Relatos +18 de las Hijas Dimitrescu x lectora/OC.
[☆] Todos los oneshots son TRADUCCIONES. Doy créditos a sus respectivos autores.
~~~Imagen de portada: AcousticMalta (Twitter)
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Daniela fue la elección perfecta para ser la primera. Es atenta, cariñosa y, sobre todo, protectora. Desde el momento en que la Madre Miranda anunció un embarazo positivo, ha estado a tu lado. Las pobres Cassandra y Bela apenas pueden verte, lo que ha provocado suficientes peleas. Después de recordárselo con delicadeza, pueden visitarte durante unos momentos antes de que Daniela las amenace. Sin embargo, es agradable, al principio apenas pasaste mucho tiempo con Daniela y ahora la tienes toda para ti. Ella siente lo mismo, a medida que avanzan los meses y tu cuerpo cambia, se deleita en lo mucho que la necesitas, ayudándote a levantarte, a sentarte, a comer, a beber, a bañarte. Ella. Está. Prosperando. Antes de que te des cuenta, es hora de que nazca la primera prole de la Casa Dimitrescu.
Tienes la mano de Daniela firmemente agarrada, no solo para sostenerla, sino para evitar que ataque a Madre Miranda. Gritas y empujas con todas tus fuerzas, rogando que esa maldita cosa salga. Todo tu arduo trabajo da sus frutos cuando escuchas ese primer llanto, el alivio que te invade seguido rápidamente por el agotamiento. Madre Miranda le entrega un paquete a Daniela, que solo lleva puesto su sujetador y sus pantalones cortos. Sostiene al bebé contra su piel expuesta y mira hacia abajo con admiración y absoluto terror. La comprensión se apodera de ella y ahora es madre.
Daniela sonríe ampliamente y te mira mientras inclina al bebé hacia abajo y te ríes. Lo primero que ves es una cabeza enorme y llena de cabello rojo brillante. Ese es el bebé de Daniela, sin duda. Presentar a tu hija a Cassandra y Bela tuvo críticas mixtas: Cassandra se puso a la defensiva al instante, queriendo matar a cualquier recién nacido que no fuera suyo, pero ese sentimiento se desvaneció instantáneamente en el momento en que el bebé se rió. Bela, por otro lado, era distante. Al principio, te dio un amplio margen, no la viste durante casi tres semanas después del nacimiento del bebé.
Finalmente, durante una noche de insomnio en la que deambulabas por el castillo e intentabas calmar al bebé, apareció Bela. Te tomó a ti y al bebé en brazos, te llevó a su habitación y calmó al bebé mientras dormías.
* * *
Más de dos años después, tu bebé es ahora una niña pequeña con tanta energía caótica como su madre. Cassandra tampoco es de ayuda. Por lo general, ella es la que incita a cualquier plan que se esté desarrollando. Mientras tanto, Daniela, con la ayuda de Bela, ha sido la compañera perfecta; se asegura de que tú y la niña coman lo suficiente, especialmente mientras amamantas. Daniela te hace bañar porque te olvidas, ¡cómo han cambiado las tornas! Bela te hace dormir siempre que puede y realmente se ha dedicado a ser madre. No es de extrañar, teniendo en cuenta que prácticamente crió a sus hermanas. Lo que hace que tu próxima elección sea más fácil que antes.
Según la Madre Miranda, pronto volverás a entrar en celo. Ahora que no estás amamantando, tu cuerpo quiere prepararse para otro. A medida que se acerca tu celo, Cassandra comienza a ponerse agresiva. Desafía a Bela en cualquier oportunidad que tiene y, por supuesto, pierde porque deja que sus emociones se apoderen. Llega un punto en el que haces que intervenga Alcina. Lleva a Cassandra, Daniela y a tu hija al dominio de Donna. Allí permanecerán hasta que termine tu celo.
