado por tantas estrellas durante la tan insólita huida de quien ahora se encontraba tras rejas.
En cada cuadra, cada televisión de cada casa familiar, en los trabajos, incluso las escuelas y por supuesto, en los teléfonos portátiles de todas las estrellas se encontraba transmitiendo a cada minuto las últimas noticias que tenían a todo un imperio estupefacto.
_ Y volvemos con la última advertencia imperial. Reiteramos, se ha capturado a la asesina más buscada los últimos doce años, repetimos, en este mismo instante se están llevando a cabo las pericias necesarias. Nos ha llegado información de último momento, se ha aprobado un juicio contra la ex monarca que podría llevarla tras las rejas las próximas setenta y dos horas. Tu canal de confianza estará allí para anunciar las próximas acciones del juicio. Ahora vamos con los testimonios del abogado defensor Machuca que se especula está bajo este caso.
Las cámaras de aquella televisora se dirigieron con rapidez iluminando las grandes ojeras que decoraban la cara abrumada del excelentísimo abagado quien se presentaba ante las cámaras como todo un profesional dejando a lado todo tipo de sentimientos inapropiados.
_ Señor Machuca ¿es cierto que usted se encuentra tras la investigación del caso, y si es así ya se sabe quién será el abogado defensor de la reina asesina?
Un reportero oculto tras las grandes cámaras que disparaban la mirada atenuada del abogado mientras corrían las preguntas apuntó su micrófono sediendole el habla al hombre.
Machucha sujetó con fuerza el auricular que pendía de su cuello esforzando sus canales auditivos.
_ Lo lamento pero no estoy autorizado a dar esa información. El caso está bajo secreto de sumario, hay datos que lamentablemente no les puedo otorgar.
Dijo Machuca forzando su voz para hacerse notar ante la orda de periodistas y oficiales que lo rodeaban con justa razón.
_ Otra pregunta más. Se rumorea que tanto la ex emperatriz Polaris Dy Crystal y su hija Capella se encuentran tras este juicio y están muy al pendiente de todas sus operaciones, teniendo en cuenta la relación de la asesina con el esposo de Capella ¿sabe algo usted de esto?
Otra voz se alzó por lo alto de aquella gran multitud de estrellas sosteniendo firmemente una grabadora.
_ De vuelta, no puedo dar esa información, con permiso, tengo mucho trabajo que hacer ahora mismo.
Respondió el abogado dejando a un lado los auriculares que le habían prestado previamente.
Las cámaras apuntaban con detenimiento la desesperada imagen de aquel hombre intentado entrar a su camioneta blindada tras la imposibilidad de aquellas estrellas quienes esperaban recapitular la mejor información posible.
_ Y ahí se va uno de los mejores abogados que tiene el imperio hasta el momento. Como podrán ver su camioneta se dirige a las instalaciones del palacio y como verán ya cruzó el puente. Mientras tanto volvemos al móvil con Susana y toda la información que hay del caso hasta el momento.
Mientras la periodista se encargaba de dar la retirada del excelentísimo abogado las cámaras se alejaban volviendo nuevamente a lo que un imperio completo quería saber.Una mano larga con uñas perfectas se acercó hasta el control remoto de la televisión dándole así fin a la gran especulación que se acrecentaba cada vez más y que interpelaba a todos.
Los ojos de aquella mujer se movieron lentamente centrándose en la junta que tenía en frente suyo. Sentada en uno de los tantos cojines de oro y terciopelo rojo, Polaris disfrutaba de todas las comodidades mientras su boca se refrescaba con un gin tonic de gran calidad.
Los ojos grises de la ex monarca quedaron a la espera de quienes estaban allí nerviosos con lo que podría suceder.
_ Hoy ya es el día su excelentísima ex emperatriz Polaris. Ya se ha recapitulado todas las pericias a nuestro alcance, la asesina se encuentra tras rejas en la cárcel del palacio real.
Informó Dante, uno de los tantos jueces predilectos en aquella causa.
_ Ya me dí cuenta, Cornius Dante. Los he reunido aquí para felicitarlos por su gran azaña. Me parece una maravilla como todos ustedes van incrementando sus poderes al nivel de una diosa.
Dijo Polaris recayendo toda su atención en los ojos aislados de Verónica.
La mujer se encontraba firmemente parada al lado de sus compañeros mientras en su mente se encontraba la revolución que podría ponerle una intensidad aún mayor a la actual, con todos los ojos posados en ella, Verónica solo podía simular una mirada ejemplar.
_ Eso sí, me gustaría que todos ustedes aceleren la cuestión. Hemos esperado tantos años para que este día llegara y ahora que está en nuestras manos no quiero que se salga de control. Quiero todo listo para las próximas setenta y dos horas, tal y como lo reiteran a cada rato en la televisión.
Agregó la ex monarca. Aquellas palabras fueron inmediatamente la razón principal en borrar aquellas sonrisas ejemplares que iluminaban los rostros de todos los presentes.
Incluso Verónica no puedo evitar demostrar una débil mirada punzante contra la ex emperatriz.
Pese a la concentración que habitaba en aquella reunión no pudieron evitar prestarle la debida atención a la repentina puerta dorada. Similar a un torbellino y repleta de emociones entrelazadas aparecía de aquella puerta una mujer más que preparada para unirse a la reunión.
