Relatos +18 de las Hijas Dimitrescu x lectora/OC.
[☆] Todos los oneshots son TRADUCCIONES. Doy créditos a sus respectivos autores.
~~~Imagen de portada: AcousticMalta (Twitter)
Summary: Lady Bela se ha estado burlando de ti durante semanas. Acercándose detrás de ti mientras intentabas trabajar, su cálido aliento jugueteaba a través de la piel desnuda de tu cuello, donde tu cabello estaba cuidadosamente atado fuera del camino. Pasando junto a ti con toques burlones que se demoraron lo suficiente como para dejar en claro que no fueron accidentales. Asegurándose de que ella siempre estuviera saliendo de su baño, usando la toalla más corta que existía, cuando vinieras a limpiar su habitación.
(Power Bottom!Bela)
Palabras: 1890
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—Serás buena, ¿no es así, ricura? —Bela ronroneó, pasando sus dedos fríos por tu mejilla—. ¿Una buena mascota solo para mí? —Su voz sonaba hambrienta, haciéndote desear abandonar la precaución y caer de rodillas allí mismo, aunque estabas bastante segura de que después de tantas noches de soñar con su sabor, la realidad sería casi demasiado erótica para eso.
En cambio, asentiste desesperadamente, deseando nada más que ser agradable y complacerla.
Lady Bela se ha estado burlando de ti durante semanas. Acercándose detrás de ti mientras intentabas trabajar, su cálido aliento jugueteaba con la piel desnuda de tu cuello, donde tu cabello estaba cuidadosamente atado fuera del camino. Pasando junto a ti con toques burlones que se demoraron lo suficiente como para dejar en claro que no fueron accidentales. Asegurándose de que ella siempre estuviera saliendo de su baño, usando la toalla más corta que existía, cuando vinieras a limpiar su habitación.
Sus bromas te debilitaban, y saber lo mal que estaba incluso contemplar la idea de tocar a una de las hijas de Lady Dimitrescu lo hacía aún mejor.
Pero fuiste buena y respetuosa y esperaste hasta que Bela hizo el primer movimiento, empujándote a su habitación y clavándote contra la pared, besándote con dureza hasta que tu cabeza comenzó a dar vueltas y te aferraste a ella, su fuerza lo único que podía mantenerte de pie.
—Sí, sabía que serías una buena mascota para mí —murmuró, quitando una mano de tu hombro y colocándola entre ti, sus nudillos rozando entre tus piernas y haciéndote gemir. Con un siseo de frustración contra tus labios, logró subirse el vestido lo suficiente como para meter la mano debajo, y un momento después metió sus dedos húmedos en tu boca.
La mera idea de poder saborearla fue suficiente para hacerte temblar de placer, y con avidez limpiaste sus dedos de cada gota de su esencia, llevándolos tan profundo en tu boca como pudiste y haciendo que el aliento de Bela se quedara atrapado en su garganta.
—Cosita dulce —susurró sin aliento cuando finalmente soltaste sus dedos con un sonido obsceno y húmedo—, tócame. —Fue todo el aliento que necesitabas, e inmediatamente comenzaste a besar su cuello, mordisqueando y rozando suavemente con tus dientes, haciéndola estremecerse contra ti. Era la ironía más deliciosa que ella se debilitara por haber sido mordida en el cuello.
