Tóxica -Jenlim - Jenlisa -GIP

CAP 54

∆POV JENNIE

Mientras seguía mirando mi celular, vi a Kai acercarse a lo lejos. Caminaba con esa actitud despreocupada que siempre tenía, manos en los bolsillos, y una sonrisa medio burlona en el rostro. Cuando finalmente llegó a la banca, se sentó a mi lado sin decir nada al principio, como si estuviera esperando que yo hablara primero.

-¿Cómo te escapaste? -le pregunté, genuinamente curiosa. Sabía que no era fácil salir del salón con ese profesor tan estricto.

Kai sonrió con picardía y se encogió de hombros.

-Tuve que insultar al profesor -dijo como si fuera lo más normal del mundo-. Le dije que sus clases eran más aburridas que ver cómo se seca la pintura y que ya se debería de jubilar para que nos dejara de aburrir, así que me sacó del salón.

Me reí. No pude evitarlo. Kai siempre encontraba la manera de hacerme reír, incluso cuando no tenía ganas.

-Eres un desastre -le dije entre risas, sacudiendo la cabeza.

-Pero aquí estoy, ¿no? -respondió él con una sonrisa más suave, aunque había un brillo en sus ojos que me indicaba que estaba esperando la respuesta a su verdadera pregunta-. ¿Qué pasó con Leo?

Sentí que mi risa se apagaba de golpe, y el peso de la conversación anterior volvió a caer sobre mis hombros. Bajé la mirada, jugueteando con las mangas de mi chaqueta antes de hablar.

-Discutimos... otra vez -comencé, mi voz más baja de lo que pretendía-. Él me dijo que no se sentía libre conmigo, que cree que lo mejor es estar con otra persona.

Kai se quedó en silencio por un segundo, pero podía sentir cómo su energía cambió. Cuando lo miré, sus ojos estaban entrecerrados, su mandíbula tensa.

-¿Me estás diciendo que te dejó... por otra? -Su voz estaba cargada de enojo, pero había algo más detrás de eso, algo que no podía identificar del todo.

-Sí... creo que ya está con alguien más si eso se le puede decir está mañana lo vi con una chica agarrados de las manos -admití, y el simple hecho de decirlo en voz alta me hizo sentir un vacío enorme en el pecho. Me costaba aceptar que Leo había cambiado tan rápido, y que ahora parecía tan decidido a seguir adelante sin mí.

Kai se inclinó hacia adelante, su mirada fija en el suelo mientras se pasaba las manos por el cabello, claramente tratando de calmarse.

-Ese tipo es un idiota -dijo, su voz contenida pero cargada de rabia-. ¿Cómo puede dejarte por otra persona? No lo entiendo.

Lo miré, sintiendo una mezcla de agradecimiento por su apoyo y algo más... algo incómodo que no lograba descifrar.

-No es tan sencillo -intenté explicar, aunque mi propia confusión hacía que todo fuera más difícil de poner en palabras- Tal vez yo también tuve la culpa. Fui muy celosa... muchas veces, incluso cuando no había razón. Lo golpeaba cuando discutíamos, y sé que eso no estaba bien.

Kai me miró con incredulidad.

-¿De verdad te estás echando la culpa por esto? Jennie, si me pegaste fue por qué algo no hizo bien. Él debería haber sido honesto contigo desde el principio, no dejar que esto llegara tan lejos.

No pude evitar notar el tono protector en su voz, como si lo que le estaba contando lo afectara más de lo que esperaba. Kai siempre había estado ahí para mí, pero en este momento, su enojo por lo que había pasado entre Leo y yo parecía más personal de lo que había pensado.

-Tú mereces algo mucho mejor -continuó Kai, su mirada intensa, casi penetrante- No entiendo cómo alguien como él puede dejar a alguien como tú, osea es un estúpido yo no te hubiera dejado por alguien.