Su plan era simple y solo de un paso o eso creía, ese único paso era:
- ❝Conseguirle un omega a papá y junto a eso el amor..❞
¿Qué tan difícil podría ser?... estaba confiada y su padre siempre le dijo que si se lo proponía podría lograr todo y él nu...
Después de almorzar Esme decidio que quería un helado ya que no había encontrado a el destinado de su papá en el restaurante y el helado la ayudaba a pensar mejor, hasta estaba que pensaba en darse por vencida pero mientras su papá pedía los helados vio a varios omegas felices asi que se le cruzó por la mente "Si no encuentro al destinado de mi papá al menos puedo encontrar a un buen omega que lo ame, ¿cierto?" recibió el helado de fresa y mientras caminaban hacia una de las mesas que había ahí una señora con su hijo pasaron apurados haciendo que Esme se manche la mejilla de helado.
— Esperame aquí, ahora vengo, traeré servilletas — aviso Derek antes de ir a la heladería por servilletas.
Esme miraba su helado, la señora ni siquiera se disculpó, al contrario, la ignoró; estaba viendo sus piesitos cuando vio que alguien le alcanzó un pañuelo.
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Stiles llego al centro comercial y se dirigió a la sección de restaurantes habían muchas opciones pero eligió el de sushi, al terminar de comer le pidió la cuenta a la mesera justo estaba sacando el dinero cuando de nuevo sintió ese olor a chocolate con menta pero vio que la mesera llegó con un te de menta así que no le tomo importancia, pago y salió, estaba caminando cuando por la ventana de una tienda vio un par de tenis hermosos que merecían estar en sus pies así que entro a comprarlos ya que por su salario podía darse unos buenos gustos, estaba decidido a irse ya a la academia para su turno de la tarde pero su vista se fue directo a una pequeña que tenía embarrada la mejilla de helado y le dio tanta ternura que se acercó, sacó un pañuelo de su maletín y se lo entregó.
— Toma — sonrió
La pequeña le recibió el pañuelo con una sonrisa, en ese instante se preguntaba quién era el padre desconsiderado que dejó ahí a esa pequeña tan tierna.
— Muchas gracias por el pañuelo — agradeció la pequeña.
— No te preocupes — justo cuando iba a preguntarle dónde estaba su padre o madre, su alarma comenzó a sonar dándole a saber que era hora de ir a la academia — Me tengo que ir nos vemos —
Stiles se alejó sin darse cuenta que al irse casi corriendo una de sus tarjetas de presentación se cayó de su bolsillo al suelo, la pequeña la recogió viendo una bonita letra que decía:
Academia de baile "Love dance"
Al recordar como iba vestido Stiles, con un buso gris, una sudadera negra y tenis blancos a de seguro que bailaba aparte de tener un lindo y suave aroma a girasoles con caramelo. Derek llego a su pequeña con las servilletas.
— Aquí están — le entrego unas servilletas.
Esme las tomó y se limpió con las servilletas para no ensuciar el bonito pañuelo de aquel bonito omega mientras observaba a su papá arrugar su nariz olfateando el aire.
— Si, es un lindo aroma a girasoles con caramelo —comento la niña al arrugar las servilletas.