Junto a ella y casi inadvertidos pasaban adelante un bufete de abogados igual de sorprendidos que aquella concentración de estrellas quienes veían la insolente aparición de Vanessa Deallus ante la ex monarca del imperio Andromidiano.
_ Su excelentísima emperatriz, debo de agradecerle de antemano el gran esfuerzo que sus soldados han hecho por mi y por...
Sin embargo la mujer no pudo terminar con su monólogo ante la intrepida mano sobrepuesta de Polaris.
La ex monarca reflejaba una minuciosa mirada desagradable oculta por sus inexpresivos ojos grises que le sacaban partido en más de una ocasión.
En vez de fijarse en lo obvio la mujer tomó delicadamente a la cónsul apartándola del centro máximo de atención.
_ Querida Vanina, precisamente no es el momento oportuno para esta plática pero de todo corazón agradezco tus molestias de venir hasta aquí.
Replicó Polaris proporcionando una pequeña mirada difusa a la reunión que esperaba en silencio aquel inconveniente.
_ Si la mujer ya ha terminado entonces es mi turno. Querida ex emperatriz me gustaría saber algo precisamente importante y es... ¿cuándo necesitarán de mi presencia en un juicio de la tele del que se viene a continuación? Usted sabrá de antemano que soy un elegido ante miles para ocupar un puesto así y veo que es la oportunidad precisa.
La voz con aires de grandeza de un abogado mezclada entre tantos abogados llamó poderosamente la atención de todos los allí presentes llevando a Polaris a responder con un pequeño suspiro de la poca paciencia que podía sostener.
_ ¿Usted es...?
Preguntó la mujer elevando su esbelto cuello ante las miradas confusas que la miraban fijamente.
_ Doctor Lucio H. Maitena Duoy.
Respondió el hombre haciéndose al frente con su destacada vestimenta y bien peinado cabello. Su mano extendida le daba el paso a Polaris para sostener y leer una sofisticada tarjeta de contratación que llevaba siempre consigo aquel hombre.
_ Tendrá que disculparme Doctor Lucio Maitena pero no recuerdo haberlo visto antes. He conocido miles de abogados a lo largo de mi vida. Y sí fue así entonces lo lamento y también lamento no ponerlo al frente pero esta causa ya tiene a su abogado defensor y lo tiene detrás suyo.
Respondió la ex emperatriz dejando a un lado la impoluta tarjeta.
Lucio dio una ligera vuelta atrás solo para encontrarse con la mirada penetrante de Verónica manteniendo en todo instante una gran distancia.
_ ¡Lo lamento por todo el mal entendido su excelentísima ex emperatriz Polaris Dy Crystal, él es solo uno de los abogados más recientes dentro de mi bufete de abogados!
La sonrisa sincera y voz temblorosa de Machuca desviaron completamente la atención de aquella terrible secuencia, o bueno, al menos terrible para Lucio.
_ ¡¿Qué está insinuando, que solo soy un novato?!
Lucio rápidamente laventó el timbre de su voz dirigiéndose rápidamente a Machuca.
Tras la mirada insistente pero pasiva de Polaris, Greenwich quien permanecía en todo momento junto a la ex monarca tomó rápidamente la situación en sus manos.
_ Esta reunión ya ha terminado, todos pueden volver a sus puestos habituales de trabajo, hay un gran juicio a la espera, muchas gracias por vuestra presencia.
Fue así como aquella pequeña riña entre Lucio y Machuca quedó en un segundo puesto dejando puertas para afuera una muy mala presentación de aquel desconocido ante los gigantes veteranos que encabezaban la reunión.
_ Me temo que estamos ante un nuevo caso de joven inexperto con aires de grandeza entre nosotros. Podría ocasionarle muchos problemas al juicio.
Mencionó Greenwich tras la finalización de la reunión mientras todo se encontraba en completo silencio sin nadie a la deriva para escuchar aquella conversación.
_ No seas tan dramático Greenwich, todo está saliendo perfectamente bien. Además ese joven no podrá hacer mucho si se mantiene al cuidado de mi bisnieta mientras se celebra las vísperas del juicio.
No obstante fueron aquellas palabras las que dejaron al viejo Greenwich totalmente fuera de órbita.
_ ¿De qué está hablando, su majestad, está insinuando dejar a cargo a ese soberbio ante las manos de la futura emperatriz?
Preguntó Greenwich con total respeto a las palabras de la mujer.
_ Así como escuchaste Greenwich. Adularia es una niña encantadora, sería incapaz de volverlo loco, además su encanto lo va a distraer durante el juicio y no habrán preocupaciones.
Respondió la mujer obteniendo por partes de Greenwich una certera respuesta callada. No obstante Greenwich conocía más que nadie las manías que aquella adolescente podría cometer.
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Aprendiz De Emperatriz III: El pecado de una inocente| Brenda Perez Miranda
Teen FictionEl tercer año para Francesca y sus amigos da comienzo de manera perfecta pero al inciar el nuevo año lectivo se percatan que nuevamente las cosas no saldrán como ellos esperaban. Una nueva amenaza invade al imperio y este inseparable grupo de amig...