Mudarme con él no es algo que realmente estuviera dentro de mis posibilidades, no cuando probablemente me odiaría en un par de meses.
—¿no crees que es muy pronto?—pregunté susurrando, como si alguien pudiera oírnos.
—¿pronto? Tengo tres años conociéndote y tal parece que comenzaste a atraerme desde mucho antes que yo pudiera admitirlo, no diría que es poco tiempo.
—déjame pensarlo, es un cambio enorme
—no tienes que aceptar nada ahora, la propuesta estará en la mesa hasta que decidas tomarla.
—gracias—sonreí con el corazón encogido ante lo empatico que se estaba comportando Namjoon con toda esta situación
Levanté el rostro para poder darle un pequeño beso, algo corto antes de volver a dormir, pero por un momento olvidé lo intenso que puede resultar ese hombre y en menos de lo que pensaba posible el hombre ya se había acomodado entre mis piernas.
—¿ya te recuperaste?—le pregunté cuando comenzó a besarme el cuello.
—siempre para ti—aseguró agarrando mi pierna para engancharla a su cintura
Comenzó con movimientos lentos, su miembro duro y erecto se frotaba contra mis labios inferiores. La rapidez con la que me estaba humedeciendo le hacía aún fácil aquella tarea.
—todavía tenemos dos noches más aquí—susurró muy cerca de mi oído sin dejar de moverse
—ajá—dije incapaz de pronunciar más palabras, si abría la boca comenzaría a jadear como si no hubiera tenido a tremendo hombre dentro de mi hace menos de seis horas.
—cambia tus cosas a mi habitación—no me lo estaba preguntado—no se porque—jadeo haciendo que me estremeciera—acepté que te quedarás en otra maldita habitación—mordió el lóbulo de mi oreja.
La cama comenzaba a moverse debajo de nosotros, lo poco que me quedaba de sentido común se fue a la mierda cuando sentí como su glande se deslizaba unos milímetros dentro de mi. Me fue casi imposible no pedirle que me penetrara de una maldita vez.
—de solo imaginarlo—jadeo Namjoon expresan verbalmente lo que yo había pensado.
No supe cómo y realmente poco me interesó cuando ocurrió, pero las piernas de Nam se movieron entre las mías hasta que le fue posible para el darme vuelta sin mayor esfuerzo quedando boca abajo. Me sobresalté un poco cuando sus largos dedos se cerraron en mi cadera obligándome a levantarla con las rodillas.
Mi cuerpo tembló cuando sentí su mano pasearse por mis muslos hasta llegar a mis glúteos, acomodé mi cabeza de lado para poder verlo de reojo.
—podrías tomar una foto—dije cuando vi ll hipnotizado que parecía mirándome
—no dudes que lo haré—pasó sus dedos por mi humedad hasta presionar mi clitoris—pero después—murmuró y sin dejar de tocarme estiró su brazo hasta la mesita de noche
—no—jadeé—solo no te corras dentro
Namjoon respiro profundamente y se quedó quieto por algunos segundos, como si estuviera pensando mis palabras con atención. Miré con detalle cada movimiento que hacía, como se posicionó de mejor manera, como sonrío al sacar sus dedos y ver lo húmeda que estaba.
La primera embestida fue lenta, se adentró poco a poco hasta que sentí que ya no podía ir más dentro. Aquella fue una sensación totalmente nueva, el no sentirlo con nada era mucho mejor de o que había imaginado.
No quería pensar demasiado en lo que significaba que el fuera el primer hombre al que le pedía no usar protección.
Su principal agarre fue directo a mi cabello, enredando su mano en este para así poder mantenerme en la posición correcta impidiéndome que enterrara mi cabeza en las almohadas para amortiguar el ruido de mis jadeos.

ESTÁS LEYENDO
Closer• KNJ
FanfictionSer niñera no debería de ser tan complicado o al menos eso pensaba hasta que se dió cuenta que Kin Namjoon no e Sun hombre fácil y es que ¿cómo podría ser fácil cuidar a la hija del jefe de una importante mafia? Las cosas se complican más con el pe...