Tóxica -Jenlim - Jenlisa -GIP

CAP 43

∆POV JENNIE

-No puedo creerlo.- Las palabras resonaban en mi mente mientras caminaba por el pasillo, apretando los puños. -¿En serio Leo terminó conmigo por una estupidez como esa?-. ¿Cómo podía ser tan inmaduro? ¿Tan frágil en su confianza? Todo esto por un estúpido celo hacia Kai.

Sabía que Kai llamaba la atención, no era tonta. Sus músculos, su altura, su rostro, todo en él gritaba "atracción". Pero de ahí a que Leo se pusiera así... era ridículo. -¿Qué esperaba, que me quedara ciega a lo obvio?

Claro que Kai era guapo, cualquiera con ojos podía verlo. Pero de ahí a que pensara que yo iba a dejarlo por él, era una tontería.

-Lo peor de todo es que Leo sabe perfectamente que no estoy enamorada de Kai o eso quiero también pensar yo, pero Leo sabe que lo que siento por él es fuerte, que lo que tenemos no es cualquier cosa. Pero aun así, se dejó llevar por esa inseguridad. Y ahora, ¿qué? ¿Me terminó? -¡Por favor!-

Lo único que me pasaba por la cabeza era que eventualmente Leo vendría corriendo de vuelta, pidiéndome perdón, rogando que lo aceptara de nuevo. Siempre lo hacía.

¿Y qué se supone que haga yo mientras tanto? ¿Llorar?. No. Yo no soy de esas chicas que se quedan esperando a que el tipo que las dejó regrese. No iba a cambiar solo porque él me lo pidiera. ¿Quién se creía que era para exigirme algo así? Yo no iba a ser otra versión de mí misma solo para calmar sus inseguridades. Si tenía un problema, ese era su asunto, no mío.

Y Kai... Bueno, Kai no era más que una curiosidad para mí. No me enamoraba de él, pero había algo intrigante en él. ¿Qué será estar de novia con alguien como Kai? Me lo había preguntado más de una vez desde que lo conocimos. No es que fuera a dejar a Leo por él, claro que no, pero tampoco podía negar que la idea cruzaba por mi mente de vez en cuando.

-Quizá Leo tiene razón en algo- murmuré mientras me dirigía de vuelta a la cafetería. -Tal vez sí estoy interesada en Kai, aunque sea un poco- No era amor, ni siquiera atracción profunda. Era más como... curiosidad. Quería saber qué tan diferente sería estar con alguien como él. Y si eso hacía que Leo se sintiera incómodo, bueno, ese no era mi problema.

-Al final del día, Leo siempre regresa- me dije. -Y esta vez no será diferente.- Sabía que en algún momento vendría rogando por mi perdón, diciendo que se había equivocado, que fue un tonto por ponerse celoso de Kai. Y cuando eso pasara, yo sería quien tendría el control.

Entré a la cafetería y miré alrededor. -Veamos cómo sigue Kai- Dije mientras escaneaba el lugar en busca de él. No podía evitar sentir una pequeña sonrisa formarse en mis labios. No era enamoramiento, pero la situación me divertía.

-Leo, siempre tan predecible-me dije. -Pronto estarás de vuelta a mis pies.

Volví a la cafetería, buscando el lugar donde antes estábamos sentados. Mis amigas ya no estaban. Seguramente lidiaban con los dramas de sus novios. Sus problemas me parecían tan... predecibles. No podía evitar pensar en cómo siempre parecíamos caer en el mismo ciclo de discusiones y reconciliaciones.

Pero entonces lo vi. Kai estaba allí, con la cabeza apoyada sobre la mesa, los ojos cerrados. Me acerqué lentamente, sin hacer ruido, y me senté a su lado. Mis dedos se movieron casi por instinto hacia su cabello, acariciándolo suavemente no solía hacer esto con nadie que no fuera Leo pero al ser Kai me gusta hacer estos gestos.

Kai al sentir mi toque sonrió. "Su sonrisa es tan bonita," pensé. Incluso más que la de Leo, lo que me tomó por sorpresa. ¿Desde cuándo pensaba algo así?

Kai abrió los ojos lentamente y me miró con esa sonrisa relajada que ya empezaba a reconocer.

-¿Dónde habías ido? -preguntó, con la voz algo ronca.