capitulo 13

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Pov t/n

Solo podía escuchar mi respiración al correr con todas mis fuerzas, Kokushibo se me había perdido de vista, ya no lo sentía venir detrás de mí, pero si había alguien que me estaba pisando los talones

el estupido pilar de la niebla

el bosque que rodeaba la base principal estaba rodeado de flores de glicina, y quizá a las lunas no les pase nada, pero cuando yo me expongo mucho tiempo a ellas sí tenían su efecto, ya estaba un poco mareada, pero no me podía detener, no estaba segura, este niño era demasiado silencioso en sus pasos, pero sentía que cada vez estaba más…

mierda.

me agaché y sentí como su katana cortaba justo donde estaba mi cabeza y luego tuve que rodar porque nuevamente su katana venía justo donde mí, ví su pierna cerca, saqué una pequeña daga que siempre traía conmigo y traté de enterrarla, pero solo logré hacerle un corte y seguí corriendo, no me podía enfrentar a él, no en estas condiciones… siento ganas de vomitar y estoy un poco desorientada, estúpidas flores, son más fuertes de lo que pensaba

sentí algo en mi brazo, tenía un corte que se regeneró casi de inmediato, me subí a un árbol rápidamente para salir un poco del alcance del pilar, y para alejarme de la Glicina y recuperarme.

pero tokito llegó de inmediato, se detuvo justo abajo de donde estaba, traté incluso de contener la respiración para que no me escuchara, como me encantaría tener la habilidad de desaparecer, lo seguí mirando, el tenia una postura relajada pero era muy peligroso, y casi chillé cuando alzó la mirada y sus ojos se encontraron con los míos

-¿Que nunca te cansas? -le dije con el ceño fruncido, y aunque traté de arrancar por altura el me alcanzó de inmediato y caí de bruces contra el suelo

estuve esperando a que me matara, pero sentí un gran golpe lejos de mí, alcé mi cabeza y ví el cuerpo del pilar un poco más allá

-me debes una -dijo kokushibo extendiendo su mano para alcanzarme

-¿lo mataste? -le dije mientras me colocaba de pie

-no creo, solo debe estar inconsciente

-genial, por que quiero hacerlo yo

-espera -me tomó de la cara y me miró serio- ¿la glicina aún te afecta?

-algo… -tragué para ahuyentar las náuseas- pero estoy bien… solo matemos a…

escuchamos y sentimos los pasos de Himejima

mierda.

-será para otro día -sin que me diera cuenta me tomó de detrás del cuello y juntó su boca con la mía por unos segundos, yo puse las manos en su pecho para alejarlo- trata de sobrevivir

-¿me vas a dejar sola? -dije abriendo los ojos de par en par

-si nos separamos es mejor, adios t/n

-¡HIJO DE PUTA! -le grité, pero él ya estaba lejos

sentía a Himejima cada vez más cerca y no me quedó de otra que esconderme, si salía corriendo de seguro me escucharía y… toque mi cuello

ay

a los pocos segundos llegó, tenía un rastro de sangre en la frente, tuve que resistir los impulsos de ir donde él y ocupar mi técnica de sangre para que nada le pasara, pero me mantuve mirando, el fue directo al cuerpo de tokito y puso sus manos en su cuello, hasta yo sentí como suspiraba aliviado, el pilar de la niebla, aunque inconsciente por el gran golpe que le dió kokushibo, estaba vivo, así que Himejima lo tomó entre sus brazos y volvió por donde venía.

prefirió salvar a su amigo que ir detrás de los demonios…

lo amo por eso

volví con cuidado a la ciudad, mientras más me acercaba mejor me sentía, aunque lo más seguro es encontrar a un humano que poder devorar para restaurar fuerzas rápidamente, y si era un cazador mucho mejor, porque habían muchos por acá y por allá; todo era un caos, las patrullas de policías iban de allá para acá, muy asustados, y los cazadores estaban haciendo su trabajo, incluso, cuando me estaba acercando al punto de ataque, que era un bar, sentí a tamayo…

antes de que alguien me viera en mi forma de demonio volví a mi aspecto de Humana, me saqué la chaqueta y la tiré por ahí y seguí caminando por medio del caos

-¿señorita? -sentí que alguien me tomaba del brazo, lo miré, era un recluta- ¿se encuentra bien?

puse mi mejor cara de mujer desamparada

-no mucho, estoy un poco mareada ¿qué fue lo que pasó aquí?

-nosotros la ayudaremos, no se preocupe, acompañeme -miró a otro lado- ¡ey! -otro recluta de más allá lo miró- ¡voy a llevar a esta señorita donde Kanae!

-claro murata -le respondió el chico y yo sonreí

pero mi sonrisa se desvaneció cuando lo escuché dar órdenes a lo lejos, Himejima…

mierda…

¿Será mejor irme sin que él supiera que estoy aquí?

¿O finjo que me crucé con todo y que tengo miedo para que me acompañe a casa?

.
.
.

agradece a Himejima Murata, que vas a vivir un día más…

decisiones 3 - Himejima x t/n Donde viven las historias. Descúbrelo ahora