Jiang Zhou llevó a su gente a inspeccionar la ubicación de la tienda.
Estaba cerca del río Xi, justo afuera del muelle. Era una ubicación excelente, ya que todas las personas que desembarcaban podían verla de inmediato, y justo al lado había una posada. Si venían personas de otras regiones y se hospedaban en la posada, también notarían la parrillada. Además, no había otros restaurantes en los alrededores, por lo que la parrillada sería la primera opción si no querían comer en la posada.
Jiang Zhou claramente quedó muy satisfecho con el lugar.
Aunque el local no era muy grande, estaba bien distribuido. Estaba dividido en dos habitaciones, una delante y otra detrás. Aunque la habitación interior era pequeña, tenía una gran ventana que daba al exterior, por lo que era bastante luminosa y ventilada. En el piso superior había un pequeño desván.
Jiang Zhou nunca ha sido fanático de las cocinas oscuras y estrechas. Si iba a usar el espacio como cocina, prefería que fuera luminosa y seca.
El área exterior también era amplia, perfecta para instalar mesas al aire libre durante el verano.
El dueño anterior utilizaba el local para vender productos de la montaña, pero su negocio nunca fue muy próspero. Al fin y al cabo, si alguien realmente quería productos de la montaña, podía ir a recolectarlos directamente. Este tipo de negocio no tenía mucho mercado, por lo que decidió alquilar la tienda.
El dueño de la tienda era una persona amable. A pesar de que conocía a Jiang Zhou, no quiso aumentar el precio al enterarse de que lo querían alquilar a largo plazo.
Jiang Zhou era un ejemplo de alguien que se había hecho a sí mismo en el pueblo. Aunque no todo el mundo lo conocía, los que se dedicaban al comercio habían oído hablar de él.
Sin embargo, el dueño tenía algunas dudas sobre las modificaciones que Jiang Zhou mencionó: "¿Los cambios que planeas hacer son grandes? No querrás convertirlo en algo como una casa de té, ¿verdad?"
Era un local pequeño, y si las modificaciones eran demasiado grandes y solo se adaptaban al negocio de Jiang Zhou, ¿qué pasaría si luego quería recuperarlo? Además, las obras se harían en su local, ¿no tendría que pagarle algo extra por eso?
Jiang Zhou sonrió: "No te preocupes, no serán cambios grandes. Solo voy a poner algunas mesas afuera, y convertiré el almacén en la cocina. Lo único que necesito es instalar un par de parrillas de carbón. No te costará nada."
El dueño se tranquilizó: "Entonces firmemos el contrato."
Jiang Zhou pensó un momento: "Firmemos un contrato por cinco años. Luego veremos si lo renovamos."
"De acuerdo."
Ambos firmaron el contrato y acordaron la fecha en que el dueño se mudaría. Al ver los productos de la montaña que quedaban en la tienda, a Jiang Zhou se le ocurrió una idea.
"¿Qué harás con los productos de la montaña que te quedan?"
El dueño suspiró: "No hay mucho que hacer. El negocio ha sido difícil últimamente. Los productos están secos, así que pueden almacenarse por un tiempo. Probablemente los llevaré a casa para comerlos, y lo que sobre lo venderé en la tienda de hierbas."
Era justo lo que Jiang Zhou necesitaba: "Tengo una propuesta. ¿Qué tal si te compro todas las setas que te quedan en la tienda? ¿Te parece?"
El dueño ya había asumido que no ganaría nada, así que esta oferta inesperada fue una grata sorpresa, y aceptó de inmediato.
Lo que Jiang Zhou no esperaba era que, aunque pensaba que el dueño solo tenía unas pocas setas en la tienda, el hombre terminó sacando más de ciento cincuenta kilos.
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Después de ser poseído por un viajero en el tiempo, alcancé la cima de mi vida
Ficción históricaEl mundo es demasiado surrealista, un día te despiertas y ya ha pasado un año. Tu esposa se ha ido, has perdido la casa, y hasta el bebé que esperabas con ansias ya no está. Jiang Zhou: ¡¿Quién demonios hizo esto?! Viajero en el tiempo: Yo lo hice. ...