III

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Un grito ahogado escapó de sus labios y sus manos tocaron frenéticamente su pecho y su vientre; no había nada. Ni un vientre abultado, ni una daga clavada en su cuerpo.

Tampoco había dolor y eso que había dolido, horrible, morir dolía y mucho. Aunque pensándolo ahora, ¿no debería de estar en algún lugar en donde lo castigaran por sus acciones? O al menos en donde sería juzgado.

Observó la habitación en donde se encontraba, con un nudo en el estómago descubrió que era su antigua habitación. No podía ser posible que se encontrara ahí primero porque se veía limpio y su antigua casa estaba prácticamente en ruinas.

Debía de estar soñado o quizás en una pesadilla; tenía que regresar a donde se suponía que debía de estar. Cerró los ojos y se dejó caer de lado, sabía que no tocaría el piso porque entonces regresaría a donde debía de estar.

Era lo más lógico.

Cuando caía, una sonrisa tiró de sus labios, pero esta se fue cuando su cuerpo impactó duramente en la madera. Gimió de dolor ante el fuerte golpe.

Dios todo su cuerpo pálpito de dolor ante el golpe, la puerta se abrió y pudo ver cómo ingresaba por la vista de telas y los colores una mujer. Rápidamente, fue sostenido e instado a levantarse.

—Joven Jungkook, ¿se encuentra bien? —Jungkook la observó y su alma casi se le va, era Chunga su doncella.

Entonces fue cuando se dijo a sí mismo que no había muerto porque Chunga aún estaba viva. Ella se había casado con un comerciante hace algunos años y vivía una buena vida.

Dios no estaba muerto, pero estaba en el pasado. ¿Cómo era posible? Era justo como esas novelas populares.

Uh, era exactamente igual, ¿ahora tenía que reivindicarse? Eso era lo que hacían todos los que regresaban en las novelas.

Pensándolo bien, era una excelente idea, poder evitar todos los problemas futuros, así como las desgracias. Tenía una nueva oportunidad. ¿Acaso él no había pedido una oportunidad para poder hacer las cosas bien?

¡Tenía una nueva oportunidad! Sonriendo a lo grande, abrazó a su doncella, quien lo observaba de manera extraña.

— ¡Hoy será un día espectacular! —Chunga solo le sonrió amablemente.

—Ha recibido una carta —ella lo observó llena de censura y supo de quién era la carta.

La tomó y rápidamente la abrió. Saber en qué momento de su relación se encontraba con Namjoon era importante, no quería que fuera demasiado tarde.

En la carta lo estaba invitando a dar un paseo por el lago para que pudieran ver la entrada de la primavera. Ahora leyendo bufo sabía que de ir lo único que vería serían árboles esqueléticos sin ninguna hoja; era demasiado pronto, incluso para poder ver una flor.

Notando eso, se dijo que había sido bastante crédulo anteriormente. Con saña rompió la carta en varios pedazos y los dejó caer. Además, no siendo suficiente, se levantó del piso y luego pisoteó algunos restos. Era un acto infantil, pero era una clara muestra de su desprecio.

Chunga notó eso y estaba muy agradecida de que su amo por fin tomara conciencia. Ella sabía que la relación que mantenía con el príncipe Namjoon no era adecuada. ¡Por todos los cielos su joven amo estaba comprometido! Pero ahora, notando ese leve cambio, ella tuvo esperanzas.

—Asegúrate de informarle que tengo asuntos pendientes que me impiden aceptar tal invitación —con eso ella salió rápidamente.

Sabía que su joven amo no tenía nada que atender, pero solo el hecho de rechazar tal invitación la llenaba de tranquilidad. Esperaba que nada siguiera, porque de lo contrario su corazón no soportaría tanta preocupación.

Crystal Hierarchy (Taekook)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora