Tóxica -Jenlim - Jenlisa -GIP

CAP 26

∆POV JENNIE

Desde que las terapias comenzaron, he notado un cambio significativo en mi relación con Leo. Cada detalle de él, cada gesto y palabra, me hacen sentir más conectada y segura. Antes, mis celos solían ser abrumadores, pero ahora, aunque aún me cuesta mantenerlos bajo control, siento que estoy en el camino correcto. Las sesiones de terapia realmente nos han ayudado a ambos a crecer y a entendernos mejor. A veces todavía me siento insegura, pero saber que Leo está a mi lado me da fuerza.

Hoy, Leo me acompaña hasta la puerta de mi salón, como siempre. Me encanta cómo cuida de mí, cómo se preocupa por los pequeños detalles. Su presencia me hace sentir amada y apoyada.

-Voy a buscarte para el descanso -me dice con una sonrisa y me da un dulce beso antes de entregarme mi mochila-. Te amo, Jennie ten un bonito día , si algo pasa o alguien te molesta me lo dices.

-Yo también te amo, Leo. Nos vemos luego. -Le respondo, despidiéndome mientras él se aleja.

Entro al salón, sintiendo una mezcla de excitación y ansiedad. Al ver a las Chicas, me siento aliviada. Me acerco a ellas, sonriendo y saludándolas.

-¡Hola a todas! -Digo alegremente, uniéndome a ellas en la charla.

-Hola, Jennie.-Me responde Rose, con una cálida sonrisa- Estábamos hablando sobre el nuevo alumno que va a llegar hoy.

-¿Sí? -Pregunto, interesada en la conversación.

Nayeon, siempre la primera en enterarse de los rumores, dice:

-Escuché que es guapo.

Irene añade, con una mueca curiosa:

-Yo solo sé que es rubio.

Rose interviene con una sonrisa traviesa:

-Yo escuché que es alto.

Yeri, que siempre tiene información jugosa, dice:

-Escuché que lo expulsaron de su otra escuela.

Karina, con un aire de misterio, agrega:

-Yo escuché que es muy trabajador.

Nayeon se vuelve hacia mí, levantando una ceja.

-¿Y tú, Jennie? ¿No has oído nada?

Justo cuando estoy a punto de responder, el profesor entra al salón, poniendo orden y llamando la atención de todos.

-¡Atención, clase! -dice el profesor, levantando la mano para hacer silencio-. Hoy tenemos un nuevo estudiante que se unirá a nuestra clase. Quiero que lo reciban cordialmente.

Siento una chispa de curiosidad y anticipación. Me pregunto quién será y cómo encajará en nuestro grupo. Las chicas también parecen emocionadas, y puedo ver que algunas están preparadas para evaluar al nuevo estudiante.

El profesor llama al nuevo estudiante a entrar, y todos giramos nuestras cabezas hacia la puerta, esperando ver a la nueva adición a nuestra clase.

El salón se quedó en silencio cuando el nuevo estudiante finalmente cruzó la puerta. No podía creer lo que veía. Mis ojos se abrieron con sorpresa y, por un momento, el mundo pareció detenerse. Era Kai, el mismo conductor que me llevó a casa la vez que me enojé con Leo. Nunca imaginé verlo aquí, y menos como un nuevo compañero de clase.

Él se veía diferente a como lo recordaba, tal vez porque ahora lo estaba observando con más detalle. Debo admitir que es... demasiado guapo. Con su cabello rubio oscuro despeinado y su actitud relajada, definitivamente captó la atención de todas las chicas en el salón. Su sonrisa despreocupada solo añadía a su atractivo.