Paulina está enamorada del amigo de su cuñado,un hombre que le lleva 15 años llamado Pedro Balmaceda Pascal. Se conocen el 2010 y cada verano su amor crece más y más. El vive en Nueva York y ella en Santiago de Chile.El nació en Santiago y ella en P...
Este libro está dedicado a todas mis amigas que me han estado instando a escribir desde hace un año, pero especialmente a una mujer que salvo no solo a mi madre sino también a toda una familia, a mi abuela , a mi Nena, que este viernes cumple 10 años tras del velo.
Esta historia estoy tratando de escribirla desde el 2021, pero dado el delulu, use la trama ya definida para entregarles una historia de amor.
Santiago de Chile 20 de Enero de 2010
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Ese año pasaron muchas cosas en el país: un terremoto grado 8,8 a fines de febrero , a Lorenzo mi cuñado lo despidieron de su trabajo en diciembre , en marzo entré a la Universidad de Chile a estudiar Licenciatura en Historia y en enero conocí a Pedro, en casa de mi hermana Francisca.
Somos cuatro hermanos, Francisca es la mayor y vive en el centro de Santiago. Mi madre y mis hermanos, viven en el sur, entre lagos y montañas. Llegué, después de hacer papeleos para mi universidad, Francisca no estaba, pero Lorenzo estaba con un amigo, bebiendo cerveza en el balcón del departamento.
--Pauli, ven, te presento a un amigo de Estados Unidos, Pedro, ella es Paulina, mi hermana chica postiza.
Me encontré con un hombre alto, delgado, de cabellos castaños, sin barba y unos hermosos ojos marrones. Él se encontró con una chica de piernas delgadas, vestida de negro, pelo oscuro y largo, rosada por el calor, ojos de su mismo color y con la misma expresión. Me saludó pero, su mirada me llamó la atención, se veía triste, tratando de estar bien, riendo para no llorar, lo noté gris.
--Nice to meet you.-le dije.
--Hablo español, pero gracias, nice to meet you too.
Y se río, achinando los ojitos. Me senté con mi cerveza, uniendome a la conversación de ambos, pero Lorenzo debió al rato ir a atender una llamada y quedamos solos, mirando la ciudad, comenzaba a atardecer, el cerro San Cristobal y la virgen del Cerro nos acompañaron, junto con la cordillera.
--¿Estás de visita?
Asintió, al tiempo que tragaba un largo sorbo y contestó.
--Vine a ver a mi papá, él vive aquí, bueno, nosotros somos de aquí, sólo que tuvimos que salir hace años.
--¿Te fuiste por trabajo?
--No, nos fuimos exiliados en el 76, cuando yo era un bebé y luego, ellos volvieron y yo me quedé con mi hermana, estudié teatro, me dedico a eso, en Nueva York.-suspiró, yendo a buscar otra cerveza.
--¿Eres actor?
--Sí y director teatral, de hecho, con una amiga estamos preparando una obra basada en el exilio y todo el duro proceso que significó la violencia estatal en el cono sur.
--Me encantaría verla, yo ahora estudiaré Historia, quiero investigar y publicar, mi abuelo fue asesinado también en esa época y mi papá luchó en contra de la dictadura.
