CAP 39

248 29 12
                                    

⚠️SEILRENE⚠️
_______________________

POV SEULGI

Observé cómo la situación en la cafetería se desmoronaba rápidamente. Primero fue Leo, que se levantó abruptamente después de la pelea con Kai, siendo arrastrado por Jennie. El ambiente estaba cargado, pesado, y no podía evitar sentir que algo más estaba por estallar. Luego fue Jisoo. Lo vi reprocharle algo a Rose antes de marcharse, su furia evidente en cada paso que daba al salir. Y ahí estábamos los demás, sentados, como si estuviéramos esperando nuestro turno para explotar.

Mantuve la vista fija en Irene por unos segundos. Ella estaba justo al lado de Kai, con esa expresión preocupada en el rostro. No podía creer lo que estaba viendo. Kai ni siquiera tenía nada grave, solo un rasguño insignificante, pero ahí estaba Irene, revisando en su mochila buscando algo cuando lo vi estaba sacando un botiquín ... El botiquín.... El botiquín que siempre llevaba para mí.

Para mí. Ese botiquín era para mí, no para él.

Me enoje demasiado viendo eso y caminé hacia ella antes de que pudiera hacer algo más. -¿Qué estás haciendo?-, le solté, más molesto de lo que pretendía. Irene me miró, como si no entendiera mi enojo.

-Solo voy a curarlo- respondió, calmada. Pero eso no hacía nada para calmarme a mí.

-¿Con mi botiquín?-Espeté, señalando el maletín que sostenía en sus manos. -Ese botiquín es mío. Es el que usas cuando me lastimo, no para este... ¿por un rasguño?- Me esforcé por no levantar la voz, pero la frustración ya estaba empezando a brotar. ¿Por qué tanto escándalo por un simple rasguño? Kai ni siquiera estaba realmente herido solo se hacia la víctima y las chicas creían si mentira de lesionado.

-Seulgi, cálmate- dijo Irene, mirándome con esa expresión de paciencia que normalmente me desarmaría. Pero no esta vez.

-¿Calmarme?- Me reí, sin humor. -Ni siquiera le pasó nada, Irene. Kai es solo un llorón que está aprovechándose de toda esta situación para tener tu atención. No necesita tu ayuda, y ciertamente no necesita que uses mi botiquín para eso.

-No le hables así- me dijo, levantando la voz un poco, su rostro tenso.

-Bien, haz lo que quieras- respondí, dando un paso hacia atrás. -Pero cuando termines de jugar a la enfermera, no vuelvas a buscarme- Mi voz era fría, más fría de lo que había planeado, pero no me importaba. Estaba furioso. Sin decir nada más, me giré y salí de la cafetería, ignorando las miradas de los demás que seguían puestos en nosotros.

Cada paso que daba hacia la salida sentía como la rabia me consumía. No podía creer lo que acababa de pasar. Irene preocupada por Kai. Kai, ese estúpido que acababa de llegar, que había metido su nariz en todo arruinando no solo mi relación la de todos mis amigos. No quería ni pensar en cómo habíamos terminado así, pero sabía una cosa: no iba a quedarme allí para ver cómo mi novia le prestaba más atención a un rasguño de un idiota que a mí.

Me fui directo al gimnasio, el único lugar en la escuela donde sabía que podría estar solo por un rato. No había clases de deportes programadas, y necesitaba un lugar donde pudiera dejar salir mi frustración sin que alguien más me viera. Entré y caminé hasta uno de los rincones más apartados, frotándome el cabello con fuerza, intentando calmarme. ¿Qué demonios estaba pasando? Todo se había salido de control tan rápido. Ayer, Irene y yo ya habíamos discutido por Kai, por la forma en que lo alababa, como si fuera algo especial. Y ahora esto... como se veía que no le estaba importando para nada nuestra relación eso y que soy el único idiota en la relación viendo cómo solucionar el problema.

De repente, sentí un tirón en mi brazo. Me giré, sorprendido, y allí estaba Irene, mirándome con el ceño fruncido.

-¿Por qué te fuiste?- preguntó, su voz firme pero con un toque de preocupación. Su mano todavía sostenía la mía, pero se sentía diferente, como si fuera un agarre más fuerte de lo normal.

Tóxica -Jenlim - Jenlisa -GIPDonde viven las historias. Descúbrelo ahora