Canción: Reparaciones_ Frozen
Narra Tatiana
Soy la primera en despertarme junto con Bruno y ambos sacudimos a mí hermana para despertarla.
- Déjenme - se queja mientras se da vuelta dándonos la espalda
- Vamos Martu - sigue mí amigo - Despertemos a los chicos - susurra para escucharlo solo nosotros
- Me anoto - se sienta de repente con una sonrisa
Comenzamos a buscar objetos para despertar a los demás, lo único bueno fue que charlamos con unas flores y encontramos una que otra carta tirada por ahí. De suerte no nos encontramos una viva.
- Uno - comienza a susurrar Bruno - dos y tres - termina dando la señal para hacer ruido
- ¡A despertar!, ¡A despertarse! - comienzo a gritar en el oído de Peter para luego ir con Caleb, comienzo pincharlo con una rama ya que parece muerto
- ¡Ya salió la luz!, ¡Ya salió el sol! - sigue mí hermana sacudiendo el árbol en el que está Pool quien cae arriba de Fanny despertandola, logro ver cómo ambos se sonrojan tanto como las nubes del cielo
- ¡El que no despierta no tiene té! - termina mí amigo separando a Alai y Mateo quienes parece que durmieron juntos para luego sacudir la cabeza de Alexis hasta que despierta
- ¡Yo quiero té! - se escucha el coro de casi todos
- ¡No hay té! - digo viendo que todos se desilusionan y vuelven a querer dormir
- ¡Pero si hay troncos! - habla Martu haciendo que todos comiencen a levantarse
- Es nuestra nueva arma - comenta Bruno con una mirada picara mientras frota sus manos
- Pareces brujo maligno - me quejo por su sonrisa diabólica que cambia apenas hago el comentario
- ¿Siempre se despertaron así? - murmura Caleb estirándose mientras le crujen algunos huesos
- No siempre, pero si a veces, cuando se despiertan con ganas de molestar, o con el pie izquierdo, o cuando quieren té, o cuando estan impacientes y quieren salir... - comienza a enumerar Teo mientras se pone su sombrero
- Ya entendí - lo detiene el hijo de la Reina Roja antes de comenzar a caminar y inspeccionar si hay alguna carta cerca
- ¿No tienen ni un saco de té? - pregunta con una mínima esperanza Alai mientras hace un puchero - Ya me está haciendo efecto no consumirlo - frota las manos en su cara
- Puedo buscar por acá si querés - propone su hermano poniendo una mano en su hombro
- Yo sé encender fuego- levanta la mano Pool uniéndose al plan para tomar té - Eso si voy a necesitar ramas secas -
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Alai y el país de las maravillas
Novela JuvenilAlicia siguió viajando por el mundo en su barco, con su imaginación intacta y con dos acompañantes, su hija, Alai y su hijo adoptivo Alexis ¿Qué puede pasar si la locura se hereda? ¿Qué puede pasar si llegas a otro mundo? ¿Qué puede pasar con los de...