Capítulo 12.

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Una rosa roja y una nota

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Una rosa roja y una nota.

Maratón 3/5.

Salí en busca Dean y Jaxon ya no estaban en el maldito estacionamiento solo se encontraba el cuerpo del de seguridad tirado supe que fue uno de ellos. Regresé de nuevo adentro en busca de mörder para largarme ya de aquí, seguía en el mismo lugar con Melina que intentaba poner de pie a Axel que ya estaba en otro mundo.

—¿No los encontraste? —niego, le ayudo a poner de pie Axel—.Ya une a Lucas a tu poliamor.

—No lo voy a unir a nada.

Llamo a mörder que se levanta sale detrás de nosotras a la salida, subimos Axel al asiento de atrás junto con mörder. Enciendo el motor manejo en dirección a la casa, tenemos que irnos antes de que encuentren el cuerpo y la policía no tardé en llegar.

—Lucas solo vino para comerte la boca y que ellos te vieran.

—Lose por eso le seguí el beso. —además un beso no se le niega a nadie, el carro se zigzaguea.

—No quiero morir joven. —dice melina poniéndo su mano en su corazón.

—Perdón, por si se te olvida estoy borracha y drogada.

Se ríe.—Yo también, si manejó yo saldremos peor que pájaro volador.

Trato de concentrarme en la calle pero la cabeza me da vuelta. Pero logró llegar a casa me parqueo encima de la acera bajamos de la jeep, saco a mörder y luego Axel como puedo abro la puerta y la cierro.

Subimos a Axel a la habitación que comparte con Melina lo acostamos en la cama, mörder se queda con ellos en el cuarto y les cierro la puerta. Me dirijo a mi habitación todo está oscuro, empiezo a quitarme la ropa quedando desnuda y me tiró a la cama boca abajo los párpados se me van cerrando lentos.

En mi nuca siento una respiración pesada unos dedos recorren mi espalda, quiero abrir los ojos pero el sueño me está ganando unos dedos rozan mi piel al sentir que me tapan con la sábana.

Los rayos del sol entran por la ventana de mi habitación y me tengo que tapar los ojos con mi brazo. Una suave brisa me eriza los pezones y es donde me percató que dormí desnuda, me levanto de la cama y me dirijo al baño.

Abro la ducha el agua fría me despavila el sueño lavo mi cabello y enjabono mi cuerpo, de último me aplicó mi exfoliante al terminar salgo envuelta en una toalla y una enrollada en mi cabello.

Arrugo las cejas al ver que en el tocador hay otra rosa roja pero esta vez con una hoja blanca doblada, me acercó abro la hoja; Preciosa, disfruta este tiempo con ellos. Cada palabra son recortes de periódicos, ¿Quien entro a dejarme esto? De seguro fue Biel que anda con sus bromas, meto la rosa y la hoja de papel en una de las gavetas del tocador.

Kaela [Proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora