Sentí como un ruido pudo despertarme, abrí mis ojos lentamente para ver mi lado completamente vacío, me sorprendí un poco ya que esperaba ver a Newt junto a mí.
Me senté y me rasque mis ojos para poder aclarar mi vista, tenía un poco de dolor de cabeza, puedo notar como llevo puesta una polera súper distinta a la que use anoche, dirijo mi vista hacia la mesa y puedo ver un plato con algo de comer y un pedazo de papel a su costado. Me levanto de la cama y siento como mis piernas y brazos duelen, no recordaba el por qué, hasta que en ese momento un recuerdo viene a mi mente sobre la noche anterior
-DIOS NEWT.- Gemía al ver a Newt entre mis piernas viéndome fijo con sus ojos cafés sobre mí.
Otra vez puedo ver otro recuerdo en mi mente.
-¿Te gusta preciosa?.- Newt gruñía mientras me penetraba con mis piernas en sus hombros
-¡SI!.- Mi boca estaba completamente abierta, de verdad gemía como una verdadera loca, hasta que en ese momento vuelvo a la realidad.
Mierda, ahora comprendo porque me duele tanto el cuerpo...
Camino con un poco de dificultad hacía la mesa, para poder ver que estaba pasando y el porqué mi rubio no estaba a mi lado, hay una clase de papel sobre ella, es una clase de nota, así que decido leerla.
Este hombre era tan lindo de verdad, parecía un sueño, como sea, decidí meterme a bañar para luego comer lo que Newt había dejado para mí, estaba delicioso. Me puse unos jeans claros y una polera negra holgada con mi cabello amarrado en una cola alta, salí de mi cabaña para tratar de encontrar a Thomas pero no pude verlo, avancé un poco y pude ver a Chuck sentado en un tronco, jugando con un pequeño palo
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-Chuck.- Lo llamó y este automáticamente me mira.- ¿Que haces solo pequeño?
-Emma, despertaste al fin.- Me sonríe pero luego baja su mirada al piso, sospecho que algo ocurrió
